La Generalitat prevé levantar el toque de queda el próximo lunes, 7 de junio, y empezar a reabrir espacios como el ocio nocturno de manera progresiva y “con prevención” ante el ligero repunte del virus en los últimos días en la Comunitat Valenciana. Así lo ha anunciado el president, Ximo Puig, en declaraciones a los medios en Elche y en una entrevista en la Cadena SER a dos días de la mesa interdepartamental COVID que acordará las nuevas medidas.
En general, la intención es continuar con la apertura progresiva desde la prudencia y “sin ir a una situación de abandono de las restricciones”, mientras avanza la vacunación “al máximo”: ya con un millón de valencianos con la pauta completa y al menos con una dosis en la provincia de Alicante.
Puig ha asegurado que “en principio” la intención es que el toque de queda, actualmente de 1 a 6 horas, finalice definitivamente a las 00 horas del lunes porque la Comunitat Valenciana lleva ya 11 semanas con una incidencia acumulada por debajo de 50 casos entre cada 100.000 habitantes.
Se trata de una situación “bastante consolidada” que cree que permite empezar a reabrir el ámbito nocturno y ayudar a sectores que han hecho un “sacrificio enorme” porque llevan mucho tiempo cerrados. Y todo ello, ha rogado, “siendo conscientes de que si continuamos siendo prudentes y utilizamos los espacios de la manera adecuada y con ventilación, podemos empezar a abrir”.
En todo caso, el jefe del Consell ha vuelto a justificar que el toque de queda era necesario porque “era lo que había que hacer para llegar al verano en las mejores condiciones”, un verano que espera “mucho más normalizado” y con capacidad de atraer turistas y reactivar la economía. Ha abogado así por aprovechar las buenas perspectivas de la economía valenciana y española para “superar la crisis a medida que superamos la pandemia” y que esta situación sirva para impulsar el empleo.
“Hagámoslo bien”, ha suplicado a los valencianos, sin perder de vista que hay 25 personas en las UCI y que todavía hay ingresados en los hospitales. Por eso cree que la Comunitat Valenciana no se puede “permitir el lujo” de dar pasos atrás después de lograr la incidencia acumulada más baja de España y entre las regiones de Europa.
Sobre la ligera subida de los últimos días, Puig ha reconocido que es la consecuencia de “todo lo que significa la apertura y la movilidad” de estas semanas y ha pedido seguir con la prudencia, pero ha remarcado que todavía son cifras positivas.
Las mascarillas, “el símbolo de que el virus sigue ahí”
Y ante la intención del Gobierno de reducir el uso de las mascarillas, ha defendido que dejen de ser obligatorias “más pronto que tarde” en las playas o en zonas naturales con brisa permanente, mientras cree que hay que ser muy prudente en lugares cerrados porque son “el símbolo de que el virus sigue ahí”.
“Más allá de estos espacios, hay que ser muy prudente. No podemos avanzar más de lo que los indicadores nos permitan”, ha constatado abogando por una apertura progresiva “en todos los aspectos”.
Precisamente en las playas, el president ha destacado que los jóvenes informadores COVID que se contrataron el verano pasado este año cumplirán dos funciones más: asesoramiento turístico y para evitar ahogamientos, ante el aumento de los fallecimientos en el agua. “Parece que hayamos perdido el miedo al Mediterráneo, que es un mar tranquilo pero si no se le trata con respeto puede haber accidentes terribles”, ha recordado.
Caída de contagios, hospitalizaciones y fallecimientos
La Comunitat Valenciana ha cerrado el mes de mayo con un balance de 4.114 casos de coronavirus, un 17'19% menos que en abril, y con una caída del 45% en las hospitalizaciones (del 56'14% en las UCI), mientras que la incidencia acumulada ha descendido ocho puntos.
Mayo ha consolidado el descenso de los principales indicadores de la pandemia iniciado en marzo, ya que durante este mes ha proseguido el descenso de fallecimientos, de contagios y de hospitalizaciones a causa de la covid-19.
La Conselleria de Sanidad ha notificado un total de 119 fallecimientos a causa de la COVID en mayo, que son 41 menos que en abril y por tanto un descenso del 25'62%.
No obstante, desde el 3 de mayo en las actualizaciones de datos incluye también defunciones de meses anteriores que no se habían computado (por ejemplo hay 37 decesos de febrero y 30 de enero), con lo que de los 119 muertos, son 25 las que corresponden a mayo, la segunda cifra mensual más baja de toda la pandemia y una caída del 84'37% sobre abril.
Por primera vez desde septiembre, ha habido tres días de este mes en los que no se notificado ninguna muerte a causa de la COVID-19.
Contagios: de 165 a 133 al día
En el mes de mayo se han contagiado de coronavirus 4.114 personas en la Comunitat Valenciana, que son 854 menos que en abril y dejan una media de 133 casos al día, frente a los 165 del mes anterior. La cifra más alta de casos positivos notificados en una jornada ha sido de 387 y la más baja de 55, si bien en los últimos días se ha producido un ligero repunte, y por ejemplo las últimas dos semanas de mayo han sumado más de un millar de casos semanales, cuando en las dos anteriores no se alcanzó ese umbral.
Los casos que están activos han bajado entre comienzo y final de mes del 0'91% al 0'42%, aunque a mediados de mayo se situaron varios días en el 0'36% y han empezado a subir paulatinamente desde hace una semana.
112 pacientes menos hospitalizados
La Comunitat Valenciana inició el mes de mayo con 249 pacientes con COVID ingresados en sus hospitales y lo acaba con 137 (como a principios de agosto), que son 112 menos y una bajada del 45%, aunque en la última semana también está subiendo en este indicador. En las unidades de cuidados intensivos, se ha pasado de 57 pacientes críticos a 25 (similar a la cifra que había a mediados de agosto), que son 32 menos y suponen un descenso del 56'14%.
En cuanto a la ocupación de camas por pacientes de coronavirus, en planta se ha bajado del 1'94% del primer día de mayo al 1'20% del último, por lo que siguen en situación de “nueva normalidad”, y en las UCI ha caído del 6'43% al 2'88%, por lo que se ha pasado de “riesgo bajo” a “nueva normalidad”.
La incidencia acumulada baja 8 puntos
La incidencia acumulada a catorce días en la Comunitat Valenciana, que en abril subió 15 puntos, en mayo ha bajado 8'27 puntos, ya que ha pasado de 42'97 casos por cien mil habitante al inicio del mes a los 34'70 actuales. En la primera quincena bajó a diario; en la siguiente semana se estancó, y en la última está creciendo.
Se han cumplido ya once semanas con la incidencia acumulada por debajo de 50 (que implica riesgo bajo de contagio), y desde el 17 de marzo es la comunidad autónoma con la incidencia más baja de España, aunque esta semana podría quedar desplazada de ese puesto por Baleares.
Vacunación en aumento
En mayo se han inoculado más de un millón de dosis de la vacuna contra la COVID, en concreto 1.044.113, que son 141.978 más que en abril, cuando se pusieron más dosis que la suma de los tres meses anteriores.
También se han sumado en mayo 436.185 personas más a las que ya están inmunizadas por haber completado la pauta de la vacunación, y que actualmente son 917.223.
Brotes
Desde el 6 de mayo, la Conselleria ha dejado de dar datos de brotes de coronavirus, salvo que superen los diez casos, por lo que no se puede comparar el dato de este mes, en el que ha notificado 48 brotes con un total de 285 afectados, con el de abril, cuando fueron 227 focos con 1.172 personas afectadas.
Tampoco informa ya de los casos y defunciones en las residencias de ancianos, por lo que tampoco se puede comparar la evolución del virus en estos centros.