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Page tras su nuevo encontronazo con Ferraz: “Hoy mi posición en el PSOE es minoritaria, mañana a lo mejor no”

Carmen Bachiller

25 de enero de 2024 14:59 h

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El presidente de Castilla-La Mancha ha dicho este jueves que “mi adversario no es ningún socialista, sino los independentistas”, después de la lluvia de críticas desde el PSOE nacional, que incluyen también a dirigentes socialistas de otras comunidades autónomas. Algunos como el exministro José Blanco han llegado a pedirle que “se calle”.

Emiliano García-Page no ha querido mantener la polémica, ha rebajado el tono pero matizando que, aunque hoy su posición es minoritaria en el PSOE, “mañana a lo mejor no”. Así respondía al término del Pleno celebrado este jueves en las Cortes de Castilla-La Mancha, cuando le han preguntado sobre si ratificaba sus declaraciones de ayer en las que aseguró que “el PSOE está en el extrarradio de la Constitución” por los pactos con el independentismo catalán y afeaba “la relativización del terrorismo”.

“No voy a insistir más. Ya hablé ayer suficientemente. No quiero ser protagonista. De verdad, sinceramente. Me importan las políticas, no los políticos”, aseguraba a preguntas de los periodistas que le han cuestionado sobre las afirmaciones de la vicepresidenta primera del Gobierno de España, María Jesús Montero quien le ha acusado de buscar “notoriedad”.

“Es muy buena amiga y está haciendo muy buena política económica”, respondía el presidente castellanomanchego. “Mire, coincido y mucho con la política social y económica del Gobierno. Discrepo claramente con la cuestión territorial y con los independentistas. Mi adversario no es ningún socialista, sino los independentistas”, defendía.

También le han preguntado si se siente más respaldado por los barones del PP que por los dirigentes de su propio partido y de nuevo se mostraba esquivo. “Llevo desde los 16 años defendiendo al PSOE, e incluso haciendo todos los esfuerzos del mundo para que el PSOE gane las elecciones”, y eso en su opinión “no se puede discutir”.

¿Nota nerviosismo en su partido?, insistían los periodistas de los que ha intentado zafarse en varias ocasiones en los pasillos del Parlamento regional. “No hay ningún problema, de verdad. En el SOE en el que yo empecé a militar hace muchísimos años se puede opinar. Al final yo tengo una posición que es minoritaria, claramente, pero respetable en todo caso porque lo que hoy es minoritario a lo mejor el día de mañana no lo es”.

García-Page ha reconocido también que no ha hablado “con nadie” ni de Ferraz ni de Moncloa y ha dicho no temer posibles sanciones de su partido. Ha dicho estar tranquilo. “Solo me pongo nervioso cuando tengo que ganar las elecciones”.

Cree que el país vive un “momento delicado”, que hay un “debate muy agrio” y que “cualquier cosa altera”. Asegura que no está preocupado porque coincide “en un 90% con lo que hacen el PSOE y el Gobierno, pero también ha reclamado que se le permita ”decir las cosas“. Sobre si eso es o no el camino, como le han afeado desde Madrid, él responde que ”eso es otra opinión más“.

Lo que no ha querido aclarar es a qué se refería ayer en Fitur cuando les dijo a tres presidentes autonómicos del PP que le iban a “extraditar”, mientras hablaban sobre su situación personal en el seno del PSOE y también sobre la financiación autonómica.