Procesos judiciales, huelgas, encierros, concentraciones y manifestaciones han precedido durante casi un año y medio la lucha de los conductores del parque móvil de la Junta de Castilla-La Mancha contra el Plan de Recursos Humanos aprobado por el Gobierno anterior. Son acciones que “han dado su fruto” y por ello, han querido mostrar su satisfacción por el anuncio del actual Ejecutivo de suspender definitivamente esta medida.
El sindicato CCOO valora en positivo la decisión de la Consejería de Hacienda y Administraciones Públicas de iniciar el procedimiento para allanar el conflicto laboral con estos conductores, y para que quede en suspenso este “plan B” de recursos humanos impulsado por el Gobierno de María Dolores de Cospedal.
“Tras la larga lucha sindical y judicial contra las imposiciones del anterior Gobierno”, desde este sindicato recuerdan que estas cuestiones solo dependen de la voluntad del Gobierno y que no suponen ningún incremento salarial, “sino la recuperación del puesto de trabajo y de los derechos laborales”.
La lucha de este colectivo comenzó en febrero de 2014, tras el anuncio del Gobierno regional de implantar el llamado Plan de Recursos Humanos, de ‘destrozos humanos’ lo denominaron algunos trabajadores, en el que se pretendía suprimir la mitad de las plazas de los trabajadores y, finalmente, privatizar los servicios que el colectivo presta a la Junta.
Los distintos sindicatos involucrados en el conflicto impusieron un recurso en contra del Plan de Recursos Humanos, que fue paralizado temporalmente por la Justicia, pero que sigue todavía a la espera de una sentencia definitiva por parte del Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha. Ese dictamen ahora no sería necesario en caso de ser suspendida la planificación.