Aprendizaje digital para todos: Construir un mundo más justo e inclusivo gracias al voluntariado tecnológico
En un mundo cada vez más tecnológico, es importante no dejar a nadie atrás, ya sean personas mayores, habitantes de zonas rurales, migrantes, con discapacidad, pymes o autónomos. También los jóvenes, la comunidad educativa y las familias necesitan apoyo para desenvolverse con confianza y seguridad en un entorno digital en constante cambio.
El aprendizaje digital es fundamental a la hora de conseguir una sociedad más justa, innovadora y participativa. La tecnología es un elemento clave para mejorar la vida de las personas y también de las comunidades en las que viven, generando un impacto positivo en el desarrollo personal y profesional, pero también en la inclusión social.
El uso de la tecnología mejora la calidad de vida, impulsa la innovación, crea cultura y fortalece comunidades. Tener competencias digitales permite crecer a nivel profesional y personal, pero para ello se necesita un aprendizaje constante, contínuo e integral, que permita incorporar de forma eficaz los conocimientos y aprovechar las oportunidades de las herramientas digitales.
Para lograrlo, Fundación Cibervoluntarios, pionera a nivel mundial en voluntariado tecnológico, lleva desde 2001 trabajando para ayudar a las personas a que adquieran las competencias digitales necesarias para su día a día de forma gratuita, cercana y práctica.
Gracias al apoyo de una red de más de 4.500 personas cibervoluntarias y 5.000 entidades colaboradoras entre ayuntamientos, centros educativos y ONGs, realiza una media de 500 actividades gratuitas semanales de formación y sensibilización, el 80 % de ellas de forma presencial. Este modelo de trabajo, cercano, práctico y sencillo, les permite estar al lado de las personas y responder a sus necesidades reales.
La gran red de voluntariado tecnológico
El 19 de marzo se celebra el Día Internacional del Aprendizaje Digital, en el que cobra especial relevancia la red de voluntariado tecnológico de Fundación Cibervoluntarios. El objetivo es conseguir que todas las personas puedan acceder por igual al conocimiento y uso de la tecnología, para mejorar sus oportunidades de educación, empleo, expresión y participación social.
En esta red, cada persona cibervoluntaria es un agente de cambio que comparte su tiempo y conocimientos para acercar la tecnología a cualquier persona, y en especial a las más vulnerables. Acompañan de tú a tú, resuelven dudas y dan respuesta a las necesidades de cada persona; porque las herramientas digitales que cada persona necesita pueden ser distintas. Esta ayuda desinteresada es un impulso motivador para que cada individuo alcance su máximo potencial y se apropie de la tecnología, haciendo fácil y accesible lo que en principio puede parecer complejo, transformando vidas a nivel económico, social y cultural.
Aprendizaje digital para todas las edades
Aprender y desarrollarse en el entorno digital elimina barreras, mejora la educación, impulsa el empleo y el emprendimiento, conecta territorios, combate la desigualdad social y de género, crea oportunidades y facilita la inclusión de los grupos más vulnerables.
En el marco laboral actual, la promoción de nuevas ideas y soluciones tecnológicas es además un motor en la generación de empleo y la apertura a nuevas oportunidades en el mercado digital. Sin embargo, en este contexto de rápidos cambios, as personas mayores sufren una brecha singular respecto a las nuevas generaciones que han crecido en espacios tecnológicos, por eso la Fundación realiza numerosos talleres dirigidos a este grupo de edad.
Pero también cabe remarcar la importancia del aprendizaje digital con relación al uso de pantallas, internet y las diferentes herramientas digitales, desde edades tempranas, antes incluso de contar con un dispositivo. Para ello, Fundación Cibervoluntarios desarrolla programas educativos en competencias digitales y en el uso consciente, seguro y positivo de la tecnología. El objetivo de estas actividades, siempre gratuitas, es fomentar la creatividad, la comunicación, y el talento digital, además de impulsar las vocaciones tecnológicas y el talento STEAM, especialmente entre las niñas.
Y es la generación más joven vive en una sociedad en la que no existe un espacio físico separado del digital. Su realidad digital tiene sus propios códigos y cultura, y en este nuevo entorno se hace necesario un acompañamiento que les oriente hacia un uso equilibrado, positivo y responsable. Con este objetivo, Fundación Cibervoluntarios desarrolla programas como Campamento Digital, actividades presenciales gratuitas en competencias digitales de 9 a 17 años con certificado DigComp, que acredita estos conocimientos en la Unión Europea.
En esta formación, dentro del Programa de Competencias Digitales para la Infancia (CODI), puesto en marcha por el Ministerio de Juventud e Infancia, financiado por la Unión Europea-Next Generation, los contenidos son impartidos por educadores especializados y están adaptados a cada edad:
En la exposición al mundo digital, diferenciar y crear una capacidad crítica es básico para niños y niñas. Por ello, entre los 9 y los 11 años aprenden a buscar información en Internet y a diferenciar una noticia real de una falsa, a crear presentaciones o videos, ser conscientes de su huella digital y controlar su privacidad en la web.
De los 12 a los 13 años, aprenden a gestionar el tiempo de exposición a pantallas de forma equilibrada. Conocen cómo crear contraseñas seguras, proteger su privacidad, cazar fake news y saber frenarlas, y conocen las reglas para que la convivencia en Internet sea más positiva y respetuosa.
De los 14 a los 17 años, el trabajo va destinado al análisis de su tiempo online, su imagen en Internet y su privacidad, saber cómo protegerse y detectar posibles fraudes. También conocen cómo potenciar su perfil profesional y su marca en internet y se familiarizan con las plataformas de empleo.
Un año para la Educación Digital
Un tercio de la población no puede integrar la tecnología en su vida cotidiana, lo que limita su capacidad de acceder a oportunidades de empleo, educación, emprendimiento social, participación o igualdad. Según el último Informe de Competencias Digitales del Observatorio Nacional de Tecnología y Sociedad, el 30% de la población española todavía no tiene competencias digitales básicas, un 43% en zonas rurales. Esta preocupación traspasa fronteras, y es por ello que 2025 es el Año Europeo de la Educación para la Ciudadanía, con el lema Aprender, conectar, comprometerse, prosperar juntos.
Fundación Cibervoluntarios se une a esta iniciativa y hace un llamamiento a administraciones públicas, entidades, centros educativos, ONGs y ciudadanía en general a unirse al compromiso por un aprendizaje digital amplio, continuo, crítico e inclusivo, e impulsar la formación universal y gratuita en competencias digitales para construir una sociedad más justa y equitativa.
