Solo 127 camioneros de la Unión Europea han solicitado las visados temporales para trabajar en Reino Unido tras el llamamiento del Gobierno, según ha dicho este martes el primer ministro británico. Boris Johnson ha anunciado el dato después de que el periódico The Times publicase que solo habían solicitado el permiso de empleo 27 trabajadores comunitarios.
El objetivo del Gobierno británico era conseguir 300 conductores de camiones cisterna para paliar el desabastecimiento en las gasolineras. En una entrevista con la BBC, Johnson ha dicho que esto era una “fascinante ilustración del problema” de la escasez de transportistas. Ha añadido que es un asunto “global” pero que en Reino Unido es un “problema particular”. Johnson ha descartado que el problema este relacionado con el Brexit, sino que se trata de un “problema de la cadena de suministro vinculado a la recuperación”.
Según informa The Times, la falta de solicitudes ha molestado al Gobierno, que aceptó hace dos semanas una petición de las compañías petroleras para acelerar los trámites de los visados temporales. Este domingo, el Ejecutivo anunció que el plan urgente para emitir 300 permisos a conductores de camiones cisterna se ampliaba hasta el 31 marzo de 2022. Los otros 4.700 visados temporales para transportistas de alimentos, previstos hasta Navidad, también se extenderán hasta finales de febrero.
Mientras, este lunes, unos 200 militares del Ejército británico han empezado a transportar combustible a las gasolineras de Reino Unido, para paliar la falta de transportistas.
“Gran giro” para la economía
El Gobierno de Johnson ha dicho que los visados temporales no son una solución a largo plazo y ha instado a las empresas a invertir en mano de obra británica.
“Lo que no podemos hacer es volver al viejo y fracasado modelo donde la principal línea de empleo es mano de obra poco cualificada con sueldos bajos, a menudo gente que trabaja muy duro, maravillosa y valiente, que vienen y trabajan en condiciones que son muy duras, y no deberíamos volver a eso”, ha declarado Johnson.
Según el primer ministro, esto llevó a una situación en que los diferentes sectores económicos ya no invertían en servicios ni en formación y gente como los transportistas “tenían que orinar en arbustos por falta de dependencias” apropiadas. Johnson ha afirmado que trabajar en el sector del transporte por carretera “debería ser un gran trabajo”, pero ha añadido que no se había invertido lo suficiente en instalaciones y condiciones salariales.
“Ha llegado el momento de invertir en las personas y en las competencias. Es un gran giro para la economía británica”, ha dicho el primer ministro.