El dispositivo tecnológico que usa la DGT para mejorar la seguridad vial

La Dirección General de Tráfico (DGT) ha puesto en marcha una solución innovadora para reforzar la seguridad en las carreteras españolas. La nueva tecnología, basada en el Internet de las Cosas (IoT), consiste en la implantación de conos conectados que permiten una gestión más eficiente de las obras viales y una comunicación en tiempo real con el sistema nacional de movilidad.

Cómo funciona

Estos dispositivos se instalan tanto en autopistas de alta velocidad como en carreteras secundarias, marcando de forma precisa el inicio y la finalización de las zonas en obra. Al estar conectados, los conos transmiten datos de ubicación exacta al Punto de Acceso Nacional (NAP por sus siglas en inglés), facilitando la coordinación de las intervenciones y la optimización de los recursos destinados a la conservación y mantenimiento de la vía.

La información recabada se envía mediante protocolos estandarizados y en formato JSON a la plataforma de vehículo conectado del NAP, de acuerdo con lo establecido en la Resolución de 17 de enero de 2025 de la DGT. Este procedimiento asegura que los datos sean transmitidos de manera segura, utilizando conexiones cifradas y certificados digitales para garantizar su integridad.

Protección a los trabajadores 

Uno de los principales beneficios de los conos conectados es la protección que ofrecen a los trabajadores de la vía. Al alertar a los conductores sobre la presencia de zonas en obra mediante paneles informativos o directamente en sus vehículos conectados, se reducen los riesgos de accidentes y se minimizan maniobras bruscas que pueden provocar colisiones en áreas de mantenimiento.

La capacidad de estos dispositivos para operar sin intervención humana permite que, en situaciones imprevistas—como daños en la vía o incidencias repentinas—los conos se activen de forma automática, enviando alertas en tiempo real a los usuarios de la carretera. Esta función resulta especialmente útil cuando no hay operarios presentes, garantizando una respuesta inmediata ante cualquier eventualidad.

El uso de los conos conectados se integra en una estrategia más amplia de la DGT para incorporar soluciones inteligentes en la gestión del tráfico. Junto a otras tecnologías, como los Sistemas de Asistencia a la Conducción (ADAS), cámaras inteligentes y señalización dinámica basada en datos en tiempo real, este dispositivo refuerza el compromiso de la administración con la seguridad y eficiencia en las infraestructuras viales.

De cara al futuro, se prevé que la integración de nuevas soluciones y el despliegue de redes 5G potencien aún más estas capacidades, posicionando a España como referente en seguridad vial y gestión inteligente de infraestructuras.