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Cantabria da marcha atrás al cierre del interior de la hostelería y permite su acceso a personas con pasaporte COVID

Pasaporte COVID.

Rubén Alonso / Laro García

29 de julio de 2021 20:43 h

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Tan solo 24 horas después de que haya entrado en vigor el cierre del interior de la hostelería en 19 municipios de Cantabria en riesgo alto por COVID-19, el Gobierno autonómico ha dado marcha atrás en esta medida permitiendo su apertura desde este viernes -una vez se publique en el Boletín Oficial de Cantabria (BOC)- para personas con pasaporte COVID.

El vicepresidente autonómico, Pablo Zuloaga (PSOE), había adelantado esta decisión acordada este jueves en el Consejo de Gobierno, aunque su aplicación requería del visto bueno de los servicios jurídicos, un aval que se ha producido horas más tarde, de manera que el Ejecutivo modifica las restricciones fijadas en el semáforo COVID y las suaviza para los municipios en nivel de riesgo alto.

Este giro de guion llega tras dos días de intensas discrepancias en el seno del bipartito PRC-PSOE desde el momento en el que Sanidad dio a conocer el martes la actualización del semáforo COVID con casi una veintena de localidades en nivel 3, entre ellas Santander. El presidente, Miguel Ángel Revilla (PRC), criticó la medida señalando que cerrar los interiores “no iba a cambiar gran cosa” y pidió públicamente al titular de Sanidad, el socialista Miguel Rodríguez, una rectificación.

Esta corrección ha llegado siguiendo una fórmula que se aplica en Galicia desde hace dos semanas y que Canarias también ha empleado hasta que este mismo jueves el Tribunal Superior de Justicia de este territorio la ha tumbado. Se trata pues de una medida que genera dudas jurídicas y que los propios expertos en bioética no terminan de ver clara al considerarla “discriminatoria hasta que toda la población no haya tenido acceso a la vacuna”. No obstante, Cantabria ha decidido aplicarla después de haberla propuesto este martes en el Consejo Interterritorial de Salud Pública sin lograr consenso para que se implante en todas las comunidades.

Según ha informado la Consejería de Sanidad en nota de prensa, los técnicos de Salud Pública y los Servicios Jurídicos de este departamento han avalado que los establecimientos de hostelería y restauración puedan, “de forma excepcional, permitir la entrada de personas en su interior siempre y cuando dispongan de pasaporte COVID completo y con un aforo máximo de un tercio”. La modificación de la norma, que será aplicable en los niveles 3 y 4 de riesgo, se publicará este viernes en el BOC, y entrará en vigor en el mismo momento de su publicación.

La autoridad sanitaria quiere así “evitar el impacto de determinadas medidas restrictivas en plena época estival, pero sin comprometer con ello la salud de las personas”. Por eso, según recoge la nota, “insta a la ciudadanía a no rebajar, bajo ninguna circunstancia, las medidas de precaución, que siguen siendo imprescindibles para frenar la expansión descontrolada del virus”.

En este sentido, Sanidad recuerda que dicho certificado del estado de salud de los ciudadanos se emite en tres circunstancias: con la pauta completa de vacunación; si se acredita haber pasado la enfermedad desde 11 a 180 días después de haber tenido PCR positiva (el llamado pasaporte de recuperación) y el pasaporte de prueba negativa, que se dispensa a personas con prueba diagnóstica PDIA negativa, realizada en las 72 horas anteriores.

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