La Confederación del Júcar mandó 62 avisos a Emergencias de la Generalitat mientras Mazón estaba de comida

El presidente de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón, “fue adoptando decisiones en función de la información en tiempo real que daba la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ). Y cuando hay un periodo de apagón informativo importante, superior a dos horas, cruciales para tomar decisiones, comprenderá que no me parece justo intentar trasladar responsabilidades a aquellos que simplemente tomaban decisiones en función de informaciones responsabilidad de otros”. El presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, se pronunció en estos términos este miércoles 13 de noviembre, para argumentar el retraso en el envío de la alerta a la población el pasado 29 de octubre a las 20.12 horas, cuando la mayoría de poblaciones de l'Horta Sud de València estaban inundadas y miles de personas atrapadas como consecuencia de la DANA que solo aquel día se cobró más de 200 vidas.

El periodo del supuesto apagón informativo, como aseguraron los populares, era el comprendido de las 16.13 horas hasta las 18.43 horas. Según su argumentación, en ese impasse no habrían recibido comunicación alguna de la CHJ pese al aumento brusco del caudal del barranco del Poyo que se registró posteriormente y que provocó el desastre.

La afirmación es a todas luces falsa a tenor de los 194 correos electrónicos con diferentes avisos y alertas remitidos por la CHJ, organismo dependiente del Ministerio de Transición Ecológica que dirige la ministra y vicepresidenta Teresa Ribera, a los que ha tenido acceso elDiario.es. Durante toda la jornada del 29 de octubre se enviaron otros muchos avisos desde la CHJ a Protección Civil, además de los dos correos clave de las 16.37 y de las 16.50 horas, avanzados por este diario con los que se informó a Protección Civil de la Generalitat del aumento de las lluvias en Chiva -en la cabecera del barranco del Poyo- superando los umbrales del pluviómetro instalado en la localidad, lo que dio origen al envío automático de las notificaciones.

En concreto, solo en el periodo que va desde las 14.30h, cuando el presidente Carlos Mazón estuvo en una comida en la que ofreció la dirección de la televisión pública a una periodista valenciana, hasta su llegada al Centro de Coordinación Operativa Integrado (Cecopi) pasadas las 19.30 horas, el Centro de Coordinación de Emergencias (CCE) de la Generalitat recibió un total de 62 avisos procedentes del Sistema Automático de Información Hidrológica (SAIH) de la Confederación. Se trata de diferentes situaciones vinculadas con la DANA, como la superación de umbrales en caudales y en pluviómetros. Cuando se superan estos límites, el sistema genera de forma automática un aviso que se remite al CCE, en el que se ubica Protección Civil.

En relación con el barranco del Poyo, de los 62 avisos, hubo nuevos correos informativos a las 16.57h y 17.02h por la rambla del Poyo en Riba-Roja, a las 17.27h por las precipitaciones en Chiva y a las 17.57 de nuevo por la rambla del Poyo en Riba-Roja y a las 18.28 horas de nuevo por fuertes lluvias en Chiva. A las 18.43 horas, la Confederación mandó el último aviso mediante el sensor ubicado en el barranco, a la altura de Riba-roja, que ya registraba 1.686 metros cúbicos por segundo, lo que propició que la fuerza del agua arrastrara el sistema de medición y, con todo, la alerta no se envió a los ciudadanos hasta hora y media más tarde. En total, el Gobierno valenciano recibió siete avisos por lluvias torrenciales en el barranco del Poyo (Riba-roja) y en Chiva en el horario del supuesto apagón informativo.

En cuanto al otro punto crítico, el de la presa Forata, aparece un primer aviso a las 15.54 horas; otro a las 16.52 horas en el que se advierte de la activación del escenario 1; uno más a las 16.56 horas donde se avisa de caudal de salida en el embalse; y posteriormente, a las 17.04 horas, se declara el escenario 2. Todavía a las 17.23 horas, a las 17.54 horas y a las 18.33 horas se producen nuevos avisos por salida de caudal.

Todas estas notificaciones, junto a otras relativos a otros caudales y pluviómetros, se registraron durante la ausencia de Mazón en el Cecopi, que se constituyó a las 17.00 horas a pesar de que la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) lanzó el aviso nivel rojo a las 07.36 horas de la mañana del 29 de octubre y lo mantuvo durante toda la jornada y de que la CHJ informó del colapso del barranco del Poyo a las 12.07 horas (si bien es cierto que luego se informó en tres ocasiones del descenso del caudal), lo que motivó una alerta del CCE a las 12.20 horas que se mantuvo activa durante toda la jornada.

El presidente Mazón tiene previsto dar explicaciones de todas estas situaciones este viernes a partir de las 11.30 horas en las Corts Valencianes. Se espera que, entonces, el presidente valenciano trace las líneas de un nuevo Ejecutivo, un intento de establecer un cortafuegos para quienes piden su dimisión. Mazón quiere abrir una nueva etapa y cambiar las piezas es clave.

La Generalitat insiste en la responsabilidad de la CHJ

A última hora del día, la Generalitat Valenciana ha emitido un comunicado por el cual insiste en clarificar las competencias que corresponden a la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) y a la Agencia Estatal de Meteorología en respuesta “a las afirmaciones con referencias inexactas e imprecisas del ministro de Interior, Fernando Grande-Marlaska, que ha asegurado que no hubo ningún vacío informativo, sino una comunicación directa entre la CHJ y la Generalitat Valenciana”.

La Generalitat quiere recordar al ministro del Interior que “los diferentes tipos de comunicación que remite la Confederación Hidrográfica del Júcar mediante su Sistema Automático de Información Hidrológica (SAIH) se refieren a datos sobre la intensidad de las lluvias (obtenidos a partir de los pluviógrafos), y a los datos de seguimiento de caudales en ríos, embalses, barrancos, sistemas de regulación y zonas inundables”. En este sentido, “la CHJ tiene la obligación de informar al Centro de Coordinación de Emergencias de la Generalitat sobre los incrementos relevantes de caudales que se produzcan en los ríos y barrancos de sus respectivas cuencas”.

Además, desde la Generalitat se remarca que “la CHJ forma parte del Grupo de Seguimiento de Riesgos del Comité Asesor del Cecopi, y, por tanto, a su función informativa se suma la de evaluar la situación de riesgo de desbordamiento en las cuencas fluviales y aconsejar al comité de dirección las medidas de protección que consideren”.

En opinión de la Generalitat, “resulta del todo improcedente sostener que con los datos de un pluviómetro situado en Chiva o en la rambla del Poyo en Riba-roja, el Centro de Emergencias debía haber supuesto cuánto caudal iba a circular por la rambla del Poyo. Plantear o sugerir esto, obedece a un profundo desconocimiento del funcionamiento hidráulico de una cuenca hidrográfica, o a un intento de hacer confundir a la opinión pública al tratar de justificar y esconder el hecho de que durante dos horas y media, la CHJ, entre las 16.13 y las 18.43 horas del 29 de octubre, no informara a Emergencias acerca de la evolución del caudal del barranco del Poyo, pese a que el aviso del riesgo de desbordamiento era su obligación y forma de sus funciones y competencias”.

Desde el Gobierno valenciano insisten en que la CHJ no envío “ningún aviso de subida del caudal en el barranco del Poyo entre las 16:13 y las 18:43 horas del 29 de octubre, algo que confirma el propio organismo de cuenca. En ese apagón informativo de caudales en la rambla del Poyo de dos horas y media, el caudal pasó de 28,7 m3/s a 1.686 m3/s.

La Generalitat, en su comunicado, reconoce que, en lo referido al barranco del Poyo, recibió siete avisos referidos al caudal del barranco del Poyo, otros siete de pluviometría, por fuertes lluvias, pero denuncia que entre las 16.13 horas y las 18.43 horas no recibió información en lo referido al caudal, cuando tenía una alerta activada desde las 12.20 horas y dispone de toda la información en tiempo real (como cualquier ciudadano) en la web de la CHJ, de la que este jueves ha extraído los datos para hacer su comunicado.