La incorporación del exdiputado de Ciudadanos y UPyD Toni Cantó a las listas del Partido Popular de Madrid para las elecciones anticipadas del próximo 4 de mayo será una incógnita hasta que la Junta electoral determine si Cantó puede ser candidato. El valenciano, que sigue figurando en el censo de su ciudad natal, se empadronó en Madrid hace apenas “unos días”, según él mismo declaró este jueves en varias entrevistas televisivas. Sus palabras siembran la duda de si podrá ser candidato atendiendo a las diferentes leyes electorales, que establecen que debe estar empadronado antes de la convocatoria electoral, algo que no habría sucedido. En el PP, esperan solventar el problema acogiéndose a un artículo de la ley electoral regional y defienden que “puede presentarse perfectamente”. Desde la Puerta del Sol, sede del Gobierno regional, la presidenta madrileña Isabel Díaz Ayuso todavía se resiste a confirmarlo como parte de la lista que encabezará para el 4M.
El aterrizaje de Cantó en el PP ha abierto una grieta entre Díaz Ayuso y la dirección del partido que lidera Pablo Casado. Ha sido un fichaje “desde arriba”, aseguran fuentes de la formación conservadora, sin que la candidata a la Presidencia hubiera dado su aprobación final. Y mientras el entorno de la presidenta desmentía su incorporación a la lista, la puntilla llegó desde Génova a última hora del miércoles para confirmar la inclusión de Cantó en la lista de Madrid. En Sol no daban crédito.
“No voy a valorar todavía las listas ni voy a valorar las incorporaciones al gobierno futuro. Ahora solamente lo que estamos haciendo es negociándolo y hablándolo y yo soy muy amiga de ser muy discreta”, aseguraba este jueves la candidata del PP y presidenta madrileña. Desde su equipo, las respuestas eran similares: “Se están elaborando las listas, en cuanto estén cerradas se anunciará”, respondía un portavoz de la presidenta a elDiario.es a la pregunta de si no existe cierto temor a que Cantó no pueda incorporarse en las listas tal y como había anunciado el día antes la dirección de Casado. “Cuando se anuncien las listas se concretará el quién va en ellas”, añadía.
Fuentes del PP atribuyen el fichaje de Cantó al secretario general del partido, Teodoro García Egea, que ya fue responsable de comandar la operación para convencer a los tránsfugas de Murcia para hacer descarrilar la moción de censura contra el presidente popular, Fernando López Miras. Las mismas fuentes sostienen que Ayuso intentó dar marcha atrás después de haber aceptado el nombre de Cantó. Al parecer, García Egea habría negociado con Cantó el número 3 de la lista, algo en lo que no estaría de acuerdo la presidenta. Ayuso dijo en público horas antes de conocerse el fichaje de Cantó que los primeros nombres de la lista los ocuparán sus siete consejeros además de la secretaria general del partido en Madrid, Ana Camins, y el director de campaña de la candidata y hasta ahora portavoz del PP en la Asamblea, Alfonso Serrano. Eso son un total de diez.
En el PP han vendido la incorporación de Cantó como una forma de agrandar el partido. “El PP abrió las puertas a simpatizantes, afiliados y cargos de Ciudadanos, y con la incorporación de Cantó, nuestro partido se hace más grande”, dijo la formación en un comunicado. Cantó, que en un primer momento no confirmó el fichaje, este jueves se paseaba por televisiones y radios para agradecer la propuesta del PP. Según explicó, se reunió este miércoles con el jefe de gabinete de Ayuso, Miguel Ángel Rodríguez, para cerrar las condiciones, además de hablar por teléfono con la propia Ayuso y Casado. Lo que parece claro es que ni la presidenta regional ni nadie de su equipo dio por buena la incorporación que confirmó la dirección de Casado. “Es una decisión del partido”, apuntan desde Génova. Desde Sol, creen que Ayuso no necesita este tipo de fichajes porque tiene “tirón” por sí misma.
Dudas jurídicas
Al margen del choque entre la dirección del partido y la candidata a los comicios del 4M, aún queda por dilucidar si Cantó podrá finalmente ser candidato. Según la ley Electoral de la Comunidad de Madrid, son elegibles los ciudadanos que tengan “la condición de elector”. Estos son los mayores de edad que ostenten la condición política de ciudadanos de la Comunidad de Madrid según el artículo 7 del Estatuto de Autonomía, que recoge que la tendrán quienes tengan vecindad administrativa en cualquiera de sus municipios. Para su ejercicio “es indispensable la inscripción en el censo electoral vigente” y en los comicios autonómicos regirá “el censo electoral único referido al territorio de la Comunidad de Madrid”.
La norma autonómica induce a duda, sin embargo, en su artículo 4, en el que establece que los candidatos que no estén en las listas del Censo Electoral vigente podrán serlo siempre y cuando acrediten, “de modo fehaciente”, que reúnen “todas las condiciones exigidas para serlo”. Es el artículo al que se acoge el PP para defender que Cantó será candidato. Aluden a la “vecindad administrativa” defendiendo que el exdirigente de Ciudadanos tiene casa en Madrid, además de familiares.
Por otra parte, la ley estatal, la LOREG, establece en artículo 39 que el censo es el que hay dos meses antes de la convocatoria de las elecciones. También el Tribunal Constitucional tiene jurisprudencia sobre este asunto, y establece que para las elecciones autonómicas lo esencial es la vecindad administrativa y figurar en el censo de la comunidad.
Los expertos consultados por elDiario.es ponen en cuestión la argumentación del PP y defienden que de ser avalada por los jueces podría general un “mal precedente”. “Desde que se convocan las elecciones [en este caso el 11 de marzo], el censo se cierra. Si Toni Cantó se empadronó después no aparecerá en ese censo y en principio no debería poder ser candidato y cualquier otra cosa es una irregularidad”, asegura Javier Lorenzo, profesor de ciencias políticas de la Carlos III especializado en procesos electorales.
La cuestión está, por tanto, aún en el aire y serán los integrantes de la Junta Electoral quienes determinen si Cantó puede ser candidato. Mientras eso sucede, la llegada al PP del dirigente de Ciudadanos, que salió del partido de Inés Arrimadas elogiando la figura de Ayuso, pone de relieve las tiranteces entre la presidenta madrileña y Casado. En Génova hace tiempo que consideran que la presidenta –a la que el líder del PP designó personalmente como candidata en 2019 por su estrecha relación de amistad– vuela demasiado libre, algo que ha provocado un distanciamiento entre Casado y Ayuso, sobre todo desde el nombramiento de Miguel Ángel Rodríguez. Las tensiones crecen ahora con el aterrizaje atropellado de Cantó.