José Manuel Prieto, alcalde de Gandia del PSPV-PSOE gracias a un pacto con Més Gandia, recibe a elDiario.es en el Ayuntamiento. Su despacho está decorado con numerosas obras de arte de conocidos artistas valencianos y varios cuadros y grabados de importantes autores españoles de fama internacional. Esta decoración, que sorprende al visitante nada más entrar, es uno de los legados de l'Any Borja. Porque si por algo se identifica la capital de La Safor es por haber sido residencia de una de las familias más influyentes en la historia de la política, “els Borja”. Prieto lleva en la sangre la pose de alcalde. Antes y después de la entrevista se reúne con vecinos que le van a contar sus problemas o demandas e, incluso, cuando va a arrancar la entrevista tiene tiempo para encajar la mano amablemente con otro vecino que deambula por el vestíbulo. Gandia es la ciudad más grande de la Comunitat Valenciana gobernada por la izquierda. Y eso, más que ser una responsabilidad, convierte a la ciudad en un modelo de políticas botànicas, en en un bastión muy preciado para la derecha y en el que se miran las fuerzas progresistas. En poco más de un año, el presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, ha estado seis veces. Con esa responsabilidad atribuida, Prieto repasa la actualidad municipal, pero también la autonómica y del Estado.
Este año es de récord en el sector turístico, y Gandia como gran destino español también lo debe haber notado. ¿Qué balance hace de la temporada estival?
Prueba de la fortaleza del sector y del destino, y de los valores que hemos trabajado en los últimos años como la calidad y la sostenibilidad, los datos nos acompañan. Aún no ha terminado la temporada, porque en Gandia funcionamos bien hasta finales de octubre o principios de noviembre, con una ocupación similar al verano. Nuestro servicio de playa funciona desde marzo hasta octubre. El balance iguala o supera los índices de ocupación de años buenos, por encima del 90% de ocupación hotelera y con resultados muy buenos en el uso de apartamentos turísticos.
El turismo, que en la Comunitat Valenciana y en España había sido una industria intocable, en la actualidad, por la masificación, los problemas de vivienda, de de convivencia, usos de los recursos o generación de residuos, está recibiendo quejas de una parte de la ciudadanía. Ante ese impacto, el PSPV-PSOE de València propone apostar por la vecinofilia, mientras muchas voces ya hablan de turismofobia. ¿Con qué concepto se queda?
Cuando hablo de destino turístico maduro, de la calidad que ofrecemos a los que nos visitan, nos da una cierta experiencia y un cierto aval para escapar de ciertos debates que están presentes en ciudades de nuestro tamaño o tamaño superior. Nosotros no tenemos vivienda turística en el centro de la ciudad, no tenemos un problema de masificación turística, no solo por nuestra composición en dos núcleos urbanos diferenciados y con una playa de cuatro kilómetros de costa solo urbana. Creo que eso nos han hecho escapar de determinadas tendencias del turismo, pero también es verdad que hay destinos internacionales que tienen grandes problemas de prestación de servicios para el turismo. El debate se está escapando de los márgenes razonables de qué tipos de políticas turísticas o qué tipo de servicios públicos podemos ofrecer a las personas que viven todo el año aquí. No tenemos en Gandia un problema de turismofobia, de hecho creo que Gandia todavía tiene capacidad para recibir a más turistas. De lo que se trata es de seguir trabajando sobre qué perfiles de turista queremos. El producto que busco es turistas de mayor poder adquisitivo que vengan a nuestros hoteles en los demás meses que no estamos llenos. Y eso sí que es compatible con los alojamientos turísticos que tenemos, aunque el decreto de la Generalitat sobre vivienda turística no combate el origen de la problemática, un verdadero problema de intrusismo. Porque eso va en contra de la calidad y en contra de quienes cumplen las normas. Y el decreto de la Generalitat no acaba de regular bien eso. No quiero hablar de problemas que afectan a otros destinos, pero sí que me gustaría hablar de la financiación local que nos permite a los ayuntamientos prestar servicios con eficacia y de cómo los destinos turísticos podemos tener una reforma de la financiación de los ayuntamientos para poder asumir otros servicios públicos que ayuden a los vecinos y a los turistas.
El pacto entre el Gobierno y ERC es una ventana de oportunidad para abordar todas las financiaciones, la autonómica y la local
Todas la ciudades turísticas ponen el foco en ese problema. Se ha hablado mucho de la tasa turística y usted abre el melón de la financiación local. ¿Qué modelo prefiere usted?
La tasa turística es un parche para no abordar el verdadero problema de fondo que es la financiación local y la financiación de los municipios turísticos. Hablo de Gandia y de nuestro modelo. Tal vez, si fuera otro destino turístico sí que estaría a favor de implantar la tasa. ¿Por qué no lo estoy en el caso de Gandia? Porque tengo un número de viviendas reguladas, pero también un número de viviendas con cierto intrusismo que no han entrado a la regulación como alojamiento turístico. Yo no puedo gravar a quien lo hace bien y no gravar al que ha decidido como intruso prestar un producto peor.
¿Esa reforma de la financiación local se podría incluir en la reforma de la financiación autonómica con el pacto entre el Gobierno y Esquerra Republicana sobre Catalunya?
Sí, es necesaria esa financiación para cubrir servicios. Porque nadie ha dicho que la tasa turística sea finalista. En Gandia cubrimos esos servicios de los turistas porque entendemos que es parte de la generación de nuestra riqueza y estamos orgullosos de ser una ciudad de acogida. Pero el problema es que en el Estado no se ha producido una segunda descentralización. Se produjo una descentralización a las autonomías, pero no a los ayuntamientos. Y ese es el debate de fondo de todas la políticas públicas. No puede ser que la administración más cercana al ciudadano sea una administración tutelada.
¿Ve entonces una ventana de oportunidad para abordar la financiación local?
Sí, lo veo como una ventana de oportunidad para abordar todas las financiaciones, la autonómica y la local. Pero desde una premisa de partida que creo que no se está teniendo en cuenta. Para hablar de fiscalidad, primero se tiene que hablar de responsabilidad fiscal. No puede ser que las autonomías, las que menos dinero recaudan sean las que más dinero están perdonando al que tiene la obligación de sostener esos servicios. Los ayuntamientos somos la administración que más servicios presta. Porque cuando viene un ciudadano aquí, no puedo decirle que no soy competente. Eso necesita una cobertura suficiente para no ser una institución tutelada y que como pasa en Gandia, por la mala gestión de un gobernante irresponsable, estamos sometidos a un plan de ajuste del Ministerio de Hacienda.
Ha asegurado que el decreto de vivienda turística de la Generalitat es deficiente. ¿Por qué?
Pues que nos han delegado un problema más, ahora la inspección de apartamentos turísticos. No vamos a huir del problema y asumiremos las inspecciones, pero las competencias que se nos delegan deben tener recursos. Tendremos que incrementar el departamento de inspección con nuestro dinero para un trabajo que era de la Generalitat.
Tenemos referentes del turismo en la Comunitat Valenciana como Gandia, Benicàssim, Benidorm o Calp. ¿Les ha preguntado el Consell sobre la normativa para desarrollar el decreto?
No. No ha habido ningún diálogo con la administración. El decreto nos ha llegado hecho. Ha sido después cuando hemos tenido alguna reunión para hablar de la aplicación. Estamos acostumbrados con el PP a la delegación de competencias sin fondos. No fue así con el Botànic, cuando tanto las competencias del Pla Edificant o como el Palacio de Justicia vinieron con recursos de la Generalitat. Ha faltado un diálogo previo.
No ha habido un diálogo con la Generalitat, el decreto de vivienda turística nos ha llegado hecho
El presidente Mazón se ha vanagloriado de haber estado seis veces en Gandia en poco más de un año. ¿Eso es bueno o es malo?
Algunas veces bueno y otras no tanto. Unas veces las visitas han sido para trabajar de verdad y asumir competencias e inversiones concretas y otras, como la última, han sido visitas más institucionales o de cortesía que no han sido efectivas.
Gandia tiene una ministra en el Gobierno de España, Diana Morant, que antes fue alcaldesa. ¿Se está notando ese peso?
De momento, su ministerio a través del CSIC ha apostado por un instituto español de oceanografía en la ciudad, con una inversión de 12 millones. 50 investigadores fijos. Transforma el puerto y ayuda a diversificar la economía que era algo que nos decidimos impulsar en esta legislatura. Este instituto entronca muy bien con la presencia de la Universitat Politécnica y la Universitat de València. Y esto ha sido, sin duda, por el impulso de una ministra que es de Gandia.
Hemos hablado mucho de turismo, pero, ¿cuál debe ser el camino que siga Gandia para diversificar su economía?
El camino pasa por incrementar el peso de la industria. Estábamos limitados porque no teníamos suelo, pero se ha presentado un proyecto de interés autonómico que es de la empresa Ale-Hop, que desarrollará un espacio de innovación. Ese debe ser tractor para más proyectos dentro de la estrategia valenciana de la innovación donde Gandia es un polo estratégico. Esa industria y esa innovación estarán ligadas a las universidades y a la formación. Esa diversificación también pasa por el ámbito sociosanitario, porque ahora desarrollamos Sancho Llop alrededor del hospital de la ciudad. Ya hay empresas públicas y privadas comprometidas en ir allí. Hemos incrementado mucho la población en dos años porque somos una ciudad atractiva y, por tanto, debemos seguir diversificando.
¿Qué papel debe cumplir el puerto en esa Gandia del futuro?
He defendido que el puerto se integre como infraestructura auxiliar del corredor mediterráneo. El puerto ha tenido un peso histórico, pero también tiene que hacer sus deberes como la diversificación y el aumento de los tráficos. Además debemos seguir fortaleciendo las relaciones puerto-ciudad y ahí está la reforma de los tinglados.
¿Está Gandia suficientemente conectada con las principales vías por carretera y ferrocarril?
No. Hace falta la CV60, que es el enlace con el núcleo interior de carreteras y acceso sur al puerto. Sin duda, la conexión más importante para Gandia, además de la doble vía del tren de cercanías que es el origen del tren de la costa. También hay que mejorar el acceso norte a la ciudad, que es un punto negro viario, así como el enlace con la autopista, que es un error de los años 70. Estamos trabajando con la Generalitat y el Ministerio en el protocolo para que sean una realidad estas infraestructuras.
Gandia es el ayuntamiento valenciano más grande donde gobierna la izquierda. ¿Qué diferencias en políticas públicas tienen respecto al Consell del PP, por ejemplo en vivienda?
La vivienda es de los grandes problemas nacionales. Creo que es necesaria una estrategia coordinada, que en este momento no se tiene. Sin vivienda no hay proyecto familiar, no hay expectativa de vida y lastra los proyectos de futuro de muchas personas. Es verdad que ha habido un calendario de acciones marcado por la Generalitat, pero no se está cumpliendo. No se ha abordado la cuestión de los avales, ese 20% inicial que una persona necesita para financiar la entrada. Los ayuntamientos tenemos que dar pasos adelante, y ahí hemos ido por delante. Primero, cambiando la tipología de determinadas parcelas, permitiendo usos mixtos, de manera que podemos incluir en parcelas municipales vivienda libre y vivienda protegida. Eso ya lo hemos aprobado. Después poniendo suelo a disposición de las otras administraciones y de la iniciativa privada para construir vivienda pública. Y eso que tenemos uno de los parques públicos de vivienda más grandes de la Comunitat Valenciana aunque no suficiente. Hemos ido adquiriendo viviendas de la Sareb, dando incentivos fiscales a la compra y al alquiler y también aprobaremos la cobertura de los seguros de impago a las personas que afloren las viviendas que ahora tiene vacías.
¿En su opinión, hace falta más suelo o existen otras soluciones como la rehabilitación para incrementar el número de vivienda disponible?
Creo que son las dos cosas. Suelo disponible tenemos, pero tenemos que insistir en la rehabilitación y por otra parte el incentivo directo para aflorar las viviendas vacías.
Es presidente del Consorci de les Comarques Central Valencianes. ¿Qué deben ser estas comarcas en el futuro? ¿Una cuarta provincia o, de momento, una colaboración para mejorar las sinergias?
No estamos para cuestionar el mapa provincial ni la articulación institucional. Estamos para generar oportunidades desde un vínculo histórico, cultural, empresarial y de buena vecindad. Creo que puede ser un tractor de buenas oportunidades y un polo de innovación. El debate de las comarcas centrales ha tenido barreras porque hay quien ha cuestionado proyectos fundacionales de las comarcas centrales como la CV60, y esto a mi me parece fundamental. Tenemos que recuperar a través de las infraestructuras la vertebración. Ese vínculo de la Safor y la Marina, de políticas mancomunadas, sobre todo económicas y de desarrollo social. Ese sentimiento de unidad y singularidad.
Nos engañamos cuando hacemos un partido de trincheras y no de mayorías, ganamos con discursos de mayorías
Vienen unos meses de congresos en el PSOE. Empezando por el federal, pasando por el autonómico y acabando en el local. ¿Cómo ve la situación en el PSPV?¿Habrá calma y unidad o nos sorprenderán con varios aspirantes?
Mi visión es desde la barrera porque no tengo cargo orgánico ni quiero tenerlo. Me dedico a Gandia y no estoy para invertir tiempo en el partido porque la vida no me da. Estoy las 24 horas en mi ciudad. Desde esa perspectiva, solo puedo concebir el partido como instrumento para la mejora de la sociedad y de las vidas de los ciudadanos. Ahora no estamos para luchas internas, tenemos que estar en la creación de un proyecto político de mayorías. Nos engañamos cuando hacemos un partido de trincheras y no de mayorías. Ganamos con discursos de mayorías. Ganamos en Gandia porque tenemos un discurso de mayorías donde caben todos. Yo tengo mis valores y veo las cosas desde mi filosofía, pero no soy sectario. Veo a Diana Morant en la articulación de ese discurso de mayorías del norte al sur de la Comunitat Valenciana.
No muchos alcaldes tienen tres libros publicados. ¿Está preparando un cuarto?
Estoy escribiendo cosas, no en el sentido de libros. Siempre escribo y cuando tengo las cosa más claras, pues intento publicarlas. Ahora no estoy pensando en publicar, no me da la vida. Pero siempre voy acompañado de libretas y aprovecho los ratos libres para tomar notas, también sobre situaciones que me pasan en el cargo, pero esas ya las dejaré para el archivo. Las vivencias personales las donaré al archivo cuando abandone el cargo.