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El bipartito valenciano de PP y Vox bendice al sector del juego al acercar las casas de apuestas a los colegios

El president Carlos Mazón (a la derecha) conversa con el vicepresidente de Vox, Vicente Barrera, en las Corts Valencianes.

Lucas Marco

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Vuelve la barra libre en el sector del juego. El bipartito valenciano de PP y Vox, presidido por el popular Carlos Mazón, pretende cargarse de un plumazo la prohibición de los salones de juego cercanos a los centros educativos que promulgó el Ejecutivo anterior del Pacte del Botànic. La ley, que contó con la oposición frontal de la patronal del juego, impuso una distancia mínima de 850 metros respecto a los centros educativos para proteger a los menores de edad (según un Informe sobre Adicciones Comportamentales, elaborado por el Observatorio Español contra las Drogas y las Adicciones, el 4,7% de los estudiantes españoles presentaría un posible juego problemático).  

El PP y Vox, con mayoría parlamentaria, han presentado dos enmiendas a la Ley de Medidas Fiscales, un cajón de sastre legislativo, que eliminarían la distancia mínima de los salones de juego. La enmienda, firmada por la portavoz de Vox en las Corts Valencianes, Ana Vega, y por el síndico del PP, Miguel Barrachina, modifica una disposición transitoria de la Ley de Regulación del Juego y de Prevención de la Ludopatía, manteniendo la vigencia de las autorizaciones concedidas con anterioridad a la aprobación de la norma en 2020.

Así, “no les serán de aplicación los requisitos de distancia y ubicación” que marcaba la ley. Además, las empresas titulares de salones de juego que hubieran obtenido autorización de instalación de otro local pero no el permiso de funcionamiento “deberán comunicar a la dirección territorial correspondiente cuál de los dos salones implicados en el procedimiento desean explotar”, en el plazo de tres meses desde la entrada en vigor de la nueva disposición. La nueva regulación también beneficia a las empresas pendientes de obtener autorización de instalación de un salón de juego.

El portavoz de Compromís en las Corts Valencianes, Joan Baldoví, señala que la aprobación de la enmienda supone un espaldarazo para los salones de juego. “Los barrios y pueblos valencianos verán cómo aparecen como setas nuevas locales de apuestas y juego”, lamenta Baldoví

Un “gravísimo error”, según el PSPV 

Elisa Valía, concejal socialista en el Ayuntamiento de València, denuncia que la alcaldesa popular, María José Catalá, “ha dejado a cero la partida presupuestaria destinada a atender los problemas derivados de las adicciones, mientras guarda silencio ante la pretensión de la Generalitat de levantar el veto a la instalación de las casas de juego sin ningún tipo de restricción, como las que están actualmente vigentes”.

Catalá ha eliminado la partida de 400.000 euros “y deja a las familias que necesitan ayudas abandonadas”, según critica el PSPV-PSOE. Valía también recuerda que, entre 2013 y 2019, las casas de apuestas aumentaron un 800% y que “la ludopatía es la segunda causa de adicción después de la cocaína”.

El 36% de los adictos actuales, según los estudios en la materia, comienzan a jugar cuando son menores de edad, por lo que la concejal socialista advierte de que retirar las restricciones a los salones de juego en las proximidades de los centros educativos es un “gravísimo error”. 

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