“Arturo, Buenas tardes. Tal como hemos hablado remito el currículo de Alexandru (...). Espero tus noticias. Un saludo. Julia Veres”. El 10 de marzo de 2011, Julia Veres, entonces secretaria de Inmigración del PP de La Rioja, envió ese mensaje por mail a Arturo Steven, jefe de gabinete del popular Pedro Sanz –que recientemente ha sido elegido miembro del Consejo de Estado– durante los 20 años en los que el también exsenador presidió la comunidad riojana, entre 1995 y 2015. El citado correo iba acompañado del currículum de un familiar de la dirigente del PP.
Apenas mes y medio después, el 28 de abril de 2011, Steven utilizó su mail oficial (arturo.steven@larioja.org) para remitir el currículum de Alexandru a Pedro Domínguez, consejero delegado del Grupo Empresarial Palacios Alimentación, una de las compañías alimentarias más importantes de La Rioja. “Estimado amigo Pedro. Adjunto te remito el currículum de Alexandru Veres, como te comenté. Un saludo. Arturo Steven”, le escribió, acompañando el texto con el logotipo oficial del Gobierno de La Rioja. Al día siguiente, Domínguez le contestó: “Buenas tardes, Arturo. El trabajador Alexandru Verus (sic) comienza a trabajar con contrato de un mes de ett el próximo 02/05/2011 en la sección de sala blanca de pizzas. Un saludo. Pedro”.
Este intercambio de correos, al que ha tenido acceso elDiario.es, es solo un ejemplo de cómo durante al menos seis años, entre 2009 y 2015 –periodo en el que se fecha la documentación recopilada–, el Gobierno de La Rioja, bajo la presidencia de Sanz, actuó como una agencia de colocación de personas vinculadas al PP o sus familiares. El equipo de Sanz utilizó medios públicos, como las cuentas de correo oficiales, y su influencia sobre las principales empresas de la región.
Este diario ha accedido a decenas de mails que evidencian un mismo modus operandi: cargos del partido, militantes o simpatizantes hacían llegar peticiones de trabajo para ellos mismos o sus familiares al gabinete de la Presidencia de Sanz que, casi siempre a través de Steven, el jefe del departamento, remitía los currículums a compañías privadas a través de su cuenta de correo oficial, la del Gobierno, solicitándoles que se les diera trabajo.
Otro correo que ejemplifica cómo funcionaba el Gabinete de la Presidencia de La Rioja en la etapa de Pedro Sanz es el que envió Jorge Abeledo a Steven el 28 de abril de 2014. “Hola buenas tardes Arturo, soy Jorge Abeledo (...), el hijo de Luis (Laguna de Cameros)”, apunta. “Es en relación a una oferta de empleo con dos vacantes, exactamente de programador web, en la empresa Knet (...). No sé si tendrá contacto con esta empresa, pero le agradecería enormemente que apoyase mi candidatura, con el objetivo de reforzarla y poder optar, más firmemente, a este puesto de trabajo. Le doy las gracias anticipadas Arturo (...)”, concluye.
“Este es el procedimiento”
La respuesta de Steven llegó un día después, el 29 de abril de 2014: “Buenos días, Jorge, de acuerdo, lo voy a intentar. Este es el procedimiento. Un saludo”, zanjó el jefe de gabinete de Sanz. El correo lo envió desde su cuenta oficial y, con sus palabras –“este es el procedimiento”–, dio por bueno el sistema para pedir trabajo utilizado por Abeledo: escribir directamente al jefe de gabinete del presidente de La Rioja para que intercediera a su favor en un proceso de selección de una empresa privada.
Entre los documentos a los que ha tenido acceso elDiario.es se encuentran multitud de currículums enviados por distintas personas al propio Sanz, a Steven y a su secretaria. En todos ellos se pueden leer anotaciones manuscritas que identifican a los protagonistas de esos currículums remitidos a los máximos responsables de La Rioja entre 1995 y 2015. En uno se puede leer: “Estuvo con el presidente por el tema del consultorio de Bergasa”. “Su marido es Leopoldo Martínez Rubio (...) llamó por teléfono al presidente y le recibió Arturo”, se ve escrito en el currículum de otra de las solicitantes de empleo, que llegó a escribir al jefe de gabinete de Sanz hasta en tres ocasiones.
En un tercer currículum, se lee lo siguiente: “Estuvo con el presidente y Arturo. Trabajaba en Travelcar de Duquesa de la Victoria”. A continuación, se indica que el documento se ha enviado a otra empresa de la región. A otro demandante de empleo se le identifica como “cura de la sierra”, se especifica que “estuvo con Arturo reunido” y, a renglón seguido, se explica que se le ha puesto en contacto con otra compañía. “Y también le aconsejamos que prepare unas oposiciones”, se añade, en las notas.
En los documentos consultados, decenas de currículums se acompañan de justificantes de envío a compañías privadas desde las cuentas oficiales de Steven o de Patricia Gil, su secretaria.
Entre los remitentes se identifica a, entre otros, un joven que, según las anotaciones, es “hijo de Espe, concejal de Alberite”. De otra de las solicitantes de empleo se señala que es “hija de Luis Cárdenas, exalcalde de Tudelilla”, del PP. Y se menciona, asimismo, a la “hija de Honorio de Ausejo”, en alusión al entonces alcalde de esa localidad riojana, Honorio Pinilla, también del PP, como una tercera demandante de trabajo. Todos ellos utilizaron distintas fórmulas para pedir explícitamente al que en ese momento era el presidente de La Rioja y a su equipo que les encontraran un empleo.
En las cartas que se adjuntan a los currículums remitidos desde la Presidencia de La Rioja a compañías privadas como la citada Palacios hay personas que se identifican como “votantes del PP”, militantes o simpatizantes del partido. Y, según ha podido saber este diario, muchos otros eran familiares de amigos personales de Sanz y de Steven o estaban vinculados a empresarios de la región.
elDiario.es mantuvo el pasado miércoles una breve conversación telefónica con Arturo Steven. El que fue la 'mano derecha' de Sanz se limitó a mostrarse “sorprendido” por el contenido de los correos reproducidos en esta información y dijo no conocer, por ejemplo, a Pedro Domínguez, el consejero delegado de Palacios –una de las principales empresas de la región– con el que se intercambió los mails en los que le llama “estimado amigo”.
Este diario también llamó a Pedro Sanz, al que dejó un mensaje en su contestador automático y escribió un mensaje de Whatsapp para tratar de obtener una valoración o una explicación de las mencionadas prácticas de búsqueda de empleo de su Gobierno. Por el momento, no ha habido ninguna respuesta por parte del expresidente riojano.
elDiario.es también se puso en contacto con el Grupo Palacios para tratar de obtener alguna explicación acerca de los correos entre Arturo Steven y Pedro Domínguez, consejero delegado del grupo alimentario, sobre las peticiones de empleo y sus respectivas respuestas. Desde el departamento de prensa se remitió al de marketing que, vía mail, optó por no hacer ningún tipo de comentario al respecto tras intentar que se le remitiera este reportaje antes de ser publicado.
Sanz: “El fin último de la política es buscar la felicidad”
Tras su salida de la Presidencia de La Rioja, donde permaneció 20 años, Sanz siguió como diputado en el parlamento riojano hasta 2019. Además, en 2015, nada más dejar el poder, fue elegido senador por designación autonómica y ejerció de vicepresidente primero del Senado entre 2016 y 2019. Precisamente hace unos días, el 30 de marzo, Sanz tomó posesión como consejero electivo del Consejo de Estado tras el pacto alcanzado por PSOE y PP para los nuevos nombramientos en el citado órgano consultivo. En su toma de posesión, Sanz consideró que “el fin último de la política debe ser atender y buscar el bienestar y la felicidad de las personas” y, según informó la agencia Europa Press, el expresidente riojano abogó por que el ejercicio de los políticos “sea vocacional” porque “solo si es así” se comprende “que la pasión y la convicción resultan los pilares en los que debe residir toda su fuerza”.
Steven, por su parte, mantuvo una trayectoria completamente distinta tras su salida del Gobierno de La Rioja. Después de que, en 2017, el rey Felipe VI le impusiera la Real Orden de Isabel la Católica por sus buenas relaciones con la Casa Real, el exjefe de gabinete de Sanz dio el salto a Vox, donde llegó a ser secretario provincial de La Rioja. En febrero de 2020, sin embargo, abandonó el partido por discrepancias con la gestora que se estaba encargando en ese momento de dirigir la formación de extrema derecha en la región.
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