El dirigente de Podemos en Las Palmas de Gran Canaria Javier Doreste ha opinado este viernes que, si la dirección estatal de su partido considerara la expulsión del consejero del Cabildo Juan Manuel Brito, ofrecería un ejemplo de cómo regenerar y luchar contra la “vieja política”.
En declaraciones a los periodistas, el edil de Urbanismo de Las Palmas de Gran Canaria ha informado de que se ha trasladado a la dirección estatal la actuación del vicepresidente segundo y consejero de Medio Ambiente del Cabildo por el “ataque y desprecio” que considera que ha cometido contra los círculos de la organización y por practicar el “nepotismo”.
Así mismo, ha indicado que se ha optado por elevar esta situación a los órganos estatales de Podemos para asegurar una actuación “garantista” para Brito y que no se ha consultado previamente a la dirección regional del partido porque los círculos son “autónomos y transversales”.
El también teniente de alcalde de Las Palmas ha acusado a su compañero de partido de estar contratando a personal de confianza como “comisarios políticos” para controlar a los funcionarios y a la administración: “Ésa es la vieja política y no hemos fundado Podemos para eso, para que sea una agencia de colocación y de extrañas subvenciones”, ya que ha dicho que el Cabildo también ha concedido ayudas a la ONG a la que perteneció Brito.
Doreste ha negado que se trate de una operación de “acoso y derribo” contra Juan Manuel Brito dentro de Podemos y ha explicado que las diferencias que se han mantenido con él en los últimos quince meses se han resuelto de manera interna, pero ha sido él quien lo ha hecho público.
Ha insistido en que el “ataque” que, a su juicio, ha protagonizado contra los círculos que posibilitaron su elección, al igual que la suya como concejal, ha sido el detonante para exigir en un manifiesto la actuación de los órganos de dirección de Podemos: “Brito ha abierto la caja de los truenos” .
El edil ha manifestado que se debe mantener el respeto debido a los círculos y la labor que desempeñan para cambiar la manera de hacer política, pues, según Doreste, Brito ha criticado la actitud de “complacencia” de estos órganos, así como su falta de trabajo, y ha olvidado que los cargos públicos están sometidos a su control.
Según Doreste, se puede contratar a “asesores amigos”, pero no para colocarlos en cargos que pertenecen a la estructura administrativa, como son los directores generales, que tienen que ser funcionarios, al tiempo que ha considerado que ha abusado de las contrataciones de personal de confianza, que ha cifrado entre siete u ocho.
El vicepresidente del Cabildo ha declinado hacer manifestaciones al respecto y ha anunciado que estudia iniciar posibles acciones legales.