Los 78 concejos de Asturias registraron más defunciones que nacimientos el año pasado

La totalidad de los 78 concejos asturianos registró el pasado año más defunciones que nacimientos, y los que peor saldo vegetativo tuvieron fueron Illano,Taramundi, Amieva, San Tirso de Abres, Villayón, Pesoz, Grandas de Salime y Villanueva de Oscos.

Así lo refleja un análisis del Movimiento Natural de la Población publicado por la Sociedad Asturiana de Estudios Económicos e Industriales (Sadei), que resalta que 2023 estuvo marcado en Asturias por un mínimo de nacimientos en la serie histórica iniciada a principios del siglo pasado y por un saldo negativo en todos los concejos.

El pasado año se registraron en la comunidad 13.012 decesos, un 6,6 por ciento menos que en 2022, frente a 4.545 nacimientos, un 4,2 por ciento menos que en el año precedente.

De estas cifras se desprende un saldo vegetativo (diferencia entre muertes y nacimientos) negativo de 8.467 personas, inferior en 725 al de 2022.

El concejo con peor saldo vegetativo fue Illano, con 38,2 personas por cada mil habitantes, seguido de Taramundi, con 26,9; Amieva, con 23,3; San Tirso de Abres, con 23,2; Villayón, con 21,8; Pesoz, con 21,6; Grandas de Salime, con 21,5, y Villanueva de Oscos, con 21,1.

En el lado opuesto, Llanera registró el saldo vegetativo menos negativo, con 3,9 personas por cada mil habitantes, seguido de Santo Adriano, con 5,2; Oviedo, con 5,8; Siero, con 5,9, y Caravia, con 6.

Natalidad y maternidad

El análisis de Sadei también refleja que el concejo con mayor tasa bruta de natalidad fue Onís, con 9,4 nacidos por cada mil habitantes, seguido de Santo Adriano, con 7; Coaña, con 6,5; Belmonte de Miranda, con 5,7, y Cangas de Onís, con 5,6.

Frente a ello, Pesoz, Illano y Yernes y Tameza no registraron ningún nacimiento en 2023, mientras que a la cola se situaron también Amieva y Peñamellera Alta, con 0,8 y 0,9 nacidos por cada mil habitantes, respectivamente.

La edad media de la maternidad en Asturias interrumpió en 2023 su tendencia ascendente al bajar una décima, hasta 33,3 años para el total de mujeres que dieron a luz en el año.

Las madres con nacionalidad española subieron su edad media hasta 33,8 años, frente a los 30,5 años de las extranjeras.

La cifra de nacidos de madres extranjeras en Asturias ascendió el pasado año a los 684, cifra que representa el 15 por ciento del total.

Las nacionalidades más representadas en este colectivo de madres foráneas son la colombiana (106), la rumana (65), la marroquí (58), la venezolana (52) y la paraguaya (36).

Uniones matrimoniales

Durante el pasado año se celebraron en Asturias 3.398 uniones matrimoniales, un 3,5 por ciento menos que en 2022, de las que cuatro de cada cinco fueron civiles.

Sariego fue el concejo con mayor tasa de nupcialidad, con 5,9 uniones por cada mil habitantes, seguido de Santa Eulalia de Oscos, con 5,8; Onís, con 5,3; Nava, con 4,7, y Muros del Nalón, con 4,6.

En Ponga y Yernes y Tameza no se celebraron bodas y a la cola se situaron también Ibias y Peñamellera Alta, con 0,9 por cada mil habitantes en ambos casos.

Mortalidad

Pese a que la cifra de decesos descendió el pasado año de forma “coyuntural” un 6,6 por ciento, Sadei apunta que “parece previsible que el ritmo de los fallecimientos vuelva a crecer en los próximos años”, con tasas moderadas de incrementos anuales.

Ello se deberá al mayor número de personas mayores de 65 años, cuyo peso sobre el conjunto de la población supera ya el 27 por ciento, una proporción que irá en aumento durante la próxima década.

Illano fue el concejo con mayor tasa de mortalidad, 38,2 decesos por cada mil habitantes, seguido de Taramundi, con 29,5; San Tirso de Abres, con 26,8; Onís, con 26,7, y Belmonte de Miranda, con 25,4.

Las tasas de mortalidad más bajas fueron las registradas en Caravia, con nueve decesos por cada mil habitantes; Llanera, de 9,5; Siero, de 11; Corvera y Yernes y Tameza, ambos con 11,1, y Oviedo, con 11,6.