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El presidente del Parlament balear de Vox, quien rompió la foto de víctimas de Franco: “Sin ley no hay orden, sino anarquía”

El presidente del Parlament balear, Gabriel Le Senne (Vox), durante el acto institucional por el Día de las Illes Balears

Esther Ballesteros

Mallorca —
1 de marzo de 2025 15:10 h

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A las puertas del banquillo por un delito de odio por romper, en pleno debate de la derogación de la Ley balear de memoria democrática, el retrato de tres víctimas del franquismo, el presidente del Parlament balear, Gabriel Le Senne (Vox), ha encabezado este sábado el acto institucional por la Diada de Balears apelando al “buen funcionamiento” de la Cámara, a defender “el imperio de la Ley” y a la necesidad de “cuidar las instituciones democráticas”. Unas reivindicaciones que chocan de frente con su actitud al frente de la institución y a su negativa a abandonar el cargo pese a contar con un auto de apertura de juicio a sus espaldas, en contra de lo que ya hicieron otros presidentes que fueron investigados en su día y que dimitieron incluso sin haber sido enviados a juicio.

La celebración, que coincide con el 42 aniversario del Estatut d'Autonomia balear, ha contado con menos asistentes del ámbito político de lo habitual en protesta por la presencia de Le Senne en un acto tan conmemorativo para los isleños. Desde la oposición, Més per Mallorca anunció este viernes que no asistiría a la recepción ofrecida por Le Senne y, de hecho, la formación ecosoberanista ya manifestó, después de que el juez abriera juicio oral contra el dirigente de extrema derecha, que no compartirá ningún espacio protocolario con él.

“Mientras Le Senne continúe al frente del ámbito institucional, Més per Mallorca no compartirá espacios protocolarios con esta persona”, aseveró el portavoz parlamentario de este partido, Lluís Apesteguia. “Volveremos a celebrar la autonomía cuando al frente del Parlament haya alguien que tenga un mínimo de respeto por nuestras instituciones”, sentenció.

En cuanto al PSIB-PSOE, tan solo han acudido al evento su portavoz en la Cámara, Iago Negueruela, y la vicepresidenta segunda de la Mesa, Mercedes Garrido. Tras el discurso de Le Senne, Negueruela ha recriminado el “odio” desprendido de sus palabras y ha aseverado que nunca antes había comandado el acto por el Día de Balears un presidente investigado y, en este caso ya, con apertura de juicio oral por un delito de odio, que es, a juicio del socialista, “probablemente el peor delito que puede cometer un presidente del Parlament”.

Durante su intervención, lejos de hacer un ejercicio de autocrítica, Le Senne ha incidido en la necesidad de evitar comportamientos inapropiados en el Parlament, utilizando los instrumentos reglamentarios para ello, en alusión velada a las dos diputadas socialistas a quienes, tras romper la fotografía, expulsó por negarse a cambiarse las camisetas en las que figuraba el mismo retrato de las asesinadas por el franquismo. Una expulsión que los propios letrados del Parlament afearon a Le Senne, al señalar que no hay un artículo concreto en el reglamento que establezca que los miembros de la Mesa no deban llevar prendas con imágenes de este tipo.

En esta misma línea, Le Senne ha destacado la importancia de elevar el nivel del debate parlamentario: “Los ciudadanos nos han votado con el deseo de que mejoremos sus vidas. Poco favor les hacemos si la falta de decoro es casi lo único que les llega de nuestra actividad parlamentaria”, ha continuado el parlamentario de Vox, quien, para ello, ha considerado necesario que “todos conozcamos bien el reglamento y colaboremos respetándolo”.  

“El imperio de la ley, íntimamente relacionado con el Estado de Derecho, es un principio básico de la sociedad moderna, sin el cual nada se sostiene. Sin ley no hay orden, sino anarquía. Cuando el Estado no hace respetar la ley ni hace justicia en tiempo y forma a quien la pide, abre la puerta a que la ciudadanía se tome la justicia por su mano”, ha llegado a deslizar, aprovechando su discurso para arremeter contra “la inmigración ilegal y la ocupación de inmuebles”.

“Hemos tenido ya varios casos en estas islas donde la desesperación por la falta de soluciones ha conducido a la ciudadanía al desorden tumultuario. No podemos ni debemos normalizar que existan normas que se incumplan de manera general y sistemática. Y deberíamos comenzar predicando con el ejemplo, con el cumplimiento puntilloso de las normas que afectan a las propias cámaras legislativas”, ha abundado. 

Asimismo, haciendo mención al descenso de la natalidad -recogiendo otro de los postulados de la extrema derecha-, ha llegado a calificar “la falta de niños” como “el gran problema” de Balears: “Existe una tendencia suicida, porque sin niños, sin jóvenes, no hay futuro para nuestra cultura, para nuestra civilización, que menguará hasta desaparecer. Por ello hago un llamamiento a todos los grupos parlamentarios y a todas las instituciones, para poner este problema crítico de la falta de natalidad en el centro del debate público. No tenemos tiempo”.

El pasado miércoles, la Mesa del Parlament acordó por unanimidad reclamar un informe jurídico para averiguar cómo debe tramitarse la solicitud de suspensión de Le Senne. Desde la oposición, tanto Unidas Podemos como Més per Menorca recriminaron que, con ello, conservadores y extrema derecha “quieren dilatar” la tramitación, un procedimiento político que, señaló el portavoz de la formación ecosoberanista, Josep Castells, no debería atender a criterios judiciales.

Pese a las peticiones de dimisión y suspensión de funciones formuladas por la oposición, el dirigente de Vox continúa aferrado al cargo, asegurando no ver “motivos” para abandonarlo y encomendándose al recurso de apelación que interpuso ante la Audiencia Provincial de Balears para reclamar el sobreseimiento de las pesquisas abiertas contra él.

No solo eso. Tanto PP como Vox, a pesar de las numerosas divergencias surgidas entre ambos desde inicios de legislatura y de que los de Bambú hicieran el año pasado saltar por los aires los acuerdos autonómicos de gobernabilidad con los populares, continúan estos días alcanzando acuerdos que, a juicio de la oposición, no buscan más que “salvar” a Le Senne y que el PP pueda sacar adelante sus iniciativas sin nececesidad de dialogar con la izquierda. Los últimos pactos entre ambos se han materializado en la retirada a última hora de la enmienda a la totalidad que Vox había presentado a la Ley de Conciliación impulsada por el Ejecutivo de Prohens, así como en la propuesta conjunta de que Josep Codony sea el nuevo director general de la radiotelevisión autonómica IB3.

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