La portada de mañana
Acceder
El PSOE llega a su Congreso con un ojo en la continuidad y otro en los tribunales
ERC elige a su líder en un congreso convertido en un plebiscito sobre Junqueras
Opinión - España: una democracia atascada. Por Rosa María Artal

“No cargues tu móvil mientras duermes” y otros falsos mitos sobre las baterías

¿Cómo deberíamos cargar el móvil? Es la pregunta que se hicieron en el portal especializado en tecnología The Verge. Descifrar la incógnita no es fácil, especialmente después de las numerosas teorías que han visto la luz, a veces contradictorias entre sí. El medio añade otra: si sobrepasamos el 80% de carga estamos dañando la batería.

Primero consultaron Daniel Steingart, un profesor especializado de la Universidad de Princeton. “Lo más fácil es tener [su teléfono] enchufado todo el tiempo que pueda”, les indicó. Para contrastar la información acudieron a Venkat Srinivasan, otro experto en almacenamiento de energía: “Hay que mantener la carga entre 30 y 80%, ya que al 100% se degradan los electrolitos que componen la batería”. Dos versiones, aparentemente discordantes entre sí. ¿Quién tiene razón? En teoría, ambos.

En un vídeo aclaratorio señalan que, efectivamente, la vida de la batería disminuye cuando se llena por completo. Pero que, una vez en ese porcentaje, mantener el dispositivo enchufado a la corriente tampoco es negativo.

Lo anterior es apoyado por grandes compañías como Samsung, que en sus ordenadores incluye una función llamada Battery Life Extender que hace que la carga no pase del 80% para, según ellos, evitar que la batería se sobrecargue y alargar su vida útil.

No obstante, como refleja un debate de un hilo de Reddit, ninguna conclusión parece determinante. “Sí, es cierta”, dicen unos. “No hay que preocuparse”, consideran otros. “Nunca es recomendable que baje más del 10%, ya que la batería tiene un sistema de carga que funciona de forma adecuada entre un rango aproximado de porcentaje”, explica a eldiario.es la página de servicio técnico especializado iFixRapid.

Pero la hipótesis del 80% no es la única. ¿Es malo dejar el móvil toda la noche cargando? ¿Cerrar aplicaciones ayuda a prologar la autonomía? ¿No debemos utilizarlo mientras está enchufado a la corriente? Recopilamos aquellos mitos más frecuentes a la hora de cargar un móvil, un portátil o cualquier otro gadget.

Es malo dejarlo toda la noche

La firma española de tecnología BQ remite un artículo a este periódico donde explican que, una vez la batería se carga por completo, esta deja de recibir corriente y entra en la llamada fase de mantenimiento. A pesar de ello, sí que recibe una pequeña carga para asegurar que se mantiene entre el 95 y 100% de su capacidad. “Por eso recomendamos retirar el dispositivo del cargador una vez la batería esté completamente cargada”, aclaran.

Como apuntan en Xataka, las baterías actuales de iones de litio “son tan inteligentes que desconectan el flujo de entrada de energía en cuanto llegan al tope de su carga”. Así, esta creencia puede ser menos dañina de lo que en un principio pudiera parecer. “Cualquier daño causado por cargar tu móvil toda la noche debería ser insignificante”, mantiene el New York Times, donde opinan que antes de notar el problema muchos usuarios ya habrán cambiado a un nuevo dispositivo.

Hay que descargarlo por completo

Falso. De hecho, Samsung recomienda justo lo contrario: no bajar del 20%. Apple también informa que puedes cargar la batería “cuando quieras” y, por ejemplo, “gastar el 75% un día y recargarla totalmente durante la noche”. En otras palabras: hay que enchufarlo cuando necesitemos sin preocuparse por ello. “No se ha demostrado que esto pueda afectar a la batería”, matizan desde iFixRapid.

La necesidad de descargarlo por completo es un mito asociado a una tecnología del pasado: las baterías de níquel cadmio. Estas se sobrecalentaban y reducían su capacidad debido al efecto memoria, generado por cargas incompletas. La compañía de la manzana mordida explica que, en comparación las baterías antiguas, “las de iones de litio se cargan más rápidamente y tardan más tiempo en agotarse”, entre otras ventajas.

No usarlo mientras está enchufado

Según la BBC, “en general no hay ningún problema en usar el celular mientras se está cargando”. Apple recomienda “dejar que el teléfono recargue durante al menos 10 minutos antes de usarlo”, pero ninguna traba más.

En realidad el inconveniente no está asociado al uso del móvil en sí, sino al aumento de la temperatura. En BQ advierten que lo ideal es no iniciar tareas con “gran capacidad de procesado”, como juegos o grabación de vídeo, ya que podría llegar a provocar “un sobrecalentamiento general del terminal”. Según los fabricantes, el rango ideal para cargar una batería está entre los 10 y los 45ºC, una temperatura que puede incrementar según la funda del dispositivo.

Emplear solo el cargador oficial

Los estudios al respecto son claros: los cargadores falsos no pasan las pruebas de seguridad. Apple también advirtió sobre ellos, ya que más del 90% de los vendidos en Amazon no son fiables. En Sony siguen la misma práctica, y por eso aconsejan evitar baterías falsas que “pueden causar peligros de seguridad”. Especialmente después de historias como la de Ma Ailun, una ciudadana china que en 2013 murió electrocutada por coger su teléfono mientras estaba cargando.

Pero, como aclaran en BQ, sí que se pueden “utilizar cargadores de otros fabricantes”. Lo importante es que este “proporcione una corriente y tensión de salida adecuadas al dispositivo”. Para ello, es recomendable comprobar sellos de garantía fiables como el marcado CE o RoHS y que la cantidad de vatios se adapte al del original.

Cerrar apps en segundo plano

apps

Una práctica muy habitual es cerrar aquellas apps en segundo plano liberar memoria RAM y ahorrar batería. A pesar de ello, como indican en Quartz, esto no sirve para nada. En el medio recogen una conversación entre Craig Federighi, encargado de desarrollo de Apple, y Tim Cook, director ejecutivo de la misma empresa. El primero preguntó si tenía por costumbre cerrar las aplicaciones para mejorar la autonomía, y la respuesta de su jefe fue contundente: “No y no”.

Se pueden utilizar gestores como Greenify para limitar los procesos en segundo plano, pero la mayoría de sistemas operativos ya cuentan con sus propias herramientas para optimizar el rendimiento. Así lo confirma en Twitter Hiroshi Lockheimer, vicepresidente de Android: “Es mejor dejar que el sistema haga su trabajo. Fue diseñado para administrar aplicaciones sin que tú tengas que hacerlo”.