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Opinión - Cada día un Vietnam. Por Esther Palomera

La homeopatía se beneficia de una legislación especial que le permite comercializar sin demostrar eficacia

La Comisión Federal de Comercio estadounidense anunció a finales de noviembre que exigirá a las compañías de productos homeopáticos que indiquen claramente en su etiqueta que “no hay evidencia científica que respalde las afirmaciones de la homeopatía” y que dichas afirmaciones “se basan en teorías del siglo XVIII que no son aceptadas por los expertos médicos actuales”.

Sin embargo, la homeopatía, tanto en Europa (y España) como EEUU cuenta con una legislación específica para poder venderse sin demostrar eficacia. La Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) llegó a un acuerdo en 1988 con la industria homeopática según el cual ésta podía seguir vendiendo sus productos siempre y cuando incluyeran en su etiquetado que no habían sido evaluados por la propia agencia.

En definitiva, se hizo una legislación especial para que estos productos pudieran seguir vendiéndose como medicamentos pese a no pasar ningún control. Según los últimos datos disponibles (2007), la homeopatía es un negocio que solo en EEUU supera los 3.000 millones de dólares anuales.

En Europa, la venta de este tipo de productos también está regulada gracias a una legislación específica hecha a medida de la industria. La normativa europea establece un “un procedimiento de registro simplificado especial para los medicamentos homeopáticos que se comercialicen sin una indicación terapéutica”. 

Esta norma se encuentra incluida en la legislación española, que especifica que este tipo de productos no deben tener “indicación terapéutica particular en la etiqueta”, es decir, que los productos homeopáticos no pueden afirmar que estén indicados para nada en concreto. Sin embargo, la industria termina por colar esas indicaciones utilizando la frase “tradicionalmente utilizado para”.

Al final, estos productos acaban llegando al mercado “sin un análisis previo de su calidad, seguridad y eficacia por parte de la Administración”, según ha denunciado la Sociedad Española de Farmacia Familiar y Comunitaria (SEFAC) en un comunicado. Esta sociedad científica, que agrupa a más de 8.000 farmacéuticos, “no está de acuerdo en que se autorice como medicamento ningún producto sin indicaciones terapéuticas aprobadas” y asegura que la normativa europea “contradice la propia naturaleza del medicamento y puede generar confusión en la población”.

Comercio protegido 

La decisión de la agencia de Comercio estadounidense se ha adentrado así en un terreno en el que la FDA no se había atrevido a intervenir, pese a que el año pasado anunció que se estudiarían cambios en la regulación de este tipo de productos. Aunque la comisión no puede impedir que se vendan remedios homeopáticos como medicamentos, obligará a las industria a modificar el etiquetado de sus productos introduciendo las dos frases antes citadas.

Con este movimiento, la comisión está tratando de forzar a la FDA para que imponga a los productos homeopáticos los mismos requisitos reglamentarios que el resto de productos farmacéuticos, algo que la Asociación Americana de Farmacéuticos lleva pidiendo desde hace años. Esta asociación, la mayor y más antigua sociedad farmacéutica de EEUU, con más de 62.000 miembros, ha manifestado en diversas ocasiones que apoya la modificación de la Ley de Alimentos, Medicamentos y Cosméticos para que se exija a “los fabricantes de productos homeopáticos que proporcionen evidencias de eficacia y seguridad de todos sus productos”.

La legislación norteamericana, que se aplica tanto a la publicidad como al etiquetado, “prohíbe los actos o prácticas desleales o engañosas” y específicamente “prohíbe la difusión de anuncios falsos en el comercio de medicamentos”. Según asegura la comisión federal en un comunicado, en virtud de estas disposiciones, “las empresas deben tener una base razonable para formular afirmaciones sobre sus productos”, algo que las empresas de homeopatía no pueden hacer, al no haber demostrado su eficacia.

comunicado 

La SEFAC no ha sido la única sociedad científica en criticar la actual situación de los productos homeopáticos. Otras dos de las principales sociedades farmacéuticas españolas han emitido sendos comunicados durante los últimos meses en los que rechazan la venta de estos productos como si fueran medicamentos, pese a que nunca han demostrado su eficacia.

nunca han demostrado su eficacia 

El pasado mes de octubre la Sociedad Sociedad Española de Farmacia Hospitalaria (SEFH) aseguraba que “los principios que sustentan la homeopatía no son científicos” y advertía de que esta pseudomedicina “puede poner en riesgo la salud de los pacientes si rechazan o retrasan tratamientos sobre cuya seguridad y eficacia hay evidencias sólidas”. Pocos días después, fue la Sociedad Española de Farmacéuticos de Atención Primaria (SEFAP) la que pidió que se “retirase la denominación medicamento” a los productos homeopáticos.

asegurabapidió