El Parlamento Europeo ha pedido a los Gobiernos que garanticen el acceso al aborto. Y lo ha hecho con el voto en contra del Partido Popular español –el PP europeo se ha partido entre el no y la abstención– y de Vox. El resto de grupos españoles ha votado a favor. Así, la resolución que pide garantizar el acceso universal a los servicios de salud y derechos sexuales y reproductivos en todos los Estados miembros y que alerta del retroceso que han sufrido estos derechos en países como Polonia ha salido adelante con 378 votos a favor, 255 en contra y 42 abstenciones.
En su exposición de motivos, el documento señala que “la involución y la regresión en el ámbito de los derechos de las mujeres están ganando impulso y contribuyendo a erosionar los derechos adquiridos y a poner en peligro la salud de las mujeres”. Además, durante la crisis sanitaria, mujeres y niñas de todo el mundo han visto limitado su acceso a los servicios de salud sexual y reproductiva “con el falso pretexto de una menor prioridad”.
Entre los retrocesos mencionados en la resolución, “el derecho a un aborto seguro y legal es uno de los principales objetivos de los ataques”. Las restricciones legales al aborto no reducen su número, sino que llevan a las mujeres a arriesgar su vida y su salud para interrumpir su embarazo en condiciones de riesgo, según el Parlamento Europeo: “Incluso cuando se puede abortar legalmente, hay obstáculos que limitan el acceso. Uno de los obstáculos más problemáticos es la denegación de la atención médica fundamentada en las creencias personales, principio en virtud del cual los profesionales sanitarios a menudo se abstienen de practicar abortos apelando a sus convicciones”.
La presidenta de los socialistas en la Eurocámara, Iratxe García, denunció durante el pleno que “mueran en Europa mujeres por abortar”. García añadió: “Con la salud de las mujeres no se juega. Prohibir la educación sexual y los anticonceptivos va a traer más embarazos no deseados. Y prohibir el aborto va a llevar que mueran más mujeres en abortos clandestinos. Hemos tenido que escuchar a algunos dirigentes decir que el aborto es cosa de la izquierda para eliminar lo que nos sobra, y eso es una vergüenza. Tengamos más respeto hacia las mujeres. Estamos plenamente comprometidos con la libertad de las mujeres a elegir sobre nuestra maternidad y elegir sobre nuestros cuerpos”.
Por contra, la eurodiputada del PP Rosa Estarás, que ya votó en contra de la resolución en la comisión de Derechos de las Mujeres e Igualdad de Género (FEMM) del Parlamento Europeo, afirmó que se oponía al texto por su rechazo a calificar el aborto como “un derecho humano”.
“La salud y los derechos sexuales y reproductivos no son ‘servicios’, son derechos humanos. Formar parte de la UE implica estar comprometidos con su garantía: no podemos decir que está en manos de cada Estado ‘decidir’ si viola o no los derechos humanos”, ha dicho la eurodiputada de Podemos María Eugenia Rodríguez Palop, vicepresidenta de la comisión FEMM: “Los ataques contra los derechos de las mujeres, combinados casi siempre con ataques a los derechos de las personas LGTBI, forman parte del deterioro de la democracia y el Estado de Derecho que se está produciendo en varios países europeos”.
La eurodiputada de Ciudadanos Soraya Rodríguez, por su parte, también defendió la resolución en el pleno: “No podemos dar ningún paso hacia atrás en lo que se refiere a los derechos reproductivos de las mujeres en Europa. Según la OMS, los abortos inseguros son la tercera causa más habitual de muerte materna del mundo. Votamos a favor de la libertad de decidir sobre nuestra salud”.
“Está en juego el futuro de nuestra cultura e identidad. Nada es más grave que no estar a favor de la vida”, dijo la eurodiputada de Vox Margarita de la Pisa en el debate.