La entrada para niños de hasta ocho años de edad es gratis. Es uno de los reclamos que la Diputación provincial de Toledo, actualmente gobernada por PP y Vox, ha utilizado para la próxima novillada nocturna sin picadores que celebrará el próximo 19 de agosto en la Plaza de Toros de la capital castellanomanchega. La entrada general son 10 euros, pero los menores no pagan. Es solo un ejemplo de la promoción de estas actividades taurinas que están realizando las derechas desde las instituciones en las que gobiernan tras las últimas elecciones municipales.
En el caso de Toledo, la Diputación organiza la novillada con la comunidad de propietarios de la Plaza de Toros y de la mano de la empresa Mare Nostrum Arena. Está programada para el próximo sábado, 19 de agosto, y participarán dos alumnos de la Escuela Taurina “Domingo Ortega”, dependiente de la Diputación y con sede en la mencionada Plaza de Toros, y otro de la Escuela Taurina de Albacete.
Se da la circunstancia de que el vicepresidente de la Diputación y delegado de la escuela toledana, Joaquín Romera, está vinculado al mundo empresarial taurino. Es coordinador de servicios sanitarios de la Sociedad Cabrahígos S.L., de carácter familiar, con sede en Toledo y dedicada a la organización de toda clase de espectáculos “cómico-taurinos”, becerradas, capeas, novilladas y corridas de toros.
La empresa vinculada al delegado de la escuela taurina toledana organizó unas polémicas becerradas
Esta empresa fue la que organizó hace siete años las polémicas becerradas de Valmojado (Toledo) que denunció el Partido Animalista PACMA por su crueldad: pequeños animales, “sin apenas cuernos, no más grandes que un mastín, fueron lidiados, pinchados, estoqueados y apuntillados por los vecinos de la localidad, causándoles un sufrimiento atroz”. El Gobierno regional abrió un expediente sancionador por estos hechos debido al incumplimiento del Reglamento regional de Festejos Taurinos.
El propio Joaquín Romera ha presentado ahora la novillada con niños del próximo 19 de agosto junto al director de la empresa promotora, Nacho Lloret. “Todos los implicados cooperan en la defensa de la promoción de la tauromaquia y apoyan a los nuevos valores taurinos de la provincia, organizando un festejo que lidiará seis novillos de la ganadería toledana del Conde de Mayalde”, ensalza la Diputación en la comunicación de este evento.
El nuevo equipo de Gobierno de PP y Vox de la Diputación de Toledo también subraya su apuesta por la Escuela Taurina para incentivar y consolidar la formación teórica y práctica como “cuna de toreros en la provincia”.
No es el único caso en Castilla-La Mancha. La Diputación de Ciudad Real, también gobernada por PP y Vox, quiere se que reactive la escuela taurina provincial ya existente pero actualmente inactiva, o que se proceda a la creación de una nueva, una vez que las instalaciones de la plaza de toros puedan ser utilizadas y estén operativas. Así lo señaló su presidente, Miguel Ángel Valverde, en una reunión con el matador de toros Aníbal Ruiz, el banderillero retirado Valentín Cuevas y otros representantes del mundo de la tauromaquia.
Durante el encuentro se apuntó a la posibilidad de impulsar una nueva escuela taurina en la capital de la provincia “con el objetivo de que se puedan encauzar y potenciar proyectos, así como otras acciones que han quedado sobre la mesa que pueden ser de interés para apoyar al sector”.
Las iniciativas de ambas diputaciones para promover y permitir que los menores aprendan a “torturar y matar” toros y el hecho de que sea de las primeras medidas que adoptan, las ha puesto en la diana. La Fundación Franz Weber, por ejemplo, ya mostró su rechazo al objetivo que se ha marcado la Diputación de Ciudad Real y del mismo modo se ha hecho eco de la iniciativa toledana. Concretamente, ha solicitado el cierre de la escuela taurina apoyada por la Diputación de Toledo para dar cumplimiento a una recomendación realizada por el Comité de los Derechos del Niño de Naciones Unidas en 2018.
“Alejar” a los menores de la tauromaquia
Se refiere con ello a las observaciones finales que este órgano de especialistas en protección y derechos de la infancia y la adolescencia recoge en un informe de recomendaciones. Según ha podido constatar elDiarioclm.es, el mencionado comité solicitó a España “alejar” a los menores de edad de la tauromaquia, incluyendo su participación directa en este tipo de recintos o como personas espectadoras.
La ONG animalista apunta por su parte que con tan solo 14 años, estos niños, a través de las escuelas taurinas, pueden participar en las llamadas “clases prácticas”, donde ejercen la tortura de bóvidos machos de corta edad, o bien hembras, “integrándolos ya en un circuito donde se justifica el maltrato animal con un presunto interés tradicional o cultural”.
Para los naturalistas resulta preocupante el uso que hacen los gobiernos provincial y local de los recursos públicos, promoviendo que “chavales puedan maltratar animales y exponerse a riesgos de carácter médico-sanitario para perpetuar una actividad que recibe un importante rechazo de la ciudadanía”. Y además añaden que formación no reglada tampoco ofrecen estas escuelas “una salida profesional real ni digna”, sabiendo que existen numerosos ciclos formativos homologados en diferentes ramas que ofrecerían un empleo digno, “no el de matar novillos o toros en plazas”.
"La asistencia de niños a eventos taurinos contribuye a la banalización de la violencia contra animales"
Además, explican que la participación va acompañada de comentarios que refuerzan de forma positiva todo lo que se produce en la plaza y que personas menores de edad pueden asumir como normal y positivo, “contribuyendo a la banalización de la violencia contra animales”.
En las últimas semanas FFW ha comprobado que diferentes organismos provinciales y administraciones locales siguen subvencionando e incluso cediendo espacios públicos para el mantenimiento de estas “escuelas” de carácter taurino. Así, Albacete, Ciudad Real o Toledo son ejemplos de centros “sin orientación pedagógica” homologable que “deberían cerrar sus puertas” para cumplir con el Comité especialista de Naciones Unidas.
Fuera de Castilla-La Mancha se repite la tónica. En un verano en el que los toros, y más concretamente las diferentes modalidades de 'bous al carrer', están protagonizando (de nuevo) diferentes percances por todo el territorio valenciano -algunos de ellos con menores implicados- la Diputación de Castellón, en manos del PP, ha decidido dar un “impulso” a la escuela taurina que depende de la institución con un “completo programa” de actividades en diferentes municipios de la provincia con el objetivo de que “niños y jóvenes conozcan de cerca el mundo del toro”.
Según la Estadística de Asuntos Taurinos del Ministerio de Cultura y Deporte, en el año 2022, Castilla-La Mancha fue la comunidad autónoma en la que se celebró la mayor cantidad de eventos taurinos de todo el país: casi 400.
No obstante, el tirón de estos festejos cae cada año. Aunque, con gran número de eventos de todo tipo, las persona asistentes no paran de disminuir. En las plazas castellanomanchegas, los seguidores han pasado del 21,4% de la temporada 2018-2019 al 4,1% de la de 2021-2022, según analiza la misma encuesta.
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