Nuevo 'ataque' a la paella: una campaña publicitaria insinúa que el plato de referencia de la gastronomía valenciana provoca acidez

Si hace unos días, el laboratorio farmacéutico Almirall -propietario del popular protector de estómago Almax- lanzaba una campaña publicitaria en Asturias relacionando el plato más icónico de la cocina asturiana, la fabada, con la acidez; ahora ha hecho lo mismo con el plato más representativo de la gastronomía valenciana, la paella, para anunciar su conocido antiácido. La reacción de diversas entidades, como la Cofradía gastronómica de Amigos de les Fabes del Principado de Asturias y el Ayuntamiento de Villaviciosa, obligó al laboratorio a retirar la campaña en Asturias.

En la Comunitat Valenciana, las asociaciones hosteleras Conhostur y Hostelería Valencia han mostrado este viernes su “malestar” por la que califican de “desafortunada” campaña publicitaria de Almax en el que, bajo la imagen de una paella valenciana, se puede leer “Almax y disfruta de Valencia sin acidez” en diferentes escaparates de farmacias valencianas.

Según han informado, esta campaña supone “un perjuicio” para el turismo y para “toda la cadena de productores, agricultores y profesionales de nuestro sector”, y por ello, han pedido que se proceda a su “inmediata retirada” ya que “menosprecia a nuestro producto más representativo”.

“Con muy poco gusto se ha señalado a nuestro popular plato como un causante de acidez, al asociar a una de nuestras insignias culinarias a la incomodidad y a la sensación de malestar”, han censurado, al mismo tiempo que han señalado que “esta desafortunada campaña transmite una imagen que señala a la paella como nociva, cuando precisamente por su equilibrio de productos y su buen gusto, es y ha sido el plato más importante durante muchas décadas atrás en la gastronomía valenciana y de nuestro país”.

En este sentido, han advertido que, en caso de no retirarse, y con el propósito de defender los intereses del sector y preservar los valores culturales de “nuestra cocina más ilustre y tradicional”, se adoptarán “todas las acciones que podrían ser necesarias para proteger los intereses de nuestra tierra y de las familias que viven gracias a lo que este plato tan auténtico genera, desde el agricultor hasta el camarero que te la acerca a la mesa”.