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El empleo se reduce en 93.400 personas en el primer trimestre del año, mejor dato que en 2018

A tres días de las elecciones generales, la Encuesta de Población Activa (EPA) adquiere una atención. Entre enero y marzo de este año se destruyeron 93.400 empleos respecto a los tres meses anteriores, según los datos registrados en el INE. El primer trimestre del año es malo para el empleo, pero este 2019 la pérdida de trabajo es inferior a la del año pasado, cuando la ocupación descendió en 124.100 personas. En cambio, los datos de paro son peores: el número de desempleados sube este trimestre en 49.900 personas, el peor registro desde el año 2013.

El primer trimestre suele traer malas noticias en el mercado laboral. Desde 2008, se registra una destrucción de empleo, que había sido creciente en los últimos dos ejercicios. Este año, la comparación de los resultados de enero y marzo de 2019 respecto al mismo periodo de 2018 queda condicionado por el retraso de la Semana Santa. El pasado ejercicio cayó en marzo y este año se ha celebrado en abril.

Con la reducción de 93.400 trabajadores en este primer trimestre, el total se sitúa en los 19.471.100 ocupados. La destrucción de empleo afectó más a los hombres que a las mujeres (-54.000 y -39.400, respectivamente), aunque ellos siguen siendo mayoría entre los trabajadores: 10.599.100 ocupados frente a 8.872.000 ocupadas.

Casi 600.000 empleos más en un año

Si echamos la mirada atrás a los últimos 12 meses, la EPA muestra que la creación de empleo resiste. El número de trabajadores ha crecido en 596.900 personas, un 3,16%. El ritmo de aumento del empleo supera por tanto el 3%, una tasa interanual que no se alcanzaba desde el primer trimestre de 2016. Y, en términos absolutos, los casi 600.000 empleos creados en el último año suponen el mayor dato desde 2007.

El empleo aumenta este trimestre en el sector público, en 2.600 personas, y desciende en el privado, en 96.100. Por sectores, aumentan los trabajadores de la Agricultura (+14.100 personas) y caen los de Servicios (-109.200). En la Industria (+200) y en la Construcción (+1.500) apenas varía.

Por su parte, el número de trabajadores por cuenta propia sube en 1.600 personas este trimestre y en 30.400 en los últimos 12 años.

El mal dato llega de la mano del paro, el peor desde hace seis años. El número de personas desempleadas sube este trimestre en 49.900 personas (1,51%) respecto a los tres meses precedentes y se sitúa en un total de 3.354.200 personas. Así, la tasa de paro alcanza 14,70%, 25 centésimas más que en el trimestre anterior. Si se atiende a los 12 últimos meses, el paro ha disminuido en 441.900 personas, lo que refleja un ritmo de reducción del –11,64%.

Por sexo, hay más mujeres paradas que hombres. El número de hombres desempleados disminuyó en 3.700 personas este trimestre, hasta situarse en los 1.570.500, mientras que el de mujeres en desempleo se incrementó en los primeros meses del año en 53.600, hasta las 1.783.800 personas. La tasa de desempleo femenina se sitúa en el 16,74% y la masculina en el 12,90%.

Se reduce la temporalidad

El número de asalariados, trabajadores por cuenta ajena, disminuye este trimestre en 95.800: los que tienen contrato indefinido se incrementan en 89.900, hasta alcanzar el máximo histórico de 12.124.000 personas con este tipo de contrato considerado más estable. En cambio, se reduce el número de asalariados con contratos temporales en 185.800, hasta situarse en los 4.233.700.

Así, la tasa de temporalidad –la proporción de asalariados con un contrato temporal sobre el total– cae al 25,9%. En el primer trimestre del año pasado el porcentaje era del 26,1%. Se acaba así con el aumento continuado de esta tasa en el primer trimestre del año desde 2014. El porcentaje, no obstante, sigue siendo muy elevado en comparación con los países de la UE.

También se registra un máximo en la serie histórica de la EPA en el número de trabajadores a tiempo parcial, con 2.900.700 personas con este tipo de jornadas reducidas. El porcentaje respecto al total de trabajadores se mantiene en el 14,9%, el mismo dato que en el mismo trimestre de 2018.

El trabajo a tiempo parcial es mayoritariamente femenino –suponen el 74,5% del total– y su principal problema es que hay una gran proporción que es involuntario. Según las respuestas de los entrevistados en la EPA, más de la mitad de los trabajadores a tiempo parcial (un 52%) tiene este tipo de jornada porque no ha podido encontrar un trabajo a tiempo completo. Este dato se reduce en los últimos años, pero aún es muy superior al registrado antes de la crisis, del 32,5% en 2007.

La OCDE ha publicado este jueves su informe anual sobre perspectivas en el empleo de 2019, en el que destaca que España es el segundo país con mayor tasa de subempleo, solo por detrás de Italia. La organización internacional considera que un trabajador está subempleado cuando tiene un contrato a tiempo parcial y desearía trabajar más horas o tener un contrato de jornada completa.