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Las instituciones anuncian ahora un “contraste” con la ciudadanía del nuevo Guggenheim en Urdaibai

Ibone Bengoetxea, en el Parlamento Vasco

Iker Rioja Andueza

Vitoria —

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El noviembre de 2022, el diputado vizcaíno Imanol Pradales “blindó” 40 millones de euros para las obras del nuevo proyecto Guggenheim en la comarca de Urdaibai, en Gernika y en Murueta. El PNV también arrancó al Estado otros 40 millones para el mismo objetivo. Ahora, en 2024, Pradales es lehendakari. El Gobierno vasco de Iñigo Urkullu nunca llegó a defender el plan ni a dotarle de presupuesto, pero el nuevo Ejecutivo sí lo tiene en su agenda. La novedad, verbalizada este viernes en la sesión de control del Parlamento Vasco por la vicelehendakari y consejera de Cultura, Ibone Bengoetxea, es que se entiende que ha llegado la hora de “contrastar” el alcance del plan con la ciudadanía de la zona, que es la única reserva de la biosfera de Euskadi y donde se han producido movilizaciones en los últimos años con lemas como “menos Pradales y más humedales”. Se espera una gran manifestación para el sábado 19 de octubre.

Bengoetxea, en una idea que ya había expresado con anterioridad, insiste en que quizás ha habido un problema de comunicación y admite que no se ha explicado debidamente de qué iba el plan para instalar un segundo Guggenheim en Bizkaia. Ha indicado en la Cámara que “no se está hablando de replicar el Guggenheim de Bilbao” sin más y que el museo es un elemento “tractor” para revitalizar la comarca pero dentro de un “plan integral” con medidas también sobre el abastecimientos de aguas -un gran problema para la zona, particularmente en el estiaje- o para la dinamización de la economía. Y, sobre todo, ha insistido en que no es una iniciativa dañina para el medio ambiente ya que, muy al contrario, permite recuperar los acuíferos y los suelos contaminados.

Ha señalado también que es el momento de “abrir una fase de escucha, diálogo y contraste”, de “dar el 'pause' a la confrontación”. “Hay que huir del dogmatismo. Esto va más allá del museo”, ha indicado en una comparecencia en la que ha intercalado el euskera y el castellano. “No lo hemos contrastado con los ciudadanos y es el momento. Creo que el proyecto merece ser escuchado”, ha incidido. En las “próximas semanas” se darán más detalles de esta iniciativa, que tendrá respaldo “interinstitucional”, es decir, que sumará a la Diputación y a los municipios del entorno. “Queremos hacer el mejor proyecto para Urdaibai”, ha zanjado.

EH Bildu había interpelado a Bengoetxea por la situación del nuevo Guggenheim, calificado como un “megaproyecto”. Oihana Etxebarrieta ha hecho un recorrido histórico desde que el PNV, allá por 2008, empezó a sugerir la necesidad de otra franquicia en Urdaibai, entonces en las colonias de Sukarrieta. Sobre el último plan, ha recordado que Urkullu, a comienzos de 2024, pidió “dos años” para estudiar la viabilidad de un plan que ya tenía 80 millones de financiación y la insistencia política del partido de que se iba a hacer “sí o sí”. También que PNV y PSE-EE registraron en el Parlamento una propuesta para activar un grupo de trabajo para la revitalización de Busturialdea sin siquiera mencionar el museo. Ha argumentado la parlamentaria abertzale que hay riesgos de “turistificación” y daños ambientales y ha dicho igualmente que es “la historia de una imposición” o, al menos, de “gobernanza vertical”. Entretanto, la comarca sigue “estancada” en lo económico.

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