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Barcelona da el primer paso para prohibir el alquiler de habitaciones turísticas en toda la ciudad

La teniente de alcaldía de urbanismo de Barcelona, Janet Sanz.

ACN

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El Ayuntamiento de Barcelona quiere prohibir el alquiler de habitaciones turísticas en todos los barrios de la ciudad, según ha explicado la teniente de alcaldía de Ecología, Urbanismo, Infraestructuras y Movilidad, Janet Sanz. Esta es una de las principales novedades de la actualización del Plan Especial Urbanístico de Alojamientos Turísticos (PEUAT), aprobado inicialmente este viernes. La prohibición entraría en vigor en agosto, cuando está previsto que lo haga la normativa de la Generalitat para regular este tipo de alquiler de menos de 31 días.

Sanz ha defendido que la oferta turística en la ciudad es “más que suficiente” y que esta tipología podría llevar a una saturación y a prácticas “irregulares”. Por otra parte, se ha decidido que no se podrá incrementar la oferta turística en el sector norte del distrito 22@.

La Generalitat ha cedido al Ayuntamiento de Barcelona las competencias para regular el alquiler de habitaciones de uso turístico, una vez su regulación entre en vigor en agosto y se permita esta actividad. Sanz ha señalado que tras analizar la situación, la decisión es directamente no permitirlo en la capital catalana porque supondría un “aumento desorbitado” de la oferta.

El consistorio tiene detectados actualmente 7.600 anuncios de habitaciones en alquiler turístico de forma “alegal”, que se traducen en 14.000 plazas, y ha añadido que con el decreto de la Generalitat podría haber hasta 670.000 plazas susceptibles de ser alquiladas, que se añadirían a las 154.000 plazas turísticas que tiene a día de hoy la ciudad. Además, ha apuntado que la mayoría de anuncios se concentran en el centro de Barcelona. Con todo, Sanz ha precisado que la regulación no afectará al alquiler de habitaciones por períodos de más de 31 días, que ya se puede hacer y que tiene su propia regulación.

Más allá del incremento de plazas, la teniente de alcalde ha explicado que de esta manera se quiere evitar también la actuación de grupos y bandas con prácticas irregulares y “mafiosas”, como las que actúan con los pisos turísticos. Sanz ha asegurado que han detectado que muchas de las viviendas de uso turístico ilegal cuyos anuncios se retiran en las plataformas se convierten después en anuncios de habitaciones.

Sin más plazas en el 22@

Sanz también ha explicado que la actualización del PEUAT adecua el plan de 2017 en base a sentencias en esta materia e introduce novedades. Desde la puesta en marcha del mismo, la oferta turística ha crecido en 1.460 plazas al pasar de 152.801 en enero de 2017 a 154.261 en agosto de 2020. Esto equivale a un crecimiento “sostenido” del 1% y que la teniente ha contrapuesto con el 20% del año en que llegaron al gobierno municipal. En las zonas más céntricas se han reducido la oferta en 940 las plazas, mientras que en el 22@ norte, Nou Barris, Sant Andreu y Sants se han abierto 2.400 nuevas. “Hemos puesto orden y queremos continuar poniendo orden”, ha afirmado.

Sanz ha apuntado que se ha observado un crecimiento de plazas muy destacado en el norte del 22@ -800 nuevas plazas desde el 2017- y por ello esta zona pasa a considerarse de mantenimiento. Esto significa que no podrá tener más plazas turísticas de las que ya hay y si se implanta un nuevo alojamiento, porque hay una baja previa, deberá adecuarse a las condiciones de densidad. Tampoco podrán ampliar las plazas los establecimientos ya existentes y no se aceptarán viviendas de uso turístico ni hogares compartidos.

Por otra parte, se introduce una nueva regulación para las residencias de estudiantes que se ubiquen en solares que no estén calificados de equipamiento. En concreto, no se permite la apertura de nuevas residencias en las zonas de decrecimiento y de mantenimiento, excepto si se reconvierte un alojamiento turístico o albergue de juventud. En el resto de zonas sí estará permitido pero con una limitación de densidad por distancia radial entre residencias.

Otros cambios que introduce la actualización son la eliminación de la posibilidad de implantar nuevos alojamientos en calles de entre seis y ocho metros de ancho. También se elimina la obligatoriedad de eliminar el 20% de las plazas existentes de la zona de decrecimiento cuando se realicen rehabilitaciones globales. Por otra parte, la regulación de viviendas de uso turístico de Ciutat Vella se asimila a la de toda la ciudad y no se deberán agrupar los pisos turísticos en un mismo edificio. Además, se ha incorporado un estudio económico y financiero al plan que, según Sanz, demuestra que eliminar el uso hotelero en la implantación de actividad en algunas zonas no tiene una relevancia importante desde el punto de vista económico.

El documento entra ahora en un período de exposición pública de tres meses durante el cual se debatirá con los grupos políticos y los agentes vecinales, económicos y sociales mediante un proceso de participación. La aprobación definitiva se hará en el pleno pero Sanz ha apuntado que las medidas, a excepción de la de los alquileres de habitaciones turísticas que está vinculada a la normativa de la Generalitat, ya están vigentes desde esta aprobación inicial.

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