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Ana Pontón acusa al PP gallego de hacer “carroñerismo político con el dolor de las víctimas de violaciones”

Daniel Salgado

23 de noviembre de 2022 12:13 h

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Alfonso Rueda llegó este miércoles a la sesión de control del Parlamento de Galicia con el argumentario de su partido entre los dientes. El BNG se interesaba por las medidas de la Xunta contra la violencia machista y Rueda descerrajó gruesas acusaciones por haber apoyado la ley del 'sí es sí' en el Congreso. “Inútiles, poco eficaces y, lo que es peor, cobardes”, espetó a Ana Pontón, líder de los nacionalistas. Esta resumió la intervención del presidente de la Xunta como “carroñerismo político con el dolor de las víctimas de las violaciones”.

A Pontón no le fue fácil completar su pregunta. Los escaños del PP en la Cámara gallega son pródigos en abucheos al contrario y jaleos a los propios, sin que el presidente de la mesa ponga orden. Y a los conservadores no les gustó la mención a sus pactos con “los que niegan la violencia machista”. Se refería a la coalición de Alfonso Fernández Mañueco con Vox en Castilla y León, amparada por Núñez Feijóo. Y eso que antes había explicado que Galicia se encontraba “en la vanguardia” en el combate a la violencia de género, con normas pioneras en la materia, incluida una contra la violencia vicaria impulsada por el Bloque y aprobada por unanimidad.

La nacionalista también había enumerado algunas propuestas de su formación al respecto, como dedicar el 1% de los presupuestos a luchar contra la violencia machista, que las ayudas económicas a las víctimas aumenten “como mínimo” el IPC o la creación de juzgados específicos en Lugo, Ourense y Santiago de Compostela. Pero se encontró con un destemplado ataque del presidente gallego basado en el voto afirmativo de Néstor Rego -único diputado del BNG en Madrid- a la llamada ley del 'sí es sí'.

“Ustedes hacen política de la mala en los temas importantes”, afirmó Rueda, “y no hicieron caso de ninguna advertencia”. La reducción de algunas penas a agresores sexuales condenados decretada por algunos jueces apoyados en el articulado de la norma es el argumento al que, desde hace una semana, se agarra el Partido Popular para atacar al Gobierno de Pedro Sánchez sin reparar en sutilezas. “Está todo el país escandalizado por que se están recortando penas de delincuentes sexuales”, señaló, y calificó al BNG de “fariseo y cobarde”. Su frase retórica de que “todos los gobiernos intentan acertar” contra la violencia machista hacía aguas dentro de su misma intervención. Pontón no se arredró y defendió que la ley del 'sí es sí' “es un avance para los derechos de las mujeres y si hay fallos, que se corrijan”. “El PP siempre ha sido una rémora y un freno para los avances de las mujeres”, concluyó.

El PSdeG pregunta por la sanidad, Rueda responde con autopistas

La pregunta del Partido Socialista no corrió mejor suerte. Su portavoz, Luis Álvarez, salpicó su discurso de datos sobre el estado de la sanidad pública -Galicia es la segunda comunidad, tras Madrid, que menos invierte en atención primaria-, algunos servicios sociales fundamentales -10.000 solicitudes de dependencia permanecen sin atender- o la práctica inexistencia de políticas públicas de vivienda. El objetivo, saber lo que el Gobierno gallego “piensa hacer para reforzar los servicios públicos”.

Lo primero que topó Álvarez fueron las autopistas de titularidad autonómica, a las que la Xunta de Galicia gallego destina 4,8 millones de euros en los presupuestos de 2023 para mitigar el alza de sus peajes. A continuación, Alfonso Rueda realizó una defensa genérica de las cuentas ya que, dijo, “todas y cada una” de sus partidas están dirigidas “a mantener, reforzar y preservar” los servicios públicos. En esta ocasión no hizo esa apología de las bajadas generalizadas de impuestos tan habitual en su discurso, pese a que el resto de su organización la ha ido abandonando al tiempo que su inviabilidad se demostraba estrepitosamente en el Reino Unido.

“Su respuesta es una afrenta a esta comunidad autónoma. ¿Le parece medianemiente serio y respetuoso?”, se indignó el diputado socialista. Rueda insitió, ya en el turno de cierre, sobre las autopistas. Y acabó con un anuncio: este sábado, los menores de cinco años podrán ser vacunados contra la gripe en los hospitales del Servizos Galego de Saúde. En realidad, ya podían hacerlo desde el 10 de octubre en los centros de salud, cuando abrió la campaña de vacunación a niños y niñas de entre 6 y 59 meses.