La pandemia se dispara un 89% en dos semanas en Euskadi y la positividad media supera el umbral crítico del 8%

Euskadi cierra la semana 48 de la pandemia con 6.862 casos positivos de COVID-19 notificados, incluidos los 880 de las últimas 24 horas, el mejor registro en cinco días pero con muchas menos pruebas realizadas, como es habitual en fin de semana. Esto representa un incremento del 33% en relación con los 5.154 contagiados durante la pasada semana y del 89% respecto a los 3.624 de la anterior. Si se repite el patrón de la ola de noviembre, quedaría aún una semana más de subida de los contagios. El máximo semanal hasta ahora es de 9.215. Antes de Navidad se llegó a un mínimo de 2.410.

Tan o más relevante que la subida de contagios es la evolución de la positividad, que mide las pruebas que confirman la infección por Sars-Cov-2 en relación al total de PCR o test de antígenos practicados. Esta semana ese porcentaje se ubica en el 8,21%, dos escalones por encima del 6% registrado en las tres semanas anteriores. La Organización Mundial de la Salud (OMS) fija en el 5% el umbral por encima del cual hay transmisión comunitaria alarmante y las autoridades sanitarias europeas rebajan incluso esa barrera al entorno del 3-4%. Justamente antes de Navidad se marcó un 3,85%, el mejor dato desde verano.

La actualización de estadísticas de la pandemia en Euskadi de este domingo arroja 880 casos nuevos que se reparten en 528 vizcaínos, 249 guipuzcoanos y 98 alaveses. Hay cinco personas de fuera o sin residencia conocida diagnosticadas también en la red sanitaria vasca. Con todo, el peor dato es el claro repunte de la ocupación en la UCI. Son ya 120 las personas en estado crítico. Ello supone que se ha superado ya con claridad el porcentaje del 35% de casos de COVID-19 en relación a los puestos de críticos totales, que eran 312 este miércoles. En concreto, el 38% de las camas de UCI son para casos graves de coronavirus. En las últimas 24 horas, eso sí, se redujo a 64 el número de ingresos después del pico de más de 100 conocido este sábado, el peor dato de toda la segunda ola de la pandemia.