El pasado 1 de abril, los populares valencianos reelegían de forma casi unánime -con el 94,4% de los votos a favor y ninguno en contra- a Isabel Bonig como presidenta en el congreso regional celebrado en Valencia. Bonig contó entonces con el respaldo de la secretaria general del PP y ministra de Defensa, María Dolores de Cospedal, y del presidente popular y del Gobierno, Mariano Rajoy, quienes parecieron renegar del pasado del PPCV, con una excepción: Rita Barberá.
Tan sólo ha pasado un mes y desde Génova ya han dejado en evidencia en dos ocasiones a Isabel Bonig. La última, esta misma semana a cuenta del congreso provincial del PP en Valencia en el que se está produciendo una encarnizada batalla entre Mari Carmen Contelles, portavoz popular en la Diputación, y el todavía presidente provincial, Vicente Betoret, por hacerse con la dirección del partido en la provincia, huérfano de un líder plenipotenciario tras la caída en desgracia de Alfonso Rus por su implicación en el caso Imelsa.
El Partido Popular achaca a Bonig que no sea capaz de propiciar un acuerdo entre Betoret y Contelles para la presentación de una única candidatura al congreso provincial que se debe celebrar en fechas próximas -mientras públicamente la presidenta del PPCV evita pronunciarsecontra Betoret, que cuenta el apoyo de Madrid, extraoficialmente maniobra en favor de Contelles-.
Así, si el pasado miércoles la dirección del Partido Popular filtraba su decepción con Bonig por el papel que está desempeñando el PPCV en esta crisis tras llamar a capítulo a Génova a ambos candidatos y a la secretaria general de los populares valencianos, Eva Ortíz, este mismo jueves, el vicesecretario de Organización del PP, Fernando Fernández-Maíllo, ha vuelto a advertir que están dispuestos a intervenir en el PP de Valencia si la dirección regional del partido no es capaz de acabar en conflicto.
Este mismo miércoles, se celebraba una tensa junta directiva del PP de Valencia en el que Contelles -que este jueves anunciaba oficialmente su candidatura a través de las redes sociales- conseguía una primera victoria sobre Betoret al impedir que éste aprobara su propuesta de comité organizador del mencionado congreso provincial.
Presupuestos Generales del Estado
Éste no es el primer desencuentro entre la dirección nacional del PP y la líder de los populares valencianos en las últimas semanas. Así, apenas unos días después de ser reelegida Bonig, los diputados autonómicos populares se adherían al “rechazo absoluto” y unánime de las Corts Valencianes al proyecto de Presupuestos Generales del Estado de Mariano Rajoy, que suponen un recorte del 33% (310 millones de euros) con respecto a las inversiones presupuestadas en 2016.
Este posicionamiento de los populares valencianos le costó a la líder del PPCV la reprimenda del portavoz popular en el Congreso de los Diputados, Rafael Hernando, quien no dudó en apuntar que Isabel Bonig no conocía bien los presupuestos de 2017. Los populares valencianos recularon tras este tirón de orejas y pasaron a elogiar las cuentas por boca de Rubén Ibáñez, quien destacó el “notable incremento” de las inversiones.