Revés judicial para Vox. La Justicia ha ordenado anular las primaras que celebró en Granada el año pasado y que dieron la victoria, sin oposición, a Manuel Martín, la persona de confianza que la cúpula nacional tiene en tierras granadinas. El juez resuelve, mediante medidas cautelares, que aquel proceso de elección de presidente debe ser investigado porque existen dudas razonables de que se pudieran haber cometido irregularidades. La decisión, contra la que cabe recurso por parte de Vox, se adopta solo un mes después de que la candidatura de Ignacio Pozo denunciase que se habían vulnerado sus derechos fundamentales.
De este modo, el Juzgado de Instrucción número 6 de Granada anula las primarias de Vox en la provincia. Según la resolución, a la que ha tenido acceso este medio, el proceso electoral queda anulado porque los denunciantes fueron expulsados de las primarias y en ellas se proclamó una nueva presidencia cuyos resultados no están claros. Es decir, el juzgado invalida las elecciones a presidente de Vox Granada porque si se admiten se estaría perjudicando de nuevo a la candidatura de Ignacio Pozo al impedirle participar de las primarias y seguir dándoles validez pese a la demanda.
“Existe una base razonable para la adopción de medidas cautelares”, indica el juez, con el apoyo de la Fiscalía, en el escrito porque sostiene que hay que aclarar varias cuestiones. Por ejemplo, por qué se anularon 15 votos a favor de la lista de Ignacio Pozo. En ese sentido, continúa el texto mencionando que tampoco funcionó bien el sistema informático para el recuento de apoyos. “Se plantea la duda razonable acerca de si el sistema de prestación de avales y el voto telemático implantados por el partido, permitían la celebración de elecciones internas sin la intromisión del aparato, dejando el escrutinio de los avales solamente a la decisión del partido”.
Por otra parte, el juez también sostiene que debe anular las primarias mientras se aclara si hubo un uso “fraudulento” del censo electoral en beneficio de la candidatura ganadora de Manuel Martín. Además, la resolución indica que debe investigarse si se puso un plazo extremadamente corto para la presentación de avales con el fin de impedir que los rivales de Martín a las primarias de Vox pudieran conseguir los apoyos necesarios para participar en las votaciones finales.
Según fuentes del caso, la decisión judicial se adopta mientras se aclara el contenido de la demanda original. Algo que, en el mejor de los casos, no sucederá hasta dentro de un año. El actual presidente, Manuel Martín, tendría que dejar de serlo porque su victoria en las primarias ha quedado anulada, y su partido debería nombrar a una gestora que dirija a la formación hasta que se acabe el proceso abierto por la Justicia. Si esto no ocurriera, Vox podría estar incurriendo en una irregularidad ya que el juez considera que, si la demanda final fuera a favor de la candidatura denunciante, la actitud del partido tendría “efectos irreparables” en los derechos de los afiliados presuntamente perjudicados.
La decisión del juez es la consecuencia de un proceso judicial que arrancó en abril, pero que hunde sus raíces varios meses atrás. Hubo malestar desde que se convocó el Comité Ejecutivo Provincial (CEP) que debía elegir a la nueva presidencia de Vox en septiembre del año pasado. A aquel proceso iban a concurrir cinco listas electorales, pero a la votación final solo llegó la del presidente Manuel Martín. Entonces, la formación de extrema derecha aseguraba que ninguna de las candidaturas rivales había logrado los 78 avales necesarios para presentarse, pero desde el entorno del abogado Ignacio Pozo, el principal rival de Martín en este CEP, se aseguraba que no solo habían llegado a ese número, sino que lo habían superado llegando a 120 avales.
Por eso, varios afiliados, entre los que se encuentra el propio Pozo, decidieron denunciar las primarias de Vox en Granada el pasado mes de abril. En el escrito que presentaron, y al que este medio tuvo acceso, los demandantes hablan de varios cargos electos que vulneraron las reglas de la formación apoyando abiertamente a Manuel Martín. Por otra parte, cuentan episodios en los que alguno de esos cargos dice hablar en nombre de la diputada nacional por Granada, Macarena Olona, dándole su apoyo a la candidatura “oficialista” de Martín. Demostrando así que el aparato del partido en Madrid estaría manipulando el proceso para colocar a un presidente de su cuerda.
La figura de Manuel Martín es relevante porque mantiene una estrecha relación de amistad con el presidente de Vox, Santiago Abascal. Martín, que es un empresario reconocido en la Costa Tropical de Granada, tiene lazos familiares con Abascal y alcanzó la presidencia de la formación de extrema derecha de forma interina después de que el exmandatario, Julio Vao, fuera expulsado después de que saliese a la luz que a finales de los años 90 fue condenado por causar un agujero económico en la sucursal de la Caja de Ahorros de Granada de la que era director. Pese a que se esperaba que Manuel Martín no se presentara a las primarias, finalmente sí lo hizo, lo que levantó las sospechas de un presunto pucherazo a su favor desde el primer momento.
Este medio se ha puesto en contacto con Vox para conocer la versión del partido sobre la nulidad de las primarias, pero la formación de extrema derecha se ha negado a hacer declaraciones. Vox afirma no tener ninguna relación “institucional ni de colaboración” con este periódico, por lo que no hace comentarios al respecto.
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