La prestigiosa revista científica MNRAS (Monthly Notices of the Royal Astronomical Society/ Avisos Mensuales de la Real Sociedad Astronómica de Londres), una de las más importantes del mundo en astronomía y astrofísica, ha publicado la imagen de la aurora boreal vista desde La Palma el pasado mes de mayo. El autor de la insólita instantánea, tomada en la noche del 10 al 11 de mayo de este año, es Giovanni Tessicini. La misma capta, desde Breña Alta, el impresionante fenómeno natural en el horizonte, con Santa Cruz de La Palma en primer término.
En el artículo de MNRAS, titulado ‘El evento de mayo de 2024 en el contexto de la actividad auroral de los últimos 375 años’, se examinan “los registros de auroras del hemisferio norte para el intervalo de enero de 1650 a julio de 2024, teniendo en cuenta plenamente el cambio secular en el campo geomagnético”.
“Generamos”, añade, “criterios para definir eventos aurorales extremos que se cumplen en el 0,015% de noches desde 1650 y en el 0,023% de las noches desde 1790. Después de analizar los sesgos y las tendencias en los datos, comparamos las últimas del evento del 10 y 11 de mayo de 2024 con otras tormentas aurorales extremas” e investigar “la conexión con la actividad geomagnética y de manchas solares de estos eventos extremos”.
Las auroras boreales registradas durante la noche del 10 al 11 de mayo de 2024 en gran parte planeta también se pudieron contemplar desde La Palma. El impresionante fenómeno natural, producido cuando las tormentas solares alcanzan la Tierra, hizo su aparición en el horizonte de la Isla pasadas las 00.00 horas de la citada jornada.
El Sol, ese día, tuvo una imponente tormenta solar que dejó auroras en la Península Ibérica y también en Canarias.
Las auroras, explica el Instituto de Astrofísica de Canarias (IAC), “son fenómenos naturales observables sin ningún instrumento que suceden cuando las tormentas solares alcanzan la Tierra. Estas erupciones vienen cargadas de partículas que fluyen hacia los polos siguiendo nuestras líneas de campo magnético. En esas regiones polares y subpolares las partículas penetran y colisionan con las moléculas de nuestra atmósfera, generando ese espectáculo de luces tan característico”.Cuando la tormenta solar “tiene suficiente intensidad puede llegar a interaccionar con las capas superiores de la atmósfera terrestre. Esa altura de formación provoca que se puedan llegar a avistar auroras boreales en latitudes más bajas como nuestro Archipiélago”.