El Super-8 muestra orgulloso sus arrugas
El cine de La Casa Encendida prepara para este fin de semana una jornada fílmica sobre este soporte a través de un recorrido por varias películas de los años 60, 70 y 80. Las cintas se proyectarán en el Patio de la Casa a partir de las 22 horas y las sesiones tendrán una duración aproximada de algo menos de dos horas.
Se trata de una reivindicación de ese tipo de cine que cobra sentido ahora, en la era digital y en plena crisis del cine. El Súper-8 envejece rápido, es un soporte que pierde fácilmente el color, no es difícil que se raye, se rompa o se ensucie. No obstante desde el centro destacan que es precisamente eso lo que hace que estas proyecciones tengan un componente muy romántico y casi mágico que hacen que esos “24 fotogramas por segundo hagan parecer estas copias más auténticas que las digitales”.
Según cuenta Álex Mendíbil, comisario del evento, “el Super-8 capturó la esencia de un cine escapista y popular, pero también acogió películas increíblemente extrañas que jamás llegaron al video y quedaron atrapadas en sus bobinas”.
Este formato se hizo muy popular entre directores modestos en la década de los 70, pero cayó pronto en desgracia cuando surgió el vídeo al comenzar la década siguiente. Ahora se ha retomado con cierto interés por algunos artistas audiovisuales que buscan una estética concreta que sólo ofrece la película de 8 milímetros.
Películas para el sábado
Se proyectarán cuatro películas reducidas a unos 20 minutos cada una. El sistema de las reducciones era habitual en el formato súper-8. Se elegían las mejores escenas de las grandes películas para poder almacenarlas en una sola bobina en vez de tener que vender varias de ellas que habría resultado poco práctico y bastante costoso. Esta forma de proceder sería impensable para las distribuidoras de hoy en día más allá de un mercado reducido de coleccionistas. En algunos casos este resumen superaba en calidad al metraje original.
Como representación del cine de terror, se presenta El increíble hombre menguante de Jack Arnold, filmada y producida en 1957. Las películas del género terrorífico, sobre todo de la productora Universal, fueron las más populares en su día y hoy ocupan el primer puesta en las más buscadas por quienes se pertrechan de estas cintas.
Otro ejemplo de este género fantástico que podrá ser disfrutado entre las proyecciones data de 1973. Se trata de La saga de los Drácula dirigida por León Klimovsky. Es una producción española que representa una tendencia muy popular en la España setentera que dejó obras tan pop como sórdidas de creadores como Paul Naschy y Jess Franco . En el filme intervienen algunos míticos del género como Narciso Ibáñez Menta, padre de Chicho, que se encarga de dar vida al propio Drácula. También aparecen Tony Isbert, María Kosty y Helga Liné, el guión fue escrito por Emilio Martínez Lázaro. Sí, el director de 8 apellidos vascos.
Si hay alguna película que sea el icono de la ciencia ficción de finales de los años setenta esa es La guerra de las galaxias, de George Lucas. Se trata de un resumen de 20 minutos de la pieza original. Desde luego, la cinta que se proyectará se parecerá más a la idea original que cualquier retoque posterior.
También se incluye en esta selección fílmica Asesino invisible (originalmente llamada “The car”) de Elliot Silverstein. Una película de serie b en la que después Tarantino homenajearía en su Death Proof.
Las guindas del domingo
Para la apertura del segundo día entra en escena Olivia Newton-John y su banda de pop. En la película Toomorrow, el grupo musical atrae mediante sus acordes a unos alienígenas que se acercarán desde el espacio exterior. Una joya musical que precederá a una última película que La Casa Encendida ha tenido a bien no revelar. Será la sorpresa de la noche.
Las entradas se pueden adquirir de forma anticipada en la página de la Casa Encendida y el precio es de 3 euros.
