La Revuelta sorprendió este lunes 16 de diciembre a su público con una de esas visitas que pocos son capaces de prever. Y no por tratarse precisamente de un invitado de pocos galones, sino porque tal como apuntó David Broncano antes de recibirle, se trataba de un entrevistado “que nunca sale en ningún programa ni va a ningún sitio”.
El presentador de TVE 'cebó' a su protagonista del día -junto a la actriz Karla Sofía Gascón, que fue la segunda invitada de la noche- como “la única persona que tiene esa profesión en España en décadas”. “Literalmente sólo él practica esta profesión. Una persona en todo el país. ¡Ni rey hay sólo uno!”, añadió el cómico, mientras Ricardo Castella subió la apuesta: “De las últimas oportunidades en las que se le puede ver en este planeta”.
El invitado no era otro que Pablo Álvarez, “el único astronauta español que va a ir al espacio sí o sí” y que está preparándose con la Agencia Espacial Europea para salir de misión antes de 2030. Él quiso acordarse de Sara García, también astronauta española que actualmente tiene la condición de “reserva” pero que a su juicio “va a ir al espacio en algún momento”.
Un regalo “histórico” para Broncano... que tendrá que devolver
Álvarez, ingeniero aeronáutico de formación, charló con Broncano de cuestiones interesantes sobre su profesión y su preparación para realizar su primera misión espacial. Pero antes, dejó descolocado al presentador al entregarle un regalo inédito e histórico: un fragmento de célula solar del telescopio Hubble, con impactos de micrometeorito.
“Te van a dejar sujetarlo y luego vendrán a perseguirte para que lo devuelvas”, advirtió, asegurando que lo que portaba en sus manos ha estado “tres años en el espacio”.
Como contraprestación, el presentador de La Revuelta le dio un obsequio del equipo para cuando emprenda su viaje de seis meses: un parasol. “Esto es para que lo pongas en la Estación Espacial Internacional. Pero luego devuélvemelo”, bromeó el cómico. “No es muy distinto a cómo proteges un satélite para controlar la temperatura”, explicó el invitado.
Curiosidades sobre las misiones espaciales
El astronauta leonés, que mide 1,88 metros, explicó que la ausencia de gravedad a la que se va a exponer durante los meses de estancia en el espacio provoca una descompresión de la columna, por lo que, a su regreso, medirá durante unos días alrededor de 1,96 metros. Un crecimiento que, no obstante, tiene una contracara, y es que aumenta el riesgo de hernias durante el período de recuperación.
Pablo Álvarez también contó a Broncano cómo es el proceso de formación y entrenamiento para las tareas que deberá desarrollar en la estación espacial, y cuáles son algunos de los peligros a los que se enfrentará durante dicha estancia.
Entre los aspectos más sorprendentes para los 'mortales', reveló que cada denominado paseo espacial tiene una duración máxima de ocho horas, en las cuales se realizan trabajos de mantenimiento e instalación: “Si terminas antes que los compañeros, tienes un rato para disfrutar de las vistas”, dijo. Una labor que realiza ataviado con un traje de 145 kilos y anclado a la nave para evitar quedar a la deriva en el espacio.
Además, el invitado, que también se acordó del pionero Pedro Duque, contó que antes de dar el “salto al vacío”, los astronautas tienen que atravesar una fase de preparación de 4 horas respirando oxígeno puro para evitar que el nitrógeno les estalle los pulmones.
Tomándoselo con humor, este ingeniero aeronáutico que habla inglés, ruso y algo de polaco contó en La Revuelta que recibe mensajes constantes de terraplanistas. De hecho, explicó a Broncano que en alguna ocasión le han pedido “que diga la verdad” y que se han mofado de que ha sido seleccionado para las misiones espaciales porque “no necesita laca en el pelo para simular la microgravedad”.
Ya en las preguntas clásicas, Pablo Álvarez bromeó sobre que la Agencia Espacial Europea no les permite pasar “ni dietas ni kilometraje” aunque les paga bien, ya que dijo tener un patrimonio entre 50.000 y 500.000 euros.