Los regantes de Castilla-La Mancha muestran su “oposición total” al trasvase de agua del Tajo a una empresa

La Federación de Comunidades de Regantes de Castilla la Mancha (Fercam) ha mostrado su “rechazo y oposición total” a la “mercadería” de agua de la que acusan a la Comunidad de Regantes del Canal de las Aves “para vender parte de su concesión de agua de riego a una empresa del Levante”. Esta concesión se realizaría a través del Acueducto Tajo-Segura, y todavía debe ser aprobada por la Dirección General de Agua del Gobierno de España. No son los únicos que han mostrado su rechazo a la intención de la Comunidad de Regantes: plataformas ciudadanas de Talavera, Aranjuez e incluso la Junta de Castilla-La Mancha.
La Federación ha resaltado que esta Comunidad se divide entre los municipios de Aranjuez, Añover de Tajo y Villaseca de la Sagra, y que dispone de más de 42 hectómetros cúbicos anuales en su concesión de aguas. Esto, resalta, supone que disponen de una cifra de 11.445 m3 de agua por hectárea para riego al año, “una cifra hasta 23 veces mayor que las dotaciones de las que se disponen en otras zonas de la región”.
De este modo, lo comparan con los 500 metros cúbicos de los que dispone la Junta de Explotación de las Masas de Agua Subterránea de Campo de Montiel, o los “escasos” 700 a 1.000 metros cúbicos de los regantes de la cuenca alta del Guadiana en las provincias de Albacete, Cuenca, Ciudad Real y Toledo y del Segura en la provincia de Albacete. “Estos agravios, ponen de manifiesto los grandes desequilibrios hídricos que existen dentro de la región de Castilla-La Mancha”, aseveran.
Por eso, además de mostrar su rechazo ante esta posible venta, piden que se replantee “por completo” la planificación hidrológica de Castilla-La Mancha. “Debemos trabajar para que los recursos excedentarios de otras cuencas, como la del Tajo, sean redistribuidos a otras zonas deficitarias de la región como son las cuencas del Guadiana, Júcar y Segura dentro de Castilla-La Mancha”, piden.
“Los hechos que demuestran los excedentes de agua de riego en el Tajo, no son otros que la venta de ese agua manchega a los regantes del Levante, para negocio exclusivo de unos cuantos, lucrándose de un bien de dominio público”, recalcan. Desde la Federación de Regantes llegan a señalar que “este tipo de actuaciones de venta de los excedentes de agua del Tajo para el Levante, presuntamente vienen impulsadas y fomentadas desde del propio Ministerio de Transición Ecológica”.
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