'Callejeros' conectó con la mente del perro de la ex-Superviviente Lola, Horus, y confundió con “el de LQSA”
Callejeros ofreció este lunes 23 de diciembre una entrega especial y un tanto extraña. Titulada 'Vida de perros', se acercó desde distintos puntos a las vidas de nuestras mascotas, algunas muy emotivas como enseñar la alegría y fines terapéuticos que aportan perros de compañía cuando van a ver a ancianos a su residencia dos veces al mes.
Pero también con ejemplos pseudocientíficos, como el que protagonizó Lola Mencía, exparticipante de La isla de las tentaciones y Supervivientes que quiso comprobar cuánto le quiere su perro Horus, y si lo había pasado mal durante su traumática separación de Diego Pérez, que ella misma contó en sus redes porque él tenía la custodia.
Según el propio programa, Callejeros contactó “con una experta en comunicación con animales”, y supuestamente a través de la telepatía pudo “entrar en la mente de Horus para saber cómo vivió separarse”. Esta 'experta' trasladó lo que en teoría piensa el perro, afirmando que “agradece que nunca se ha quedado una noche solo con vosotros”, que “en la otra casa sí que ha pasado noches solo”, y que no sufrió por la separación: “Fue desconcertante, pero no pensó que lo hubieran abandonado. Él entendió que te tenías que ir. Los perros siguen recibiendo nuestra energía”.
El programa de Cuatro fue altavoz para que la mujer explicase su supuesto método: “Conecto y veo lo que siente y qué necesitan. Es una manera de conectar a nivel energético”. “Me llega información en forma de imágenes, emociones y, a veces, frases. La comunicación telepática son ondas”, añadió, contando que su tarifa son 60 euros por sesión.
La vida de lujo de un perro actor
Más divertida fue la parte del programa que protagonizó Muñi, un perro actor que resulta ser el nieto de Cook, que tiene hasta su página de Wikipedia tras ser Pancho en el anuncio de la Lotería y en la película Pancho, el perro millonario, y también participó en Los Serrano (como Pepe) y se duplicó en Aquí no hay quien viva (Valentín, el perro de Vicenta) y los inicios de La que se avecina (Camilo, el perro de Silvio).
Callejeros visitó un salón de belleza canina, especializado en perros actores y usados para cine, series y publicidad. Allí estaba Muñi disfrutando de un spa, sobre el que dieron información un tanto confusa porque afirmaron que “va a empezar a rodar otra vez La que se avecina”, pero lo cierto es que la comedia no tiene ningún perro ahora mismo, y fue su abuelo ya fallecido Cook el que participó en la serie.