Gobierno y Comunidades Autónomas han definido los detalles de la vuelta al cole a menos de dos semanas para el comienzo de curso. En junio, cuando la tasa de COVID-19 en España era mínima desde que se disparó la pandemia, ya habían acordado un documento de mínimos, que se ha ampliado y modificado ahora a raíz del empeoramiento de la situación epidemiológica. Ahora serán las Consejerías de Educación las que incorporen estas modificaciones a sus propios planes, ya que las competencias están delegadas a las autonomías.
Los expertos indican que estas primeras semanas son claves: dependiendo de que los protocolos funcionen o no, habrá que consolidarlos o modificar algunos sobre la marcha. El acuerdo tiene como objetivos garantizar la presencialidad de la educación, “crear entornos seguros” y “posibilitar la detección precoz de casos y su gestión”. Y tres principios de prevención, uno sobre la limitación de contactos; la higiene de manos; y la desinfección y ventilación de los centros. La meta es que este curso, que se realizará en pandemia porque no está prevista que una vacuna esté lo suficientemente administrada antes de junio del año que viene como para que la situación sanitaria esté controlada, se pueda completar sin que los colegios se conviertan en focos de incidencia.
¿Serán las clases presenciales?
Tras seis meses de enseñanza online, que ha abierto una grave brecha entre los alumnos con facilidades para acceder a herramientas digitales y los que no, para este septiembre se parte de la premisa de garantizar la “asistencia presencial diaria de todo el alumnado”, aunque en todo caso priorizando a los menores de 14 años.
“Si fuera necesario por la evolución epidemiológica o la falta de espacios se podrá contemplar una modalidad mixta (combinación de educación presencial y a distancia)”, añadía ya el primer documento que presentó Educación en junio. Murcia ha sido la primera comunidad en reconocer, ya en agosto, que efectivamente no va a poder ser así y que la educación será este curso, como mínimo, semipresencial; Aragón y Madrid también lo han dispuesto así para los últimos cursos de secundaria. Hay comunidades que se han comprometido a que sea totalmente presencial, pero otras aún no han decidido su planificación.
¿Cómo se reasignarán los espacios?
Se recomiendan las entradas escalonadas al centro, la reubicación de espacios y la reorganización de turnos de patio, y para todo eso se insta “en casos excepcionales” a que los municipios ofrezcan lugares como bibliotecas y polideportivos para dar clases, algo que han ya han hecho este miércoles el Ayuntamiento de Barcelona y el de Madrid. La Iglesia también ha ofrecido algunos de sus inmuebles y se ha coordinado ya, por ejemplo, con las autoridades de la Comunidad Valenciana.
¿Cómo serán las ratios?
Sobre ratios, el primer documento de Educación ya establecía “idealmente” un máximo de 15 alumnos y alumnas, “hasta un máximo de 20” si fuera necesario. Los define como “grupos de convivencia estables” y, en teoría, no deberían mezclarse con otros. Sería lo llamado coloquialmente “grupos burbuja” cuyos miembros pueden socializar y jugar entre sí. Pero, para las clases que no puedan organizarse así –a partir de 12 años–, la única indicación es que cuando tengan que coincidir varios grupos se mantenga el metro y medio. “Las consejerías de educación conservan margen para flexibilizar el máximo del alumnado para los grupos de convivencia estable siempre que la autoridad sanitaria de salud pública de dicha Comunidad Autónoma así lo autorice”, dice Educación.
Son las comunidades las que han ido anunciando cuáles son sus decisiones concretas acerca de ratios, algunas aún por esclarecer. Casi todas las que lo han presentado ya se han mantenido en ese rango, aunque algunas, como Euskadi, defienden que antes de la pandemia no lo sobrepasaban así que no hace falta reducirlo. En Catalunya, Andalucía, Murcia, Comunidad Valenciana, Madrid y Baleares la media en cada aula de primaria del curso 2019-2020 sí sobrepasaba los 20 alumnos, y la de secundaria los 25.
¿Cuáles serán las medidas de higiene?
Las mascarillas serán obligatorias a partir de los seis años, según han pactado Sanidad con todas las Comunidades Autónomas. Además, se hace hincapié en el lavado de manos, que deberá producirse con asiduidad durante la jornada escolar, al menos cinco veces al día. Tanto con agua y jabón como con geles hidroalcohólicos. Habrá clases de educación para la salud en las que se enseñará sobre la correcta higiene de manos e higiene respiratoria y el uso adecuado de la mascarilla.
¿Y en los centros?
Se intensificará la limpieza, en especial en los baños y de lugares de mayor uso. Y se ventilarán con frecuencia las instalaciones, al menos durante 10-15 minutos antes de empezar las clases, en los recreos y al acabar el día. Esta es una de las medidas que más han destacado desde el Ministerio de Sanidad, porque los estudios indican que la ventilación es fundamental para reducir las posibilidades de contagio. Por eso, el documento recomienda mantener abiertas las ventanas siempre que sea posible.
¿Cómo será el comedor?
El acuerdo destaca la importancia de que se mantengan en funcionamiento los comedores escolares por la función que cumplen en la alimentación saludable de los alumnos. “Es prioritario el mantenimiento de este servicio, ya sea en el centro educativo o para llevar a domicilio”, dice el documento. Se ha acordado que en el comedor también se mantenga la distancia de 1,5 metros, salvo en los grupos de convivencia. Y se recomienda que se asignen puestos fijos para los alumnos durante todo el año.
¿Y el transporte escolar?
En el transporte escolar colectivo será obligatorio el uso de mascarilla a partir de 6 años de edad, y recomendable en niñas y niños de 3 a 5 años. También se asignarán a asientos fijos al alumnado para todo el curso escolar, salvo que, en base a la situación epidemiológica, las autoridades sanitarias determinen un uso más restrictivo de los vehículos.
¿Se tomará la temperatura a los niños?
Sí. Se tomará la temperatura corporal a todo el alumnado y al personal de forma previa al inicio de la jornada. En caso de que la toma de temperatura se realice en el centro educativo, éste dispondrá la forma de llevarlo a cabo evitando en todo caso aglomeraciones y asegurando el mantenimiento de la distancia mínima interpersonal. La ministra de Educación ha asegurado que también se pedirá a los padres que lo hagan en casa antes de acudir a la escuela, para garantizar que todos los niños vayan en perfectas condiciones de salud.
¿Habrá sanciones si un niño va a clase con fiebre?
No se han establecido sanciones para los padres, pero los ministros de Educación y Sanidad han resaltado la responsabilidad de las familias en evitar que se produzcan contagios. En todo caso, los centros educativos informarán explícitamente (y con confirmación de recepción) a los padres, madres y otras figuras parentales, o al alumnado mayor de edad, de que los estudiantes con cualquier síntoma no pueden ir a clase.
¿Habrá eventos deportivos y celebraciones?
En general, se evitarán las actividades que conlleven la mezcla de alumnado de diferentes grupos de convivencia o clases en las que no se pueda mantener la distancia mínima interpersonal de 1,5 metros. Los eventos deportivos o celebraciones en los colegios se realizarán sin asistencia de público.
¿Qué se hace si hay un caso positivo de coronavirus?
Se perfila un protocolo: si aparecen síntomas en un niño o niña estando en el colegio, hay que llevarlo “a un espacio separado de uso individual, colocar mascarilla quirúrgica (tanto al que ha iniciado síntomas como a la persona que quede a su cuidado), y contactar con la familia”. El docente que se haga cargo deberá portar un equipo de protección individual “adecuado”: mascarilla quirúrgica o, si el sospechoso es un menor de menos de 6 años, que no llevaría mascarilla, una FFP2 sin válvula. Luego hay que “llamar al centro de salud de Atención Primaria de referencia, o al teléfono de referencia de la comunidad o ciudad autónoma, y seguir sus instrucciones”. Durante ese tiempo, y lo mismo si al niño se le ha detectado fuera del colegio, según los protocolos del Ministerio de Sanidad, todos los compañeros que hayan sido un contacto estrecho deberían guardar aislamiento.
En la nueva guía que Sanidad ha aportado este jueves, hay adjunto un anexo con la información a progenitores que habrá que mandar si se notifica un caso en el centro, que tendrán que estar un poco más atentos a sintomatología.
¿Habrá permisos remunerados para los progenitores si los niños no pueden asistir a clase?
El Gobierno no ha aclarado qué medidas pretende poner en marcha para garantizar la conciliación de aquellos padres o madres que tengan que hacerse cargo de los menores en el caso de que tengan que permanecer en cuarentena, una de las grandes preocupaciones de las familias. Este documento que hemos acordado no recoge el tema de la conciliación“, ha admitido Celaá, aunque ha garantizado que el ”Gobierno está preocupado por dar una respuesta a las familias“: ”Pensaremos en respuestas“, ha apostillado. Ayer, el Gobierno sí anunció que están estudiando una modalidad de bajas o permisos para esas situaciones, pero no se ha concretado ningún detalle y fuentes de Educación reconocen que es una medida que supone dificultades porque implica a varios ministerios. La titular de Economía, Nadia Calviño, ha recordado en una entrevista que este tipo de actuaciones tienen ”impacto económico“.El Gobierno todavía está pensando cómo garantizar a los cuidadores de esos niños que puedan atenderlos: si con una baja o con un permiso retribuido.
¿Cómo comunicará el centro los casos?
En la nueva guía para la detección de casos se habla de una figura de “coordinación” de COVID-19, que ya habían incorporada varias regiones en sus planes. Se trata de un profesional, en principio docente pero en algunos lugares podrá ser sanitario u otro tipo de profesional porque no se especifica, que será el encargado de planificar las acciones a seguir si se detecta un caso. Se supone que tendrá que ser la persona de referencia del centro sobre el tema y el interlocutor entre el centro y los servicios de salud si se producen casos.
¿En qué caso se cerrará el colegio?
Si es un caso en una única aula, todos los miembros del “grupo de convivencia estable” tendrán que guardar aislamiento a la espera de que haya habido algún contagio. Si ha habido varios en varias aulas, se podrá cerrar algún aula pero el curso continuará con normalidad. Solo se cerrará el colegio si hay transmisión comunitaria en el centro, pero será “en última instancia” y previa decisión de los servicios de salud autonómicos. No hará falta pasar por autorización del Gobierno central.
Se considerará “brote” en una escuela a partir de los tres casos.
¿Hay más recomendaciones para los centros educativos?
El documento firmado por los responsables del Gobierno central y los autonómicos hace también algunas recomendaciones a los centros educativos. Ante todo, priorizar en la medida de lo posible la utilización de espacios al aire libre, ya que los espacios abiertos reducen sensiblemente las posibilidades de contagio. Además, pide que se intensifique la comunicación con las familias, pero siempre por teléfono, correo electrónico,mensajes o correo ordinario, para facilitar las gestiones administrativas de forma telemática y así minimizar la presencia de personas ajenas al centro. También recomienda a las familias que vayan andando o en bicicleta a la escuela, porque son las opciones que evitan compartir espacios cerrados. Destacan también que se intenten prevenir posibles casos de discriminación en relación con la COVID-19, y que se atiendan especialmente los casos de mayor vulnerabilidad emocional y social que hayan podido producirse a causa de la pandemia.