Tregua en el conflicto lingüístico. La Acadèmia Valenciana de la Llengua (AVL) y la Real Acadèmia de Cultura Valenciana (RACV) han firmado este viernes una declaración conjunta para cooperar con el objetivo de “superar los conflictos que han descosido la sociedad valenciana y no han beneficiado en nada el uso social del valenciano”, según recoge el texto. Un hecho clave cuando las dos instituciones mantienen posiciones distintas sobre la lengua: la AVL respalda la unidad entre valenciano y catalán, posición avalada científicamente; mientras que la RACV defiende que el valenciano ese un idioma diferenciado, contradiciendo lo determinado por la filología.
Aprobada tres días antes de lo previsto, en el documento apuestan por “propiciar, a través de grupos de trabajo conjuntos, las iniciativas y los mecanismos que posibiliten la cooperación efectiva entre las dos academias en los aspectos que se acuerden”. Eso sí, remarcan que las acciones conjuntas que impulsen se realizarán siempre “des del respeto al ordenamiento jurídico valenciano y a los ámbitos competenciales propios de cada institución”.
La declaración ha sido aprobada por una docena de académicos, mientras tres se han abstenido y uno no ha acudido al plenario celebrado este viernes. Tras esta decisión, será la Junta General de la RACV, institución presidida por Federico Martínez Roda, la que deberá ratificar el documento.
“La lengua valenciana constituye un centro de interés común de la AVL y la RACV con independencia de las características y las finalidades propias de cada una de ellas”, ha expresado Ramón Ferrer, presidente de la AVL. “Este pacto se hace con el espíritu de convertir nuestra lengua en un instrumento de cohesión social del pueblo valenciano”, ha rematado.