El presidente del Cabildo de Tenerife, Carlos Alonso, ha propuesto este jueves implantar una tasa turística que afecte a las empresas de alquiler de coches, cuya recaudación, que sería “importante”, se destinaría a la mejora de los servicios públicos y al complemento de las rentas más bajas, por ejemplo a través de la Prestación Canaria de Inserción (PCI).
En una entrevista concedida a la Cadena SER y recogida por Europa Press, ha admitido que su postura sobre la tasa turística convencional “está cambiando” y considera que el sector “debe contribuir más” a la redistribución de la riqueza en la isla.
No obstante, no apoya que se grave la pernoctación de los visitantes y por ello se dirige hacia las empresas de rent a car, a las que considera que se debería colocar una tasa de “dos o tres euros al día”, lo que permitiría reducir la congestión de tráfico y la contaminación, siempre que baje como consecuencia de ello el número de usuarios.
Alonso ha señalado que se debería rebajar la fiscalidad en el caso de que estas empresas adquieran vehículos de propulsión eléctrica, medida con la que se les “ayuda” a acometer la transición tecnológica.
El presidente insular comentó que una tasa de estas características es competencia del Gobierno de Canarias, y propone que debería aplicarse a través del IGIC, como ocurre con el tabaco, por ejemplo, con un tramo de gravamen fijo (el de dos o tres euros) y otro porcentual. En el aspecto de que se grave a través del IGIC coincide con Podemos.
En su opinión, imponer una tasa de estas características “no incide” sobre el precio de la actividad turística. Además, resaltó que el coste de un coche de alquiler en Canarias es “muy bajo”, de más tres euros diarios de diferencia con la Península. Esta propuesta la defenderá el grupo nacionalista en el próximo pleno del Cabildo.