Albert Rivera está molesto porque Pedro Sánchez todavía no se ha dignado en llamarle para intercambiar sus puntos de vista en temas de actualidad, especialmente sobre la situación de tensión que se vive en Catalunya por la polémica de los lazos amarillos y ante las “amenazas” de Torra de continuar trabajando “por la república”.
“Ha hablado con Torra y con el líder del PNV, Andoni Ortuzar, ha hablado con Pablo Iglesias y ha recibido a Pablo Casado en la Moncloa, pero con el único partido que no se ha puesto en contacto es con Ciudadanos, el partido que ha ganado las elecciones en Catalunya”, se ha quejado.
A falta de esa interlocución, Rivera decidió escribir la semana pasada una carta abierta al Presidente del Gobierno, que publicó en el diario El Mundo, en la que le alertaba de la gravedad de la situación en Catalunya, le pedía que rectificara y que se sentase para negociar con los partidos constitucionalistas la aplicación allí, de nuevo y con urgencia, del artículo 155 de la Constitución. También le exigía que convocara elecciones generales de inmediato.
Y eso mismo ha vuelto a reiterar este lunes durante la rueda de prensa que ha ofrecido en la sede del partido tras reunirse con la permanente de su Ejecutiva. “Si nos llama estaremos encantados de escucharle para que rectifique”, ha señalado Rivera después de reconocer que no solo ese ninguneo es con él, sino que ningún miembro del Gobierno se ha puesto en contacto con los dirigentes de su partido.
Rivera ha confirmado que su partido va a continuar con la campaña de retirada de lazos, pero en conversación informal con los periodistas ha dado a entender que él no volverá a hacerlo personalmente porque aquella vez fue por unas circunstanciaras muy concretas, ante la agresión que sufrió Lidia en el parque de la Ciutadella, y por lo que convocaron una manifestación de repulsa en la que también fue agredido un cámara de Telemadrid al confundirlo con uno de TV3. El partido aún no ha desvelado quienes eran los “infiltrados” a los que atribuyó los ataques
Ataque del PP contra Rivera
Esta situación fue criticada tanto el vicesecretario de Organización del PP, Javier Maroto, como el propio Pablo Casado que arremetieron contra Rivera por implicarse personalmente en la retirada de lazos. “Un líder que aspira a presidir el Gobierno debería hacer algo más que dejarse fotografiar retirando de una calle catalana unos lazos amarillos”, le reprocharon.
Estas criticas no gustaron nada a Ciudadanos. El secretario general, José Manuel Villegas, se lanzaba el pasado viernes contra el PP acusándoles de asumir “el discurso separatista” en Catalunya por decir lo mismo que ellos: “Que los que defienden la legalidad son los que provocan el conflicto”. “Nos sorprende que líderes del PP asuman el discurso separatista diciendo que son los que defienden la legalidad los que provocan la confrontación”, lamentaba.
Rivera también está molesto con el PP por estos ataques y aunque no lo ha dicho públicamente, cree que Casado ha “metido la pata” y que lo dijo sin pensarlo demasiado.
Ahora está satisfecho y “agradecido” porque el Defensor del Pueblo, ante el que su partido pidió amparo, les haya dado la razón y haya pedido la retirada de lazos amarillos de las instituciones y espacios públicos catalanes.
La ley de concordia del PP tampoco les gusta
El líder de Ciudadanos ha querido demostrar también que las coincidencias que se le atribuyen con el PP no son tantas. Por ello, se ha distanciado de Casado sobre la ley de Concordia que el líder conservador anunció este domingo en Ávila para derogar la “irresponsable e innecesaria” ley de Memoria Histórica.
“Propondremos una ley de concordia que reivindique la Transición y que derogue la sectaria reescritura de la historia que arroja paladas de rencor sobre la sociedad española”, afirmó Casado.
Para Rivera esa tampoco es la solución porque supone algo similar a lo que plantea el PSOE, es decir, “mirar al pasado”, y lo que Ciudadanos quiere es “mirar al futuro” . “Ante el bipartidismo que solo habla del siglo XX, que ni tiene proyecto, ni tiene futuro, nosotros proponemos hablar del siglo XXI”, ha sentenciado.
Además, Rivera ha rechazado otra vez la propuesta de subir impuestos del presidente Sánchez al que acusa de querer “podemizar la economía”, mientras advertía que con esos mimbres no van a entrar a negociar los Presupuestos Generales del Estado de 2019. Rivera cree que la legislatura “está agotada” y quiere a toda costa elecciones generales ya.
Supresión del impuesto de Sucesiones
Como contrapartida, Ciudadanos presentará este martes una proposición de ley en el Congreso para suprimir el impuesto de Sucesiones a nivel estatal. “Es una asunto que llevamos más de tres años peleando a nivel autonómico. Ya lo hemos acordado en Andalucía y lo hemos llevado también a Murcia y se está trabajado sobre ello en Aragón”, ha afirmado Rivera.
“Hemos llegado a la conclusión que ante la situación del impuesto en diversas comunidades que consideremos caótica, lo que hay que hacer es suprimirlo al 100% porque es un impuesto injusto”.
Según el líder de Ciudadanos, el Estado dejaría de recaudar con esta medida dos mil millones de euros pero se podrían compensar eliminando duplicidades de organismo en las administraciones públicas.