En la última semana, 25.000 sursudaneses han llegado a Uganda escapando de los combates
Uganda acoge ya a casi 700.000 personas que han huido del conflicto y la violencia en Sudán del Sur: los organismos humanitarios trabajan para evitar la aparición de epidemias
Gran parte de los recién llegados son acogidos en el complejo Bidibidi donde dependen de pozos y camiones cisterna para tener acceso al agua
Muchos entraron desde la República Democrática del Congo evitando así una ruta muy peligrosa a través de Sudán del Sur. Son pocos los que llegan a través de los pasos fronterizos oficiales como este en Oraba. Fotografía: Yann Libessart/MSF
Muchos entraron desde la República Democrática del Congo evitando así una ruta muy peligrosa a través de Sudán del Sur. Son pocos los que llegan a través de los pasos fronterizos oficiales como este en Oraba. Fotografía: Yann Libessart/MSF
La gran mayoría proceden del estado de Ecuatoria Central, ubicado entre la capital, Juba, y la frontera con la República Democrática del Congo. Una vez registrados, los refugiados son reunidos en un centro de tránsito durante un máximo de 24 horas antes de ser conducidos en camión o en autobús a los asentamientos. Fotografía: Yann Libessart/MSF
La gran mayoría proceden del estado de Ecuatoria Central, ubicado entre la capital, Juba, y la frontera con la República Democrática del Congo. Una vez registrados, los refugiados son reunidos en un centro de tránsito durante un máximo de 24 horas antes de ser conducidos en camión o en autobús a los asentamientos. Fotografía: Yann Libessart/MSF
Gran parte de los recién llegados son acogidos en el complejo Bidibidi, que tiene aproximadamente 32 kilómetros de longitud y 20 de anchura. La llegada de refugiados a causa de la inseguridad generalizada alrededor de la ciudad sursudanesa de Yei no ha cesado en los últimos meses. Fotografía: Yann Libessart/MSF
Gran parte de los recién llegados son acogidos en el complejo Bidibidi, que tiene aproximadamente 32 kilómetros de longitud y 20 de anchura. La llegada de refugiados a causa de la inseguridad generalizada alrededor de la ciudad sursudanesa de Yei no ha cesado en los últimos meses. Fotografía: Yann Libessart/MSF
Los niños son vacunados contra el sarampión y la polio. Todos los refugiados son tratados contra parásitos intestinales. La mayoría de ellos llegan agotados, pero en relativa buena salud. El reto para los organismos humanitarios es evitar la aparición de epidemias y asegurar el buen estado general de la población. Fotografía: Yann Libessart/MSF
Los niños son vacunados contra el sarampión y la polio. Todos los refugiados son tratados contra parásitos intestinales. La mayoría de ellos llegan agotados, pero en relativa buena salud. El reto para los organismos humanitarios es evitar la aparición de epidemias y asegurar el buen estado general de la población. Fotografía: Yann Libessart/MSF
Equipos de MSF también examinan los niveles de desnutrición entre los niños menores de 5 años y tratan de detectar cualquier deterioro de la seguridad alimentaria en el campo. Fotografía: Yann Libessart/MSF
Equipos de MSF también examinan los niveles de desnutrición entre los niños menores de 5 años y tratan de detectar cualquier deterioro de la seguridad alimentaria en el campo. Fotografía: Yann Libessart/MSF
Los refugiados han comenzado a construir cabañas tradicionales de barro para reemplazar los refugios temporales hechos con láminas de plástico. Muchos creen que tendrán que permanecer allí durante años. Finalmente, los asentamientos de refugiados y las aldeas han comenzado a proliferar en la que era una región relativamente deshabitada del norte de Uganda. Fotografía: Yann Libessart/MSF
Los refugiados han comenzado a construir cabañas tradicionales de barro para reemplazar los refugios temporales hechos con láminas de plástico. Muchos creen que tendrán que permanecer allí durante años. Finalmente, los asentamientos de refugiados y las aldeas han comenzado a proliferar en la que era una región relativamente deshabitada del norte de Uganda. Fotografía: Yann Libessart/MSF
Debido al crecimiento de la población, MSF ha iniciado la construcción de un centro médico en el complejo de refugiados BidiBidi que permitirá el ingreso de pacientes. Allí proporciona atención médica para combatir las patologías más comunes que son la malaria y las enfermedades diarreicas. Además atiende enfermedades crónicas y de salud mental. Fotografía: Yann Libessart/MSF
Debido al crecimiento de la población, MSF ha iniciado la construcción de un centro médico en el complejo de refugiados BidiBidi que permitirá el ingreso de pacientes. Allí proporciona atención médica para combatir las patologías más comunes que son la malaria y las enfermedades diarreicas. Además atiende enfermedades crónicas y de salud mental. Fotografía: Yann Libessart/MSF
En estos asentamientos, MSF y otras agencias humanitarias suministran agua potable a través de camiones hasta que, en un futuro, se puedan perforar pozos y equiparlos con bombas manuales adecuadas. Fotografía: Yann Libessart/MSF
En estos asentamientos, MSF y otras agencias humanitarias suministran agua potable a través de camiones hasta que, en un futuro, se puedan perforar pozos y equiparlos con bombas manuales adecuadas. Fotografía: Yann Libessart/MSF
Los refugiados reciben artículos de higiene y refugio. Por lo general, los refugiados tienen que abandonar Sudán del Sur a toda prisa y no pueden llevar ninguna de sus pertenencias consigo. Uganda está asignando grandes terrenos deshabitados en el norte del país destinados a los refugiados. Inmediatamente han comenzado a cortar árboles para construir cabañas. Fotografía: Yann Libessart/MSF
Los refugiados reciben artículos de higiene y refugio. Por lo general, los refugiados tienen que abandonar Sudán del Sur a toda prisa y no pueden llevar ninguna de sus pertenencias consigo. Uganda está asignando grandes terrenos deshabitados en el norte del país destinados a los refugiados. Inmediatamente han comenzado a cortar árboles para construir cabañas. Fotografía: Yann Libessart/MSF
Hasta que puedan cocinar por sí mismos, reciben comidas preparadas a base de avena y frijoles. Los refugiados llegan a su lugar de asentamiento temprano en la mañana y tienen menos de un día para instalarse. Son asistidos por las autoridades y organizaciones humanitarias internacionales. Fotografía: Yann Libessart/MSF
Hasta que puedan cocinar por sí mismos, reciben comidas preparadas a base de avena y frijoles. Los refugiados llegan a su lugar de asentamiento temprano en la mañana y tienen menos de un día para instalarse. Son asistidos por las autoridades y organizaciones humanitarias internacionales. Fotografía: Yann Libessart/MSF
La mayoría de los refugiados son mujeres y niños, los hombres suelen quedarse para combatir y defender sus propiedades. Debido al abrumador número de recién llegados, las autoridades deben ampliar constantemente el espacio. Fotografía: Yann Libessart/MSF
La mayoría de los refugiados son mujeres y niños, los hombres suelen quedarse para combatir y defender sus propiedades. Debido al abrumador número de recién llegados, las autoridades deben ampliar constantemente el espacio. Fotografía: Yann Libessart/MSF
Con el tiempo, la economía se ha desarrollado en el campo de refugiados a través del comercio con la población local. Los pequeños negocios han comenzado a aparecer en Bidibidi. Fotografía: Yann Libessart/MSF