Andalucía se cita en las calles en defensa de la sanidad pública en plena ofensiva judicial contra el Gobierno de Moreno
'Muévete por tu salud' es el lema elegido por las Mareas Blancas para manifestarse este domingo (en Cádiz, el sábado) en defensa de la sanidad pública en Andalucía. La casualidad han querido que las movilizaciones en las ocho capitales de provincia lleguen en un momento crucial en la gestión del Gobierno de Moreno, cuya gerente del Servicio Andaluz de Salud (SAS) acaba de ser citada en sede judicial como investigada por un posible delito de prevaricación administrativa por abusar presuntamente del sistema de contratación de emergencia una vez superada la pandemia. La coordinadora, también desde el punto de vista judicial, ha tenido esta misma semana una mala noticia al no haber prosperado sus denuncias por el colapso de las listas de espera sanitaria.
Este miércoles la coordinadora de las mareas sanitarias trataron de calentar el ambiente para obtener la mayor repercusión posible de su convocatoria en una rueda de prensa online en la que cargaron contra la Junta por la “saturación asistencial” en la atención primaria en general, y en el medio rural en particular, y la por “reconversión sanitaria” que parece querer plantear la administración, a su juicio, para “beneficiar a la privada”, acusando al presidente andaluz de alentar “una sanidad para ricos” al “no querer solucionar el colapso en la pública”.
La movilización pretende principalmente alertar sobre el “deterioro de la sanidad pública” que, según exponen desde la organización, “está llegando a un extremo de gravedad que no podemos consentir más”. “Las largas listas de espera están generando complicaciones en enfermedades crónicas, incluso en algunos casos, por falta de atención en tiempo adecuado, situaciones irreversibles de la enfermedad y muertes. De la misma forma, las demoras asistenciales en los centros de salud se están computando ya entre dos semanas y hasta treinta días en algunos casos”, argumentan.
Mareas Blancas insisten en que ante la “irresponsabilidad y mala gestión” de Gobierno andaluz “no podemos permanecer indiferentes, no podemos dejar de mostrar nuestra indignación más elevada y nuestro rechazo a la situación”. Entre los motivos para movilizar a la ciudadanía piden “medidas de reforzamiento de la sanidad pública, el cese de los trasvases presupuestarios del dinero público a la sanidad privada, el aumento de plantillas en los centros de salud y servicios hospitalarios, y un papel activo de la ciudadanía en todo este proceso que se está dando como consecuencia de la grave irresponsabilidad” en la gestión del Gobierno andaluz.
Tal y como desarrollaron en la rueda de prensa, “no se trata de errores puntuales en la gestión sino que nos encontramos ante una estrategia bien diseñada que pasa, en primer lugar, por deteriorar la sanidad pública -principalmente la atención primaria de salud- y cronificar las listas de espera, para permitir la expansión de la sanidad privada”. “Es una estrategia conducente a generar una reconversión sanitaria que dé lugar a un modelo de servicios sanitarios dual donde una sanidad pública empobrecida, saturada y deteriorada atenderá a la gente mayor, a las personas con enfermedades crónicas complicadas o con antecedentes oncológicos, pluripatológicos o cardiovasculares”, sostiene la coordinadora.
Ese tipo de pacientes “no los quiere la sanidad privada porque les resulta de un coste excesivo para sus cálculos de beneficios”, mientras que “la sanidad privada, con empresas muchas de ellas multinacionales, va aumentando sus negocios, sus pólizas y sus infraestructuras, incrementando su expansión a costa del dinero público bajo el farisaico lema de ‘colaboración público privada’, que no es otra cosa que una clara parasitación del presupuesto público para el beneficio privado”, concluyen desde Marea Blanca.
Como ha informado este periódico esta semana, las seis grandes firmas beneficiarias de los conciertos del SAS de este año -Grupo Quirón, HLA (Asisa), Viamed, Vithas, Cruz Roja y Orden Hospitalaria de San Juan de Dios- se han aliado en diversas provincias andaluzas para conformar UTE (Uniones Temporales de Empresas), que se han repartido el 80% del mercado, ocho de cada diez pacientes derivados de la pública a la privada para menguar las abultadas listas de espera en Andalucía.
Hay una gran coincidencia entre las empresas que se beneficiaron de los contratos de emergencia a dedo que firmó el SAS entre 2021 y 2023, que investiga el juzgado de Sevilla. En el camino se han quedado un buen puñado de pequeñas y medianas empresas que, a raíz de la publicación del lunes en este periódico, han empezado a denunciar que el proceso de contratación de este 2024 no difería mucho del que ha motivado la imputación de los tres últimos gerentes del SAS.
La defensa de la sanidad pública por parte de Coordinadora, aparte de las movilizaciones de este domingo, también pasa por la tramitación en el Parlamento de una Iniciativa Legislativa Popular (ILP) con la que apuesta por “una sanidad 100% pública” en Andalucía, presentando 40.000 firmas de apoyo aunque, según aseguraron en su concentración de la semana pasada a las puertas del Parlamento, confían en “conseguir muchas más como demostración del apoyo de la ciudadanía andaluza”.
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