Representantes del PSOE y de Junts han mantenido este viernes una reunión en Suiza, según ha adelantado El Periódico y ha confirmado a elDiario.es fuentes conocedoras de la reunión. El encuentro se produce apenas cuatro días después de que el líder de la formación independentista, el expresident Carles Puigdemont, reclamara el lunes a Pedro Sánchez que se someta a una moción de confianza después de asegurar que el Gobierno ha incumplido el acuerdo de investidura firmado con su partido.
A la reunión han asistido, por parte de Junts, la diputada Miriam Nogueras y el secretario general del partido, Jordi Turull. Estaba previsto que se produjera un encuentro antes de las Navidades, en el que ambas partes tienen encima de la mesa la negociación de la cesión de las políticas de inmigración a Catalunya, tras el acuerdo firmado entre los socialistas y la formación de Puigdemont para que Junts se abstuviese en enero en la votación del decreto 'ómnibus' del Gobierno.
Las relaciones entre ambas partes atraviesan un momento complejo a las puertas de la negociación de los Presupuestos de 2025 para los que Sánchez necesita a los de Puigdemont. También se ha dado en los últimos días una suerte de coqueteo entre Junts y el PP de Alberto Núñez Feijóo, que tantea ahora a la formación independentista para hacer un frente contra el Gobierno progresista.
El mismo lunes Junts pactó con el PP una enmienda conjunta para suspender un impuesto a la generación eléctrica aprobado en 2013 por el Gobierno de Mariano Rajoy . La enmienda se aprobó con el voto favorable de los proponentes, más Vox, ERC y PNV. El Gobierno intentó usar su capacidad de veto en enmiendas que suponen minoración de ingresos, pero la ausencia del diputado del PSOE Juan Antonio Lorenzo lo impidió.
A este clima se unió el martes el discurso de Puigdemont, que consideró que Sánchez “no es de fiar” por esos incumplimientos de sus acuerdos. “Los avances son escasos, la descoordinación entre lo que se aborda en Suiza y la práctica del Gobierno es muy preocupante”, expuso el expresident, que resumió asegurando que la confianza entre el bloque que dio la mayoría a Sánchez “se ha roto”.
Someterse a una cuestión de confianza es una potestad que únicamente compete al presidente del Gobierno y que Junts no tiene forma de forzar. La formación independentista se limitó a registrar una propuesta no de ley (PNL) para reclamar a Sánchez que vuelva a pedir el acuerdo del Congreso con el objetivo de abrir un debate sobre la confianza de los grupos que ya le mostraron apoyo en septiembre de 2023.
Feijóo aprovechó el miércoles la amenaza de Puigdemont para tratar de hacer guiños a Junts. Durante la sesión de control al Gobierno se dirigió a la bancada nacionalista y les espetó: “Ya les dijimos que [Sánchez] no era de fiar”. Ese mismo día, el presidente del Gobierno consideró que una posible alianza entre Junts y PP era “política ficción”. “Los problemas de fondo en un Parlamento diverso son que cualquier acercamiento de Junts al PP actúa en su detrimento en la política catalana y del PP a Junts le abre al PP un frente interno y externo con Vox”, zanjó, en una conversación con periodistas .
El Gobierno, añadió, está “decidido” a presentar los Presupuestos de 2025 antes de final de año. “Estamos en minoría, pero estamos dispuesto a sudar la camiseta y más”, dijo, respecto a sus números en el Congreso, que requieren de Junts. Además del encuentro de este viernes, Sánchez se abrió, asimismo, a una reunión con Puigdemont. No hay “ningún problema” para ese contacto, dijo, porque el Ejecutivo está en la fase de “pasar página” respecto al procés.