La multitudinària manifestació de la Meridiana apunta al Parlament per reclamar una majoria independentista a les eleccions.
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El president de la Generalitat, Artur Mas, valora la manifestació de la Diada: “Orgullo confianza e ilusión”, han sido sus palabras iniciales. Mas ha agradecido el comportamiento ejemplar de la ciudadanía y la inmensa capacidad de mobilización, “un mensaje clarísimo a toda Europa y todo el mundo”
Mas ha dicho que habla como president y no como candidato (ocupa el número 4 por Barcelona de Junts pel Sí) para después llamar al voto: “En la calle se influye pero en las urnas se decide”. Y ha lanzado un mensaje directo hacia el Estado, al que ha pedido que “deje su orgullo imperial” y de “amenazar con las leyes”. “Si hay que cambiar la ley, cambiémosla entre todos. No pasará nada, no se acabará el mundo”, ha dicho Mas.
La vicesecretaria de Estudios y Programas del PP, Andrea Levy, ha calificado como “legítima” la manifestación independentista que esta tarde ha llenado la avenida Meridiana de Barcelona, pero ha remarcado que “Catalunya es muchísimo más plural” y que “lo veremos el próximo 27 de septiembre en las urnas”.
Levy asegurado que el independentismo “no es la única voz que hay en Catalunya” y ha puesto la manifestación como una prueba de que “España es una democracia y de que se pueden celebrar manifestaciones por mucho que hayamos oído a los independistas decir que España les oprime”. Sin embargo, Levy ha dicho que el PP se siente “apenado” al ver que “algunos” han usado la festividad de la Diada “para hacer un acto electoral”, en referencia al presidente de la Generalitat, Artur Mas.
El cabeza de lista de Catalunya Sí que es Pot, Lluís Rabell, ha reconocido el “gran éxito” de la convocatoria de la Via Lliure que, a su juicio, ha demostrado la existencia de un conflicto político que “no tiene freno”. Para Rabell, la Via Lliure demuestra “un anhelo democrático muy potente”, pero ha advertido que para conseguir la independencia “no hay atajos”. Rabell, que no ha participado en la Via Lliure al considerarla un acto electoralista orquestado por Artur Mas, ha reconocido que la convocatoria “ha representado un gran éxito y una gran movilización”.
“Para nosotros, esto demuestra que tenemos un conflicto político planteado, que hay una anhelo democrático muy potente y que hay una parte importantísima de la sociedad catalana que ha situado en su horizonte la independencia del país”, ha dicho Rabell. Sin embargo, también ha resaltado que “igual que mucha gente ha salido a la calle, mucha más es la gente de Catalunya que desea dar una salida democrática a este atolladero” y prefiere “la convocatoria de un referendo que pueda desencallar esta situación”.
Cientos de personas han participado en la marcha que cada año organiza la izquierda independentista la jornada del 11-S. La manifestación ha empezado unas horas después de la multitudinaria Via Lliure, en la misma avenida Meridiana, y ha transcurrido por las calles de la ciudad para finalizar en el Mercado del Born, donde tienen ahora lugar los parlamentos. La marcha, bajo el lema 'Países Catalanes, camino hacia la libertad', cuenta con el apoyo de la CUP y decenas de colectivos de la izquierda independentista.
El candidato del PSC a la presidencia de la Generalitat, Miquel Iceta, ha pedido no caer en una “guerra de cifras” sobre la participación en la Via Lliure, ya que ha destacado que, en cualquier caso, se constata que “una parte muy importante de la sociedad catalana” quiere la independencia o no está a favor de mantener las condiciones actuales.
Por este motivo, Iceta ha asegurado que la reforma constitucional se vuelve “más necesaria que nunca” y ha avisado de que “los partidos españoles que no lo sepan ver se convierten inmediatamente en parte del problema”. Como hoy había “muchísima gente” en la manifestación independentista, pero también “mucha que no ha ido”, Iceta ha llamado a votar para tener datos certeros de lo que opinan los catalanes.
La candidata de Ciutadans a la presidencia de la Generalitat, Inés Arrimadas, ya ha valorado la manifestación de la Meridiana de esta tarde. “Millones de catalanes se han quedado en casa”, ha dicho Arrimadas.
Arrimadas ha expresado su “respeto” por los miles de ciudadanos que “libremente” han participado en la manifestación independentista de la Diada, pero ha reclamado asimismo respeto por los “millones de personas que se han quedado en casa”, que “también son catalanes como los que han ido” y están “deseosos” de que lleguen las elecciones del 27 de septiembre para “manifestarse en las urnas”, en las elecciones catalanas que ve como las “más importantes de los últimos 30 años”.
“No podemos seguir con un gobierno y un presidente que instrumentalizan las instituciones y las fiestas de todos los catalanes”, ha recalcado Arrimadas.
La presidenciable ha minimizado la afluencia de participación en la manifestación de la Via Lliure ya que, ha argumentado, “lleva meses organizándose con recursos públicos y con el impulso del Govern y de la figura del president”.
Arrimadas empezó ayer la campaña reivindicándose como la candidata del 'no'.
El conseller de presidencia de la Generlitat, Francesc Homs, ha respondido a las críticas que el Gobierno ha vertido al uso de la Diada por parte de los partidos independentistas. Homs ha considerado que la Via Lliure merece el “respeto y consideración” del Gobierno, en lugar de “menosprecio”. En su comparecencia posterior al consejo de ministros, la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha avisado a Artur Mas que una cosa es tener mayoría para gobernar -como apunta la última encuesta del CIS- y otra distinta decidir “sobre lo que es España”, algo que, a su juicio, corresponde al conjunto de los españoles. Homs ha recriminado la actitud que viene teniendo el Gobierno de España y el PP, ya que, a su juicio “más allá de que uno esté de acuerdo o no con el fondo de la manifestación, como mínimo hacer las cosas de esta manera tan democrática y pacífica merece algo de respeto y consideración”.
La alcaldesa de Barcelona ha felicitado a organizadores, participantes y servicios técnicos por el éxito de la movilización multitudinaria. Colau ha añadido que TMB ha reforzado el servicio de metro pero la gran afluencia en poco tiempo ha obligado a regular los accesos.