La portada de mañana
Acceder
El PSOE llega a su Congreso con un ojo en la continuidad y otro en los tribunales
ERC elige a su líder en un congreso convertido en un plebiscito sobre Junqueras
Opinión - España: una democracia atascada. Por Rosa María Artal

Volkswagen prevé fabricar tres millones de vehículos eléctricos entre Martorell y Pamplona en 2030

Un crecimiento atado al coche eléctrico, especialmente a los modelos de pequeño tamaño que serán más baratos que los actuales de cero emisiones. Ese es uno de los objetivos del grupo Volkswagen y de su filial Seat. La división española del grupo alemán ha desglosado sus cifras del último año -en el que volvió a beneficios- y sus previsiones para los próximos años.

De entrada, el grupo ha confirmado las cifras de inversión que tienen previstas. Un total de 10.000 millones de euros “para transformar España en un hub europeo del vehículo eléctrico”, incluida la gigafactoría de baterías de Sagunto. En esa cifra, también están contemplados 3.000 millones para acelerar la fabricación de coches eléctricos en su planta de Martorell, que conlleva una segunda plataforma.

El objetivo es que, solo esta factoría, alcance las 500.000 unidades fabricadas. “La ambición del grupo es producir 3 millones de BEV [vehículos eléctricos] en el conjunto de Martorell y Pamplona entre 2025 y 2030”, indica la multinacional. Una producción que abarca las diferentes marcas de la multinacional alemana.

Crecer de la mano de Cupra

En ese crecimiento, para Seat será esencial la marca Cupra, que este año prevé que sea más de la mitad de sus ventas. “El futuro es eléctrico y eso significa que el futuro de nuestra compañía es Cupra”, ha recalcado el presidente de las dos marcas, Wayne Griffiths, durante la citada rueda de prensa.

Quiere llegar al medio millón de unidades vendidas con esta enseña, dirigida, asegura, a un público más joven que el de Seat. Para ello, prevé dos lanzamientos en 2024, el Tavascan y Terramar; y el UrbanRebel en 2025, que se ensamblará en Martorell.

Además, con esta enseña aspira a crecer en otros mercados donde hasta ahora no tenía presencia, como Australia o Estados Unidos, donde está testando, ha asegurado Griffiths, para ver si hay apetito por este tipo de modelos.

En cuanto a los resultados financieros, Seat apunta que, según las normas de contabilidad españolas, en 2022 ganó 68 millones de euros, 324 millones más que el año anterior, cuando registró unas pérdidas de 256 millones, sobre todo por el impacto de la crisis de los semiconductores.

Sobre esta última coyuntura, asegura que empieza a difuminarse, lo que le permitiría levantar el ERTE en la segunda mitad del año. Sin embargo, su presidente asume que aún hay mucha “incertidumbre” como para dar por hecho que ya no va a haber restricciones en la producción.

Respecto a las ventas, Seat -incluida Cupra- ingresó 10.500 millones de euros en 2022, con un crecimiento del 14%, lo que supone la segunda mejor cifra de ventas de su historia.