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Catalunya se suma a las comunidades que piden que se declare el estado de alarma

El vicepresidente del Gobierno y consejero de Economía y Hacienda, Pere Aragonès, durante la reunión semanal del Consejo Ejecutivo en la Generalitat de Catalunya, en Barcelona, Cataluña, (España), a 13 de octubre de 2020.

Pau Rodríguez

23 de octubre de 2020 17:52 h

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Catalunya se ha sumado finalmente a las comunidades autónomas que reclaman un estado de alarma al Gobierno de Pedro Sánchez. Los miembros del Govern se han dado cita de forma extraordinaria este viernes a las 18:30 horas, donde han decidido reclamar al Ejecutivo central que active las medidas excepcionales, de forma que pueda aplicarse un toque de queda nocturno en la Catalunya. Además el Govern reclama que las medidas del estado de alarma se gestionen directamente desde la Generalitat, es decir, que las competencias sean traspasadas a Catalunya tal como permite la ley.

“La situación es extremadamente grave y nos recuerda demasiado a lo que ocurrió en marzo pasado. No nos lo podemos permitir”, ha asegurado el vicepresident Pere Aragonès. “El Govern de la Generalitat solicitará la declaración del estado de alarma en Catalunya, pues todo indica que la situación nos obligará a tomar medidas restrictivas de la movilidad en los próximos días”, ha indicado. El jefe del Govern en funciones ha especificado que, en cuanto se aplique el estado de alarma, la Generalitat aprobará un toque de queda a todo Catalunya para frenar la movilidad nocturna.

Aragonès además ha insistido en la necesitad de que sea la Generalitat quien tome las decisiones. “Pedimos estado de alarma con el mando único de la Generalitat, para tener todas las herramientas para poder hacer frente a la pandemia y, en definitiva, salvar vidas. Queremos asumir toda la responsabilidad, porque tenemos un conocimiento directo y monitorizamos directamente la evolución de la pandemia”, ha indicado. Un “estado de alarma territorializado”, ha insistido, “que permita al Govern tomar todas las medidas necesarias”. Aragonès ha detallado que desde el Gobierno central han respondido positivamente a dejar la gestión en manos de la Generalitat.

Antes de la rueda de prensa los responsables del Govern se han reunido de forma urgente con los líderes de los grupos políticos del Parlament, a quienes han trasladado la gravedad de la situación. Además el Ejecutivo catalán ha asegurado que comparecerán de forma periódica ante el Parlament para dar explicaciones sobre todas las medidas que tomen.

“Es clave la anticipación de las medidas que tomamos desde las administraciones, como también el compromiso social. Pedimos a la ciudadanía que se quede en casa hasta que se habilite el estado de alarma que nos permita tomar estas medidas. Las imágenes que se produjeron el fin de semana pasado no se pueden repetir este”, ha añadido el vicepresident. 

En las últimas horas, comunidades como el País Vasco, Extremadura o Asturias han solicitado al Ejecutivo central el estado de alarma para restringir la movilidad. Otras como Madrid o la Comunitat Valenciana han anunciado también toques de queda para limitar las reuniones durante la noche. 

Desde el Departamento de Salud siempre han sido reacios a pedir el estado de alarma, pero a la vez venían repitiendo en los últimos días que no descartaban ninguna medida siempre que conservasen las competencias. En el Consejo Interterritorial del jueves trasladaron que querían las “herramientas jurídicas habilitadas para poderlas aplicar cuando el Govern decida aplicar medidas de restricción de movilidad”. 

En este sentido, la consellera de Salud, Alba Vergés, no se cerraba a esa posibilidad en una entrevista en TV3 este viernes. Sin ser muy explícita, expresaba que si el Gobierno aprueba “una herramienta jurídica” que les dé “más facilidades” para aprobar restricciones, estarían a favor. 

La epidemia sigue disparada en Catalunya y en las últimas horas se han notificado 5.403 casos de coronavirus. Sin que se note todavía los efectos del cierre de bares y restaurantes, en vigor desde hace una semana, la presión hospitalaria sigue subiendo. En los últimos siete días, la ocupación de las UCI por COVID-19 ha crecido un un 50% y ahora mismo alrededor del 40% de las camas de críticos ya están ocupadas por enfermos de coronavirus.

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