Inmigrantes sirios vuelven a concentrarse para exigir su traslado a la Península desde Ceuta
Unos 30 inmigrantes sirios han vuelto a concentrarse desde primera hora de la tarde de este miércoles ante la sede de la Delegación del Gobierno en Ceuta, en pleno centro de la ciudad autónoma, para exigir su salida hacia la Península a través de una fórmula “similar” a la que se ha utilizado para hacer lo propio con los 200 compatriotas que ha llegado a haber en Melilla.
El Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI) de Ceuta acoge actualmente a 45 sirios, una quincena menores de edad y tres nacidos ya en la ciudad autónoma. Del grupo de adultos, los que más tiempo llevan en territorio español acumulan ya “hasta seis meses” de espera, según ha explicado en declaraciones a Europa Press el portavoz del grupo, Ibrahim Al Maklouf.
Este sirio forma parte, como “la mitad” del grupo, de núcleos familiares (convive junto a su esposa y a sus tres hijos, uno de ellos recién nacido, en el CETI), los que suelen gozar de prioridad a la hora de ser trasladados a la Península para ser acogidos por una oenegé o entrar en Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE).
Solamente nueve de los 45 sirios que se encuentran en el CETI de Ceuta son solicitantes de asilo, afirma Al Maklouf, quien denuncia que los indocumentados subsaharianos son trasladados más rápidamente al otro lado del Estrecho “mientras a los sirios siempre se nos dice que nos llegará el turno 'la semana que viene”.
El miércoles de la semana pasada salieron desde Melilla con destino a Málaga el primer grupo de 57 sirios huidos de la guerra de su país de los 200 que hay en la ciudad norteafricana. El Gobierno central se ha comprometido a trasladar a todos antes de que termine enero a la Península atendiendo a su situación “vulnerable”.
En Ceuta, sin embargo, las autoridades han venido defendiendo desde el otoño pasado, cuando un grupo de sirios llegó a pasar más de una semana durmiendo ante la Delegación del Gobierno para pedir su traslado a la Península, que no se pueden establecer “agravios comparativos” entre ciudadanos de uno u otro país.