La presidenta de la FAMP aboga por un “gobierno de concentración” de todos los partidos en el ente
La presidenta de la Federación Andaluza de Municipios y Provincias (FAMP) Ángeles Muñoz, del PP-A, ha abogado este jueves por una especie de “gobierno de concentración” en el organismo que lidera. Su propuesta se ha producido al ser preguntada sobre si alberga alguna solución para el desbloqueo de los órganos directivos del ente, paralizados y sin que hayan sido convocados nunca por la también alcaldesa de Marbella. Ha aclarado que su propuesta está dirigida a “todos los grupos políticos en caso de que lo quieran”, en referencia también a IU y PA.
Previamente, se ha referido a los “gobiernos de concentración ahora que -según ha dicho- se habla tanto de los mismos”, en alusión a un ejecutivo central compuesto por una gran coalición de populares y socialistas a partir de las elecciones generales de 2015. “En ningún caso hay ningún planteamiento ni ninguna imposición previa. Ni tan siquiera el que se mantenga la presidencia por parte de uno u otro grupo”, ha dicho en un tono extremadamente conciliador, tras las airadas críticas que han recaído sobre su gestión en la FAMP desde hace un año, especialmente por parte del PSOE y en menor medida de IU.
La alcaldesa de Marbella dice ser consciente de la dificultad que puede entrañar llegar a un consenso generalizado en la FAMP “a un año vista de las elecciones municipales, cuando no se ha alcanzado un acuerdo previamente”. Ha incidido en que “muchas veces, y especialmente en campaña, se habla de algunas cuestiones que, a la hora de la verdad, no se traducen en pasos para que eso pueda llevarse a cabo”.
No obstante, ha anunciado que trasladará su propuesta “a la propia presidenta de la Junta de Andalucía”. De hecho, Ángeles Muñoz asegura estar pendiente de concretar una reunión a corto plazo con Susana Díaz. “Le transmitiré a la presidenta que si hay alguna posibilidad de alcanzar un acuerdo, previo a las elecciones municipales, nuestro grupo estaría absolutamente dispuesto”, en alusión a los alcaldes del PP.
Cree que al final, lo que se requiere es una FAMP defensora de los “intereses municipales”, un planteamiento en el que -ha acotado- “deberíamos estar todos”. No ha ocultado la gran dificultad de consenso que a su juicio existe por los distintos planteamientos políticos presentes. Sin embargo, cree que “los problemas de los ayuntamientos, sean del signo que sean, dependen más de la configuración municipal que del color político que ostenten”. Una vez hecho el distingo sobre las desigualdades que puedan existir, a la hora de evaluar los problemas de pequeños y grandes ayuntamientos, ha reiterado su apuesta por la unión de todos los partidos “para sacar adelante propuestas que sean favorables en el día a día”.
