En la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, Celaá ha explicado que el Gobierno debe volver a completar todo el proceso administrativo y aprobar un nuevo acuerdo, pero para ello primero debe recibir la sentencia del Supremo íntegra. El nuevo acuerdo del Gobierno precisará la fecha de la exhumación e inhumación.
Esta semana el Tribunal Supremo solo dio a conocer su fallo, en el que avalaba la exhumación de los restos del dictador del Valle de los Caídos y su posterior reinhumación en el cementerio de El Pardo-Mingorrubio (Madrid), y no en la catedral de La Almudena como pedían sus herederos.
A la espera de dicho acuerdo, ha reiterado que el proceso “se hará de manera decorosa, discreta y digna, sin que se convierta en un espectáculo público ni en una apología ni exaltación de la dictadura y del dictador”.
Celaá, que ha insistido en que la sentencia del Supremo es una “victoria democrática”, ha recalcado también que el Gobierno no ha puesto en marcha este proceso “por electoralismo o guerracivilismo” como le acusan algunos, sino cumpliendo un “mandato mayoritario del Congreso de los Diputados”, una proposición no de ley que se aprobó en 2017 sin ningún voto en contra (el PP se abstuvo y también ERC, que quería ir más allá).