La portada de mañana
Acceder
Ayuso culmina con la universidad cinco años de políticas contra la educación pública
El Gobierno de Macron, a punto de caer: ¿qué puede pasar si triunfa la moción de censura?
'Si triunfa el golpe...', por Rosa María Artal

La fuerza de los habitantes de La Palma, protagonista de un “acojonante” anuncio navideño

La Palma Ahora

9 de diciembre de 2021 13:33 h

0

La tragedia que vive la isla de La Palma desde que comenzó la erupción volcánica en Cumbre Vieja el pasado mes de septiembre se ha convertido en protagonista del último spot navideño de Campofrío. La empresa ha utilizado la isla en su tradicional anuncio navideño como ejemplo de resiliencia. Un Karra Elejalde lleno de miedos por la pandemia y por las diferentes vicisitudes de la vida se encierra en su casa para alejarse de los peligros del mundo. Como consecuencia, deja de vivir, porque “vivir, acojona”.

El anuncio publicitario de Campofrío ha sido dirigido por la cineasta Iciar Bollaín e ideado por las directoras creativas Mónica Mora y Raquel Martínez. El protagonista de Acojonados vive sumido en la desidia hasta que enciende la televisión y aparece Victoria Torres, una viticultora de La Palma que a causa de la erupción volcánica que se inició el pasado 19 de septiembre y amenaza con quedarse durante las fiestas navideñas ha perdido sus viñas y parte de su vida, una historia real.

Sin embargo, la palmera, lejos de dar un discurso fatalista, realza en sus declaraciones la resiliencia de los vecinos de la isla y su calidad humana para ayudarse ante tal crisis. “Me siento muy orgullosa de cómo nos cuidamos. Son 6.000 personas fuera de casa. Quien tiene un lugar que ofrecer lo ha ofrecido. He sentido miedo, pero también el impulso de continuar, porque quiero, porque creo que es importante y porque la vida sigue”.

Es precisamente la historia real de Victoria Torres, cuyas viñas hoy son ceniza, el que hace cambiar el chip a Elejalde y lo anima a salir a la calle. “Lo que más me acojona”, termina diciendo en el spot, “es que se nos olvide que vivir es acojonante”.