Inditex volvió a batir en 2024 sus récords de ventas y beneficio y eso se vio reflejado en el dividendo que recibe su primer accionista, Amancio Ortega. La dueña de Zara ganó 5.866 millones de euros, un 9% más que al cierre del año anterior y eso se vio reflejado en un avance, en el mismo porcentaje, en su retribución al accionista, que llega a los 1,68 euros por acción. Eso se traduce en que Amancio Ortega va a percibir 3.104 millones de euros, porque controla cerca del 60% del capital de la empresa gallega.
En cuanto a los resultados en sí, su facturación avanzó un 7,5% respecto a la de 2023 y se situó en 38.632 millones de euros. Es una cifra récord, pero también es el menor avance desde que acabó la pandemia. De hecho, los inversores han dado la espalda a la compañía, que este miércoles se ha apuntado una caída del 7,5%.
Detrás de esta caída, esa señal de ralentización. De hecho, Inditex reconoce en su presentación al mercado que, entre el 1 de febrero y el 10 de marzo de 2025, sus ventas han crecido un 4%, aunque también destaca que, solo en la última semana comercial, esa facturación en tienda y online a tipo de cambio constante avanzó un 7%. “Es un periodo muy breve, con un muy exigente comparable en los dos ejercicios anteriores y se ha producido una aceleración en la última semana”, ha apuntado su consejero delegado, Óscar García Maceiras. “La evolución es positiva, es una aceleración del crecimiento que creemos que va a continuar y se verá en la evolución del ejercicio”.
En 2024 crecieron más sus ventas online que las que consigue en sus tiendas físicas. Las primeras avanzaron un 12% y alcanzaron los 10.163 millones de euros. En cambio, las ventas en sus establecimientos –que es el principal eje del negocio– crecieron un 5,9%, lo que equivale a dos puntos menos que en el conjunto de 2023. También tiene casi 130 tiendas menos que un año antes, porque está cerrando tiendas pequeñas para abrir otras más grandes. En total, suma 5.563 puntos de venta.
Un “entorno difícil de predecir”
Óscar García Maceiras ha destacado en una presentación a inversores que los datos señalan una evolución “sólida” del grupo de Arteixo. No ha entrado al detalle sobre cómo le puede impactar una guerra comercial y arancelaria. “El entorno es difícil de predecir”, ha asumido. “Lo estamos monitorizando”. También ha apuntado que el grupo está preparado por la “diversificación” de la compañía en cuanto a cadenas y mercados y porque su “modelo” de abastecimiento es “flexible”, con “compras en proximidad que nos permiten adaptarnos”.
Por regiones, España se refuerza como su principal mercado, porque aportó un 15,1% de los ingresos, cuando un año antes era 14,8%. “España es un ejemplo de cómo en un mercado maduro hay oportunidades”, ha asegurado Maceiras. Aquí sus ventas alcanzaron los 5.833 millones de euros, tras crecer un 9,6% en un año y ve posibilidades de crecimiento en todas las cadenas. Además, destaca que, desde 2019, las ventas en España han crecido un 31% con ese mismo porcentaje menos de tiendas.
El resto de Europa aportó el 50,6% de la facturación, frente al 48,7% de 2023. En cambio, cayó la aportación en porcentaje de América y Asia. El primer mercado, en conjunto, pasó del 19,6% al 18,6%; y el segundo, del 16,9% al 15,7% del total de los ingresos. De hecho, en la presentación a inversores se ha preguntado a los directivos por la evolución en América y han destacado que esta región se ha visto impactada por Brasil y México, donde han sufrido el impacto de los tipos de cambio. La empresa también ha destacado los planes de crecimiento en Estados Unidos, por ejemplo, en Los Ángeles.
Por formatos, Zara (Zara y Zara Home) continúa siendo el motor del grupo, ya que aportó 27.778 millones de euros en ventas, un 6,6% más; seguida de Bershka, con 2.930 millones de euros (+11,8%); Stradivarius, con 2.664 millones de euros (+14,1%); Pull & Bear, con 2.469 millones de euros (+4,6%); Massimo Dutti, con 1.960 millones de euros (+6,6%) y Oysho, con 831 millones de euros (+11,8%).
Inditex también ha comunicado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) que su presidenta no ejecutiva de Inditex, Marta Ortega, percibió una remuneración de un millón de euros en su tercer año al frente de la compañía. Mientras, Óscar García Maceiras, cobró 11,21 millones de euros, según consta en el informe anual de gobierno corporativo. En total, el consejo de administración de Inditex percibió en 2024 una retribución de 14,24 millones de euros, frente a los 13,46 millones 2023. La retribución media de los empleados se situó en 38.000 euros, un 5,56% más.
Los vaivenes en la política arancelaria de Trump llevan a Inditex a no descartar tener que producir en Estados Unidos, aunque su foco, asegura, sigue en los mercados que llama de proximidad, en referencia a España, Portugal, Marruecos y Turquía. “Nosotros tomamos las decisiones de fabricación en función de la capacidad de la industria manufacturera y de si esta cumple con nuestros estándares de calidad”, ha indicado el consejero delegado de Inditex en rueda de prensa ante varias preguntas sobre si abren o no la puerta a fabricar en Estados Unidos. “No hay ningún mercado que digamos radicalmente que no si hubiera capacidad para ello”, ha añadido Óscar García Maceiras.
Ha repetido que los cuatro citados mercados de “proximidad”, concentrarán el grueso de la producción, que está distribuída en 50 países, lo que da “gran flexibilidad” a la multinacional gallega y capacidad para adaptarse “a las circunstancias”. “Vivimos en un entorno incierto, monitorizamos cada noticia y a lo largo de un solo día hay noticias contradictorias”, ha añadido García Maceiras sobre el impacto que pueden tener los aranceles que ponga en marcha la Administración republicana. “Estamos en condiciones de poder adaptarnos a cualquier circunstancia que se produzca en el mundo arancelario”, ha repetido.
Sobre si estos afectarán o no a los precios, tan solo ha asegurado que la política de precios de la dueña de Oysho, Massimo Dutti y Bershka no va a cambiar. “Nuestra política de precios es estable, sin perjuicio de ajustes concretos ante tensiones inflacionarias y mercados concretos, que se hacen familia de producto a familia y prenda a prenda”, ha argumentado García Maceiras.