PSC y comuns pactan con el alcalde de Terrassa para gobernar la Diputación de Barcelona

El PSC y los comuns gobernarán la Diputación de Barcelona, la institución supramunicipal que presta apoyo a las más 300 localidades de la provincia con un presupuesto de 1240 millones de euros. Lo harán tras lograr un acuerdo con el alcalde de Terrassa, Jordi Ballart, que en 2017 se desvinculó de los socialistas y gobierna su municipio con una candidatura independiente.

El acuerdo, avanzado por El Periódico y confirmado por elDiario.es, convertirá a la alcaldesa socialista de Sant Boi de Llobregat Lluïsa Moret en presidenta del organismo. El pacto supone el final de semanas de negociaciones en las que ERC y Junts, por una parte, y PSC y comuns, por la otra, han tratado de convencer a los ediles que podían decantar la balanza hacia un acuerdo independentista o uno de izquierdas.

El pacto, que se firmará esta mañana, no implica la entrada de Ballart y de su partido, Tot per Terrassa, en el Gobierno de la Diputación. Según informan fuentes de la formación, el apoyo se ha negociado a cambio de medidas concretas para su ciudad.

La formación de Ballart estaba dispuesta a pactar tanto con el sector liderado por el PSC como con el independentista, que le llegó a ofrecer la presidencia del organismo. Según fuentes del partido, la falta de un acuerdo concreto entre ERC y Junts ha hecho que Tot per Terrassa se acabara inclinando para apoyar a los socialistas, que gobiernan la Diputación desde 2019 gracias a un acuerdo con Junts. La ejecutiva del partido neoconvergente descartó esta vez reeditar el pacto con los socialistas, después de que Jaume Collboni arrebatara a su candidato, Xavier Trias, la alcaldía de Barcelona en un acuerdo de última hora.

Tras pactar el apoyo del partido de Ballart, PSC y comuns sumarían 23 votos, a tres de la mayoría absoluta. Son los mismos que suman ERC y Junts, aunque en caso de empate la presidencia quedaría en manos socialistas al ser la formación más votada. A falta de 24 horas para la votación, queda en el aire qué harán los 4 diputados provinciales del PP y los dos representantes díscolos de Junts (los alcaldes de Igualada y Torroelles de Foix) que han flirteado con dar apoyo al pacto progresista a cambio de inversiones en sus localidades.

El control de este organismo, la tercera institución más relevante de Catalunya, es clave para los partidos, ya que supone el manejo de un gran presupuesto y la posibilidad de emplear a un gran número de cargos electos y personal eventual de cada formación.