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Zaragoza en Común pedirá una comisión de investigación por el 'kioskogate' y revisar la licencia del parque Pignatelli

El quiosco del parque Pignatelli, en Zaragoza, esta semana.

Luis Faci

1 de marzo de 2025 22:48 h

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El grupo de Zaragoza en Común (ZeC) en el Ayuntamiento de Zaragoza pedirá una comisión de investigación por los quioscos concedidos en concursos públicos hace cuatro años a un empresario muy próximo al entonces alcalde y ahora presidente del Gobierno de Aragón, Jorge Azcón. A su vez, la formación reclamará que se revise la licencia concedida a la firma Martipan -propiedad de Juan Forcén- para la terraza del parque Pignatelli por “posibles vicios de nulidad detectados en el expediente”. 

El mencionado quiosco fue adjudicado a Martipan en un concurso que llevaba aparejado también una zona recreativa aledaña. Ambos negocios llevaban siendo regentados desde hacía décadas por sendos propietarios muy conocidos en el barrio. Pese a que llevaron el procedimiento a la Justicia por las presuntas irregularidades que detectaron, los tribunales dieron la razón a la adjudicataria. 

No será la primera vez que el 'kioskogate' termina en un intento de comisión de investigación. Esto mismo sucedió hace dos años, también a iniciativa de Zaragoza en Común; entonces, a cuenta de una terraza en el Parque Grande. Pese a que Vox inicialmente apoyó la iniciativa, a última hora cambió de postura y tumbó la posibilidad de investigar el procedimiento. “No haría más que complicar el asunto”, justificó entonces el portavoz de Vox, Julio Calvo. “Ustedes carecen de palabra”, les acusó Pedro Santisteve (ZEC). Ahora, con el tiempo transcurrido, un cambio de tercio parece complicado.

La polémica del 'kioskogate' ha resurgido en los últimos días, puesto que Martipan solicitó la Gerencia de Urbanismo del Ayuntamiento -presidido ahora por la popular Natalia Chueca, que fue precisamente quien como consejera impulsó la renovación de los quioscos con concesión municipal- desarrollar solo la parte de terraza y dejar la zona recreativa. El equipo de gobierno del PP ha aceptado esta petición.

“Posibles vicios de nulidad”

Esta cuestión ha llevado a ZEC a reclamar una comisión de investigación en torno a todo el proceso, con especial atención a lo sucedido en el quiosco del parque Pignatelli -el situado al principio, ya que el más próximo al canal lleva operando desde hace casi tres años-. En este caso, Domínguez va a solicitar la revisión de la licencia concedida para las obras de construcción “por posibles vicios de nulidad detectados en el expediente”. “De concederse la licencia -explica el concejal de ZEC- podríamos estar ante un trato de favor”.

En concreto, según Domínguez, el informe emitido por el servicio de Infraestructura Verde y suscrito el pasado 26 de noviembre apunta a que, según marca el Plan General de Ordenación Urbana de Zaragoza, se precisa de un informe “del órgano competente en materia de protección del patrimonio histórico-artístico”. Este requerimiento aparece en las normas urbanísticas y el documento alude expresamente al parque Pignatelli como una de las zonas incluidas. El objetivo sería “preservar las características ambientales de los elementos catalogados y evitar actuaciones que puedan deteriorarlos”, siempre que la intervención tenga que ver con “construcciones de nueva planta”, como es el caso.

Sin embargo, según refleja Zaragoza en Común, “en el expediente no consta que se haya remitido el proyecto a la Comisión Municipal de Patrimonio, ni existe la preceptiva autorización de esta Comisión”. “Estamos -añade el edil de ZEC- ante una situación similar a la que se dio en el expediente de la clínica del Doctor Lozano, en el que se tuvo que reconocer la nulidad de la actuación del Ayuntamiento”. Y añade Domínguez: “En este caso, además de constatar la falta de cuidado hacia el patrimonio, podemos estar ante un nuevo posible trato de favor” al mencionado empresario. “Por todo ello -concluye el concejal-, Zaragoza en Común pedirá una comisión de investigación por los quioscos de Forcén”.

Hay que recordar que, de los trece quioscos que sacó el Ayuntamiento de -entonces- Jorge Azcón a licitación, más de la mitad -siete- acabron en poder de este empresario. Especialmente llamativo fue el caso del Parque Grande, donde se quedó con cinco de los seis. Ahora, todos ellos han sido convertidos en franquicias. 

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