Más Madrid alega contra las oficinas en la Huerta de Mena: “El plan de Almeida lleva a una pérdida patrimonial irreversible”
El pasado domingo, 1 de diciembre, se produjo un concurrido paseo vecinal organizado por la plataforma Salvar Hortaleza hasta la finca conocida como Huerta de Mena o Los Almendros. La actividad evidenciaba el descontento del vecindario con el plan sobre la finca, perteneciente a las madres Adoratrices, y varias parcelas municipales, que transformará el lugar en un entorno de oficinas (con una dotación del Ayuntamiento aún desconocida). El plan prevé talar el 60% de los árboles existentes y trasplantar otro 30%
Los Almendros no es un solar yermo cualquiera. La finca sirvió de lugar de residencia del dramaturgo Carlos Arniches y en ella se produjeron veladas culturales con literatos ilustres como Rafael Alberti y otros grandes nombres de la Generación del 27. La casa y la propia finca es, además, uno de los pocos ejemplos de quintas de veraneo de las clases altas en el antiguo pueblo de Hortaleza antes de ser absorbido por la ciudad de Madrid.
El grupo municipal Más Madrid ha presentado alegaciones contra el el Plan Parcial de Reforma Interior para el área que incluye la finca, que permitiría a las madres adoratrices y a la empresa Therus Investment, S. L., que actúa como su representante, construir las oficinas sin contemplar ninguna medida de protección patrimonial ni natural sobre el entorno. José Luis Nieto, portavoz del Grupo Municipal Más Madrid en la Comisión de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad del Ayuntamiento de Madrid explica a este medio que “el plan de Almeida para la Huerta de Mena es la antesala de una pérdida patrimonial irreversible para la ciudad de Madrid”
En 2022 la asociación Madrid, Ciudadanía y Patrimonio solicitó a la Dirección General de Patrimonio Cultural de la Comunidad de Madrid la declaración de Bien de Interés Patrimonial de la finca. Ante la falta de respuesta, acaba de reiterar la petición, tal y como explicamos en este artículo. Así mismo, según explican las alegaciones de Más Madrid, hay encargado un informe específico por parte la Dirección General de Patrimonio Cultural para considerar los valores de Los Almendros. En opinión de Más Madrid, parece precipitado aprobar una operación urbanística que solo se sostiene por la inexistencia de elementos protegidos antes de que concluyan dichos procesos.
Para respaldar la postura conservacionista, el documento hace referencia a las palabras pronunciadas por el director general de Patrimonio Cultural durante la sesión celebrada de la Comisión Permanente de Cultura, Turismo y Deporte del Ayuntamiento de Madrid, celebrada el 12 de julio de 2022. “Sin lugar a dudas, valores patrimoniales tanto naturales como paisajísticos con sus almendros —que dan nombre a la propia finca— como también valores históricos y culturales”, se dijo entonces.
Lo que pide el grupo político en la fase de información pública es, en resumen, que la tramitación del expediente no continúe sin la existencia de informes específicos, emitidos por las direcciones generales competentes, del Ayuntamiento y la Comunidad de Madrid. “El Plan General de Ordenación Urbana de Madrid obliga a catalogar y proteger edificios, conjuntos y espacios de interés histórico, incluso cuando no sean Bienes de Interés Cultural (BIC). En el caso de la Finca de los Almendros, la ausencia de un informe imparcial o un análisis institucional demuestra un grave incumplimiento de estas obligaciones legales. Esto pone en riesgo la integridad del patrimonio de la ciudad y vulnera los derechos de la ciudadanía a disfrutar de este entorno en el futuro”, explica Nieto.
Más Madrid hace referencia al hablar de imparcialidad al informe de parte presentado en la documentación del expediente. Dicho documento, firmado por un técnico contratado por la empresa interesada que actualmente es alto cargo de la Comunidad de Madrid, descarta la necesidad de proteger la finca por sus valores patrimoniales o naturales. Aduce, así mismo, que no es necesario que pase por la Comisión Local de Patrimonio Histórico de Madrid.
El informe, se dice en las alegaciones, no tiene en cuenta el valor de la finca como conjunto, en cuanto a la arboleda y el complejo arquitectónico, sino que se limita a analizar elemento por elemento. Por otro lado, explica, “el informe presume en sí mismo la conclusión, o petición de principio: el bien no tiene valores suficientes para ser protegido, y al no estar protegido previamente, se elude la necesidad de someterlo a la evaluación de una instancia superior como la Comisión Local de Patrimonio Histórico (CLPH). Este ciclo perpetúa la falta de protección sin permitir una evaluación independiente y objetiva”.
Más Madrid abunda en las razones esgrimidas por Madrid, Ciudadanía y Patrimonio para reclamar la protección de la Huerta de Mena-Los Almendros y pone sobre la mesa la necesidad de que se estudie su posible inclusión en el Catálogo de Ordenación Urbana del Ayuntamiento de Madrid. Los argumentos tienen que ver con su valor como huerta histórica, con el valor urbanístico como vieja quinta del pueblo de Hortaleza (lo que tiene cabida expresa en la Ley para ser considerado Bien de Interés Patrimonial, además de ser anterior a 1900) y el valor cultural como escenario de sociabilidad intelectual del entorno de Carlos Arniches y la Generación del 27.
El grupo municipal de izquierdas recuerda que más del 60% de la superficie de partida tiene titularidad pública (hay que sumar la parcela de la discordia, de 23.095,00 m²) y pide un equipamiento público para el distrito. “Es por todo esto que resulta injustificada la urgencia por tramitar un plan parcial que va a poner en carga más suelo terciario en la ciudad, cuando el propio Ayuntamiento estima que hay un exceso de oficinas. Y, para colmo, cuando justo enfrente de la Huerta de Mena, en la zona de oficinas Cristalia, cuelga un prominente cartel de ”alquiler de espacios“, que indica claramente una sobreoferta de espacio para oficinas, recalca el portavoz de Más Madrid”.
Las alegaciones de Más Madrid vienen a sumarse a otras reclamaciones de asociaciones vecinales y por la conservación del patrimonio, que afirman que la Huerta de Mena es algo más que la finca de las monjas, con valores que hablan del desarrollo del antiguo pueblo de Hortaleza y la cultura de todos los madrileños.
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